AUDIENCIA: EL PAPA AGRADECE LAS ORACIONES POR SU RESTABLECIMIENTO
NUEVA EVANGELIZACIÓN, REMEDIO PARA LOS MALES QUE PADECE ARGENTINA
IMPORTANCIA DE LA TUTELA Y PROMOCIÓN HUMANA Y RELIGIOSA DE LAS MUJERES

PEREGRINACIÓN DE ACCIÓN DE GRACIAS POR EL DON DE LA IGLESIA EN POLONIA

ÁNGELUS: NO EXISTEN CAMINOS INTERMEDIOS PARA QUIEN ENCUENTRA A JESÚS
DECÁLOGO DE ASÍS POR LA PAZ
INTENCIÓN GENERAL DE ORACIÓN DEL MES DE MARZO
III CONGRESO EUROPEO DE SANTUARIOS Y PEREGRINACIONES

PRESCRIBEN AL PAPA REPOSO POR PERSISTENTE DOLOR EN LA RODILLA
CANCELADO EL PROYECTO DE CONSTRUCCIÓN DE LA MEZQUITA EN NAZARET
ENTREVISTA AL PREFECTO DE LA CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE
EL CARDENAL SEPE REAFIRMA EN LA INDIA LA IMPORTANCIA DEL DIÁLOGO
SEGUNDA MEDITACIÓN DE CUARESMA

NOMBRAMIENTOS PONTIFICIOS
COMENTARIO A LA LITURGIA DEL DOMINGO

LA MEJOR EXPRESIÓN DE LA IDENTIDAD CRISTIANA DE AMÉRICA SON SUS SANTOS
DECLARACIÓN FINAL DEL COLOQUIO DE BERLÍN
DIÓCESIS ALEMANA ABANDONA EL SISTEMA PÚBLICO DE CONSULTORIOS
LOS OBISPOS COLOMBIANOS INVITAN A PARTICIPAR EN LAS ELECCIONES
ELEGIDO NUEVO PRESIDENTE DE LA CONFERENCIA EPISCOPAL INDIA


MARZO 2002
SEMANA DEL 4 AL 10

 

AUDIENCIA: EL PAPA AGRADECE LAS ORACIONES POR SU RESTABLECIMIENTO

La catequesis del miércoles se desarrolló en dos momentos. El primero de ellos en el Aula Pablo VI, sin la presencia del Papa, donde fue leída la catequesis preparada por el Pontífice, con los resúmenes en las diversas lenguas, y la segunda en la Plaza de San Pedro donde el Santo Padre, desde la ventana, bendijo a los presentes.

El Salmo elegido por el Santo Padre para este miércoles correspondió a los Laudes del martes de la segunda semana. El salmo 64 es como un himno que nos fascina en su última parte cuando nos presenta una escena primaveral, llena de frescura, esmaltada de colores y atravesada por voces de alegría. Pero lo primero que nos ofrece este Salmo es el tema histórico del perdón de los pecados y de la acogida por parte de Dios. Acto seguido aparece el tema cósmico de la acción de Dios sobre los mares y los montes, describiendo al final la primavera, con el renacer de las cosas a la vida.

En el asolado y árido panorama del cercano Oriente, la lluvia fecundadora es expresión de la fidelidad al Señor hacia la creación. La Biblia nos presenta a la creación como sede de la humanidad y al pecado como un atentado contra el orden y la perfección del mundo. Por lo tanto la conversión y el perdón recibido devuelven la integridad y la armonía al cosmos. La primera parte del Salmo se realiza en el templo de Sión. Allí, los fieles, perdonados de sus pecados, se sienten huéspedes del Altísimo, cercanos a él, dispuestos a ser admitidos a su mesa y a participar en la fiesta de la intimidad divina.

Dentro de la celebración indicada por el Salmo, el Papa hace notar cómo Dios Creador es capaz de dominar y hacer callar el tumulto de las aguas marinas, que en la Biblia son el símbolo del caos, opuesto al orden de la creación. La conclusión a que lleva el Salmo es que aquel Dios que borra el caos y el mal del mundo y de la historia, puede vencer y perdonar la maldad y el pecado que el orante lleva dentro de sí y que presenta en el templo con la certeza de la purificación divina. Es aquí donde entran en juego las otras aguas, las de la vida y la fecundidad, que en primavera riegan la tierra e idealmente prefiguran la nueva vida del fiel perdonado.

Todas las criaturas, como en una procesión, se dirigen a su Creador y Soberano, danzando y cantando, alabando y orando. Contemplación teológica y abandono poético se funden en esta expresión lírica convirtiéndose en adoración y alabanza. El encuentro más intenso indicado por el salmista es el que une a la creación con la redención. Como la tierra en primavera resurge por la acción del Creador, así el hombre resurge de su pecado por la acción del Redentor. De esta manera el Salmo se convierte en un canto a la gracia divina.

RESUMEN DE LA CATEQUESIS EN ESPAÑOL

Queridos hermanos y hermanas:

El Salmo que hemos escuchado presenta el tema del perdón de los pecados y la acogida de Dios. Para la Biblia, la creación es como la casa de la humanidad y el pecado es un atentado al orden y perfección del mundo. Por eso la conversión y el perdón devuelven la integridad y armonía al cosmos.

Dios, que quita el caos y el mal del mundo, puede vencer y perdonar la maldad y el pecado, que el creyente tiene en su interior y presenta en el templo confiado en la purificación divina. Todas las criaturas se dirigen a su Creador bailando y cantando, alabando y rezando. Una vez más la naturaleza es signo elocuente de la acción divina. Contemplación teológica y expresión poética convergen y se convierten en adoración y alabanza. Pero el encuentro más intenso es el que une creación y redención.

Saludo con afecto a los visitantes de lengua española, en particular a los peregrinos de Madrid y de diversos Países latinoamericanos. Que nuestro respeto y amor a la creación se transforme en un canto de agradecimiento y alabanza a Dios.

* * * * * * * *

Terminados los saludos en las diversas lenguas el Santo Padre, como de costumbre, ha dirigido unas palabras afectuosas a los jóvenes, a los enfermos y a los recién casados. A los jóvenes les ha exhortado a seguir el itinerario penitencial hacia la Pascua con generosa disponibilidad a los designios del Señor.

Ha invitado a los enfermos a poner a los pies de la Cruz de Cristo sus sufrimientos, que es don de salvación para el mundo. Y a los recién casados les ha exhortado a acoger con gran disponibilidad la gracia del Espíritu Santo para proseguir siempre por el sendero de la auténtica comunión.

Los participantes en la Audiencia General, terminada la catequesis, confluyeron en la Plaza de San Pedro para recibir la Bendición Apostólica. Juan Pablo II desde la ventana de su despacho que se asoma sobre la Plaza, saludó a los presentes en italiano, agradeciendo su presencia y las oraciones por su rápido restablecimiento con estas palabras: "Gracias por vuestra visita y por las oraciones que habéis elevado al Señor por mi rápida curación. Hemos meditado juntos la Palabra de Dios tomada del Salmo 64, que nos invita a no detenernos en lo que el mundo promete, sino a considerar más bien lo que promete el Creador del mundo. Con estos sentimientos os exhorto a confiar siempre en la Providencia divina, fuente de paz y de serenidad. Sigamos recorriendo el itinerario cuaresmal, con la mirada dirigida a Cristo, a quien podemos encontrar en la intimidad de la oración".

Al final de estas palabras, el Pontífice entonó el Padre nuestro en latín, al final del cual impartió a los presentes la Bendición Apostólica.

 

NUEVA EVANGELIZACIÓN, REMEDIO PARA LOS MALES QUE PADECE ARGENTINA

Juan Pablo II concelebró el martes la santa Misa en su capilla privada con los obispos argentinos pertenecientes al segundo grupo de prelados de este país que realizan su quinquenal visita ad limina. En días anteriores el Obispo de Roma los recibió uno a uno y al final de la visita les entregó un discurso colectivo.

"En vuestra peregrinación a las tumbas de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo habéis encontrado un nuevo dinamismo para proseguir en vuestra misión episcopal, siendo conscientes de que Cristo no abandona nunca a su Iglesia", dice el Papa, que recuerda que la celebración, aún reciente, del Gran Jubileo ha de traducirse en fervientes propósitos y en líneas de acción concreta.

A este respecto, el Pontífice aprecia el esmero puesto por llevar a la práctica las orientaciones dadas en la Carta apostólica Tertio millennio adveniente para la preparación y celebración del Gran Jubileo que en Argentina, se fraguó en el Encuentro Eucarístico Nacional del año 2000, que incluyó un serio examen de conciencia favoreciendo el espíritu de reconciliación. Así mismo se ha llevado a cabo una amplia y capilar consulta a las distintas Iglesias particulares y a diversas comunidades cristianas con vistas a actualizar las Líneas pastorales para la Nueva Evangelización aprobadas en 1990. Todo ello, completado con la acogida y reflexión basada en la Carta apostólica Novo millennio ineunte.

El Papa alienta a los obispos argentinos en sus opciones por afrontar de manera eficaz la nueva evangelización, como son la perseverancia creativa de las cotidianas acciones de la pastoral ordinaria, la acogida cordial y la renovación en santidad por parte de las comunidades parroquiales, todo ello unido a la sólida formación cristiana que favorezca el compromiso misionero de los laicos.

"No dudéis nunca, en poner todo vuestro celo y empeño pastorales en los trabajos de la nueva evangelización, -recuerda Juan Pablo II- con la íntima convicción de que iluminará la acción de los laicos cristianos y podrá ser remedio eficaz y duradero para los duros y graves males que actualmente padecen muchos habitantes de vuestra Nación".

El Santo Padre exhorta a los pastores argentinos que en su acción pastoral cuenten siempre con la ayuda de los sacerdotes y aseguren el fructuoso ejercicio del ministerio sacerdotal. "El sacerdote -escribe el Papa-, antes de nada, es hombre de Dios y, por eso, nunca puede descuidar su vida espiritual. Y siendo la suya una misión exigente, corresponde a los Obispos, ayudarles, acompañarles y seguirles, preocupándose de las necesidades de su vida y proporcionándoles los medios materiales, espirituales y formativos para vivir con gozo y dignidad su ministerio.

Luego el Papa habla de la "vida parroquial" y dice que "entre las numerosas actividades que desarrolla una parroquia ninguna es tan vital o formativa para la comunidad como la celebración dominical del día del Señor y su Eucaristía". Por esa razón el Concilio Vaticano II recomienda que "los párrocos han de procurar que la celebración de la Eucaristía sea el centro y la cumbre de toda la vida de la comunidad cristiana". Se debe incrementar una acción pastoral que favorezca una participación más asidua de los fieles en la Eucaristía dominical, la cual ha de ser vivida no sólo como un precepto sino como una exigencia inscrita profundamente en la existencia cristiana.

Otro campo de la acción pastoral que requiere la atención del Papa es el de la promoción y defensa de la institución familiar, hoy tan atacada desde diversos frentes con múltiples y sutiles argumentos. Asistimos -señala el Santo Padre- a una corriente, muy difundida en algunas partes, que tiende a debilitar su verdadera naturaleza. Los mismos fieles católicos, en ocasiones, por variados motivos, no recurren al Sacramento del matrimonio para dar comienzo a su unión en el amor.

Conocedor del empeño de los prelados en defender y promover la institución familiar, el Papa afirma que "la extensión de la crisis del matrimonio y de la familia no ha de llevar al abatimiento o a la dejadez, al contrario, nos ha de impulsar a proclamar, con firmeza pastoral, como un auténtico servicio a la familia y a la sociedad, la verdad sobre el matrimonio y la familia establecida por Dios.

El Santo Padre pide a sus hermanos en el episcopado que acompañen a las familias y promuevan en sus diócesis los movimientos y asociaciones de espiritualidad matrimonial; "despertad su celo apostólico -dice- para que hagan propia la tarea de la nueva evangelización, abran sus puertas a quienes viven en situaciones difíciles, y den testimonio de la gran dignidad de un amor desinteresado e incondicional.

Finalmente el Papa dice tener presentes a los jóvenes argentinos, llamados a ser "centinelas de la aurora" de este nuevo milenio, esperanza de la Iglesia y de la Nación; a los pobres y necesitados, que han de seguir siendo objeto de los desvelos y atenciones de los prelados; a los profesionales de los diversos campos de la actividad humana, que han de ser los constructores de la Patria y de la sociedad renovada en estos momentos difíciles para nación a causa de la crisis económica; a los enfermos y a los ancianos; a los sacerdotes y demás consagrados, testigos de lo trascendente, en un mundo en el que todo cambia y parece arduo.

 

IMPORTANCIA DE LA TUTELA Y PROMOCIÓN HUMANA Y RELIGIOSA DE LAS MUJERES

En el día dedicado a la mujer, Juan Pablo II destacó la importancia de la "tutela y promoción humana y religiosa de las mujeres" y expresó su cercanía espiritual a todas aquellas que están en dificultades, al recibir a una delegación del Movimiento "Tra Noi".

Juan Pablo II expresó "en este día, dedicado de forma especial a la mujer", su "cercanía espiritual a las mujeres en dificultad, con el anhelo de que tengan siempre a su lado a personas dispuestas a sostenerlas, para que puedan realizar plenamente sus legítimas aspiraciones". El Papa, recibiendo el viernes a una delegación del Movimiento "Tra noi" - 'Entre Nosotros' - puso de relieve cómo este Movimiento, fundado hace cincuenta años por Don Sebastiano Plutino, "dedica, desde sus comienzos, todas sus energías" a la "tutela y promoción humana y religiosa de la mujer". Y ha señalado que el encuentro del viernes había tenido lugar "de forma providencial", precisamente en la fecha del 8 de marzo.

El fundador, Don Sebastiano Plutino que "entregó su vida al servicio de los más pobres y que falleció recientemente", fue un discípulo generoso del Beato Don Luis Orione - recordó el Santo Padre - y se inspiró en el "Pregón de Pío XII por un Mundo Mejor", de 1952. Pregón en el que el Pontífice afirmaba que el nuestro "es un mundo que hay que rehacer desde sus cimientos, que debe ser transformado de salvaje en humano y de humano en divino".

"Invitación que este fundador acogió con entusiasmo", señaló Juan Pablo II, tras recordar que "hace cincuenta años don Sebastiano Plutino reunió por primera vez, en el movimiento denominado 'Tra Noi', a un nutrido número de empleadas de hogar". Muchas de las cuales formaban parte de la asociación parroquial romana de Santa Zita, que había nacido a su vez para ofrecer un clima familiar y una formación cristiana a jóvenes muchachas que llegaban a Roma, procedentes de las regiones menos ricas de Italia, para trabajar precisamente en los humildes y fatigosos quehaceres del hogar.

El Pontífice expresó asimismo su satisfacción por la ampliación del Movimiento 'Tra Noi', que desarrolla su apostolado también en otras ciudades italianas y en Brasil. Y, tras agradecer al Señor por los frutos obtenidos, invitó a estos queridos hermanos y hermanas a mirar confiados hacia las nuevas perspectivas de desarrollo que se van abriendo. Ante las categorías sociales antiguas y nuevas, marginadas y en dificultades, que esperan su servicio. Como por ejemplo, los inmigrados, los ancianos y los jóvenes.

Al difundir la "espiritualidad de la acogida" - señaló Juan Pablo II - "podréis ser artífices de una verdadera fraternidad universal, en la que todo ser humano se sienta acogido, sin distinción de clase social, religión, cultura y nacionalidad". En este contexto, el Papa recomendó también, además "de la acogida material", "una adecuada formación religiosa". Y puso de relieve la importante labor que desarrolla este Movimiento en el "proyecto familias" y en el "proyecto jóvenes".

Asimismo, el Papa alentó a los miembros de esta asociación a ser "familia de familias", esmerándose siempre en la salvaguarda de los "irrenunciables valores humanos y cristianos" que han marcado toda su historia. Con el fin de "incidir de forma más eficaz en las estructuras sociales, dando voz al que no la tiene". Y, "en un mundo en el que brota el riesgo de un individualismo cerrado en sí mismo", los ha exhortado a ser "punto de referencia para aquellos que se sienten aislados y en poder de los eventos".

Juan Pablo II, subrayando la importancia de "mantener vivo e intensificar el contacto cotidiano con Dios, escuchando su Palabra, con la ayuda de la oración y de los sacramentos", "centrándolo todo en la Eucaristía", reiteró que "para renovar el mundo y transformarlo de salvaje en humano y de humano en divino" hay que ser santos, como el Beato Orione, en el que Don Sebastiano Plutino, se inspiró siempre, traduciendo su amor en elecciones significativas para la Iglesia y la sociedad.

 

PEREGRINACIÓN DE ACCIÓN DE GRACIAS POR EL DON DE LA IGLESIA EN POLONIA

Juan Pablo II elevó su acción de gracias a Dios, por el don de la Iglesia en Polonia y por el X aniversario de la reorganización de las estructuras administrativas eclesiales en este país, al recibir el sábado en audiencia a 1.200 peregrinos polacos.

En el X aniversario de la reorganización de las estructuras administrativas de la Iglesia en Polonia, Juan Pablo II recibió, en el Aula Pablo VI, a mil doscientos polacos procedentes de distintas diócesis de este país. Una peregrinación de acción de gracias a Dios - señaló el Papa - no sólo por este aniversario, sino también "por el don de la Santa Iglesia en nuestra patria".

El Pontífice saludando y agradeciendo a los peregrinos que encontró la mañana del sábado en un clima de fiesta - encabezados por sus Pastores, Cardenales, Arzobispos y Obispos - extendió su profunda gratitud a "toda la comunidad del Pueblo de Dios en Polonia", por la organización de la nueva estructura administrativa de la Iglesia, que se instituyó con la bula 'Totus Tuus Poloniae Populus', en la Solemnidad de la Anunciación del Señor, el 25 de marzo de 1992.

En virtud de este documento - explicó Juan Pablo II - "se han instituido 13 diócesis nuevas, estableciendo su pertenencia a las provincias eclesiásticas correspondientes y fijando sus confines. Se han producido cambios esenciales en la estructura de las cinco sedes metropolitanas que ya existían. Y, además, han surgido otras ocho, que han emprendido con gran impulso su misión".

En un balance de los esfuerzos cumplidos, el Papa se unió a la gratitud de estos peregrinos polacos refiriéndose también a los ricos frutos de esta reorganización, que se reflejan en la belleza de las nuevas catedrales; en la construcción de seminarios mayores; de casas para ejercicios espirituales y de centros pastorales. Asimismo, el Santo Padre señaló, con particular alegría, el que se haya hecho posible "la plena colaboración de las diócesis con las comunidades de vida consagrada y el desarrollo de las pastorales especiales".

"Espero que esta forma de colaboración ayude a elaborar un programa pastoral que responda a las exigencias de la nueva Evangelización y los desafíos de lugar y tiempo", deseó Juan Pablo II, destacando luego que "hoy es más necesario que nunca dar testimonio con la propia vida, con impulso y solicitud apostólica". Recomendando que "es necesaria", una cercanía constante de los Obispos a sus fieles, y viceversa, el Papa exhortó a "tener esta tarea como objeto de solicitud, oración y reflexión", poniendo de relieve también que se trata de "cuestiones extremamente importantes".

En este contexto, el Papa exhortó fervientemente a que se aprovechen plenamente las posibilidades creadas por la nueva organización administrativa de la Iglesia en Polonia. Y, renovando su exhortación a "los Obispos de cada una de las sedes metropolitanas a empeñarse totalmente en una seria reflexión pastoral en el ámbito de las estructuras eclesiásticas", Juan Pablo II quiso poner de relieve una vez más que "el objetivo de esta reorganización es la adaptación plena de la misión de la Iglesia, es decir de la evangelización, concebida, en sentido integral, a las condiciones y necesidades de los tiempos en los cuales vivimos y en los cuales vivirán las generaciones futuras de la patria polaca".

El Santo Padre extendió su exhortación a toda "la Iglesia en Polonia" para que elabore un plan de acción pastoral. Basado, en primer lugar, en el magisterio del Concilio Vaticano II, enriquecido a su vez por la Iglesia con los documentos que enlazan los dos milenios. Profundizando en los contenidos del Gran Jubileo del Cristianismo del Año Dos mil, y volviendo a la reflexión realizada durante las visitas pastorales que realizó en su patria, así como a las indicaciones transmitidas a los Obispos polacos durante sus Visitas ad Limina Apostolorum, en los años 1993 y 1998.

Juan Pablo II, destacando el impulso del ministerio pastoral de los sacerdotes que desarrollan su apostolado a menudo en tierras lejanas de su lugar de nacimiento, subrayó la importancia de que éstos encuentren apoyo y ayuda espiritual, tanto en sus obispos como en los fieles que se les ha confiado. Y recomendó a los hermanos obispos una atención especial en todo lo que se refiere a la "permanente formación intelectual y espiritual de los sacerdotes". A los mismos obispos y a todos los fieles polacos, el Papa les ha pedido que rodeen a los sacerdotes con un "amor exigente, consolando su espíritu con buenas palabras y sosteniéndolos con fervientes oraciones".

El Santo Padre finalizó su discurso recordando que "en la segunda mitad del siglo pasado, los fieles laicos en Polonia dieron numerosas pruebas de espíritu de sacrificio y de sincero apego a la Iglesia". Y, rogando a Dios para que "sigan esta buena tradición y asuman con nuevo empeño las tareas evangélicas, ocupando en la Iglesia y en la vida social el lugar que les corresponde", "según su específica vocación y en virtud de los santos Sacramentos". Qué el ejemplo y aliento de los Pastores - deseó Juan Pablo II - "impulse el apostolado de los laicos y renueve la colaboración de los fieles en la formación de un rostro nuevo de la Iglesia, en el comienzo del tercer milenio del Cristianismo".

 

ÁNGELUS: NO EXISTEN CAMINOS INTERMEDIOS PARA QUIEN ENCUENTRA A JESÚS

La alegría y la luz son los dos elementos que propone a nuestra consideración la liturgia del IV Domingo de Cuaresma, llamado tradicionalmente Domingo "Laetare…". "Alégrate, Jerusalén", son las palabras con que empieza el canto de entrada. Son palabras del Profeta Isaías, y con ellas la Iglesia, dijo el Santo Padre en su alocución anterior a la oración del Ángelus del domingo, nos invita al gozo cuando nos encontramos a mitad del camino penitencial de la Cuaresma.

El Evangelio narra las vicisitudes de un hombre ciego de nacimiento. Jesús, al verlo, hizo un poco de lodo con su saliva y lo aplicó a sus ojos diciéndole: "Ve a lavarte a la piscina de Siloé (que significa Enviado). Él fue, se lavó y volvió con vista". El Papa puso de relieve en sus palabras que el ciego de nacimiento representa al hombre marcado por el pecado, que desea conocer la verdad sobre sí mismo y sobre su propio destino, pero que se lo impide un mal congénito. Sólo Jesús puede sanarlo, pues es "la luz del mundo".

Esta confianza en Él hace que todo ser humano espiritualmente ciego de nacimiento tenga la posibilidad de "contemplar la luz" de nuevo, es decir, de nacer a la vida sobrenatural. Juan Pablo II, junto a la curación del ciego, destacó la incredulidad de los fariseos, resaltada por el Evangelio de Juan, quienes no quieren reconocer el milagro, dado que Jesús lo ha realizado en sábado, violando, a su juicio, la ley mosaica. De esta manera, afirmó el Papa, emerge una paradoja que Cristo resume con estas palabras: "Yo he venido a este mundo para un juicio: para que los que no ven, vean, y los que ven, se queden ciegos". Juan Pablo II a continuación añadió:

"Para quien encuentra a Jesús no existen caminos intermedios: o se reconoce la necesidad de Él y de su luz, o se prescinde de Él. En este último caso, una misma presunción impide, tanto al que se considera justo ante Dios como a quien se considera ateo, abrirse a la conversión auténtica. Nadie, queridos hermanos y hermanas, cierre su espíritu a Cristo. Él da a quien le acoge la luz de la fe, luz que es capaz de transformar los corazones y, por ende, la mentalidad, las situaciones sociales, políticas y económicas dominadas por el pecado".

El Santo Padre terminó sus palabras anteriores al rezo mariano del Ángelus, exhortando a los presentes a estar preparado para profesar humildemente con el ciego de nacimiento su adhesión a Cristo. Y para que esto se convierta en una realidad en cada persona, solicitó la intercesión de la Virgen María, totalmente impregnada del fulgor de la gracia divina.

 

DECÁLOGO DE ASÍS POR LA PAZ

El Santo Padre Juan Pablo II, al cumplirse un mes del encuentro de Asís, envió a todos los Jefes de Estado y de Gobierno del mundo una carta para dar a conocer el "Decálogo de Asís por la Paz". En la carta, con fecha 24 de febrero de este año, Su Santidad afirma haber constatado que "los participantes en el encuentro de Asís estaban más animados que nunca por una convicción común: la humanidad debe elegir entre el amor o el odio".

El Decálogo de Asís comienza manifestando que nos comprometemos en proclamar nuestra firme convicción en que la violencia y el terrorismo contrastan con el auténtico espíritu religioso y, al condenar cualquier recurso a la violencia y a la guerra en nombre de Dios o de la religión, nos empeñamos a hacer cuanto sea posible para erradicar las causas del terrorismo.

En los demás puntos del decálogo, entre otras cosas, se promueve el diálogo, se defiende el derecho de toda persona humana a vivir dignamente, se invita al perdón recíproco y a dar voz a quién no la tiene, etc. El Decálogo finaliza indicando a los responsables de las naciones para que se esfuercen, tanto a nivel nacional como internacionalmente, para que se edifique y se consolide, sobre el fundamento de la justicia, un mundo solidario y de paz.

 

INTENCIÓN GENERAL DE ORACIÓN DEL MES DE MARZO

En la Intención General de Oración del mes de marzo, Juan Pablo II invita a rezar "Por las Organizaciones y grupos eclesiales dedicados a la acción social para que testimonien con fuerza y coherencia el Evangelio de la caridad".

En su Carta Apostólica Novo Millennio Ineunte al concluir el Gran Jubileo del Año Dos mil, Juan Pablo II recuerda que "es notorio el esfuerzo que el Magisterio eclesial ha realizado, sobre todo en el siglo XX, para interpretar la realidad social a la luz del Evangelio y ofrecer de modo cada vez más puntual y orgánico su propia contribución a la solución de la cuestión social, que ha llegado a ser ya una cuestión planetaria".

Invitando a "apostar por la caridad", el Santo Padre señala que partir de la comunión intraeclesial, la "caridad se abre por su naturaleza al servicio universal, proyectándonos hacia la práctica de un amor activo y concreto con cada ser humano". Pues "éste es un ámbito que caracteriza de manera decisiva la vida cristiana, el estilo eclesial y la programación pastoral. El siglo y el milenio que comienzan tendrán que ver todavía, y es de desear que lo vean de modo palpable, a qué grado de entrega puede llegar la caridad hacia los más pobres. Si verdaderamente hemos partido de la contemplación de Cristo, tenemos que saberlo descubrir sobre todo en el rostro de aquellos con los que él mismo ha querido identificarse: ' He tenido hambre y me habéis dado de comer, he tenido sed y me habéis dado que beber; fui forastero y me habéis hospedado; desnudo y me habéis vestido, enfermo y me habéis visitado, encarcelado y habéis venido a verme'(Mt 25,35-36).

Esta página no es una simple invitación a la caridad: es una página de Cristología, que ilumina el misterio de Cristo. Y sobre esta página, la Iglesia comprueba su fidelidad como Esposa de Cristo, no menos que sobre el ámbito de la ortodoxia. No debe olvidarse, ciertamente, - recomienda Juan Pablo II - "que nadie puede ser excluido de nuestro amor, desde el momento que 'con la encarnación el Hijo de Dios se ha unido en cierto modo a cada hombre'". Ateniéndonos a las indiscutibles palabras del Evangelio - hace hincapié el Santo Padre - "en la persona de los pobres hay una presencia especial" de Cristo, que "impone a la Iglesia una opción preferencial por ellos. Mediante esta opción, se testimonia el estilo del amor de Dios, su providencia, su misericordia y, de alguna manera, se siembran todavía en la historia aquellas semillas del Reino de Dios que Jesús mismo dejó en su vida terrena atendiendo a cuantos recurrían a Él para toda clase de necesidades espirituales y materiales".

Tras recordar que en efecto, "son muchas en nuestro tiempo las necesidades que interpelan la sensibilidad cristiana", y que "nuestro mundo empieza el nuevo milenio cargado de las contradicciones de un crecimiento económico, cultural, tecnológico, que ofrece a pocos afortunados grandes posibilidades, dejando no sólo a millones y millones de personas al margen del progreso, sino a vivir en condiciones de vida muy por debajo del mínimo requerido por la dignidad humana", el Papa pregunta "¿Cómo es posible que, en nuestro tiempo, haya todavía quien se muere de hambre; quién está condenado al analfabetismo; quién carece de la asistencia médica más elemental; quién no tiene techo donde cobijarse?".

El cristiano, que se asoma a este panorama, - afirma Juan Pablo II - "debe aprender a hacer su acto de fe en Cristo interpretando el llamamiento que él dirige desde este mundo de la pobreza. Se trata de continuar una tradición de caridad que ya ha tenido muchísimas manifestaciones en los dos milenios pasados, pero que hoy quizás requiere mayor creatividad. Es la hora de un nueva 'imaginación de la caridad', que promueva no tanto y no sólo la eficacia de las ayudas prestadas, sino la capacidad de hacerse cercanos y solidarios con quien sufre, para que el gesto de ayuda sea sentido no como limosna humillante, sino como un compartir fraterno".

Así, en la Novo Millennio Ineunte, (52) el Papa reitera que "obviamente todo esto tiene que realizarse con un estilo específicamente cristiano: deben ser sobre todo los laicos, en virtud de su propia vocación, quienes se hagan presentes en estas tareas, sin ceder nunca a la tentación de reducir las comunidades cristianas a agencias sociales. En particular, la relación con la sociedad civil tendrá que configurarse de tal modo que respete la autonomía y las competencias de esta última, según las enseñanzas propuestas por la doctrina social de la Iglesia".

 

III CONGRESO EUROPEO DE SANTUARIOS Y PEREGRINACIONES

El Papa, alienta a los participantes en el III Congreso europeo de santuarios y peregrinaciones, reunidos en el Monasterio de Montserrat, a esmerarse en realizar la misión misma del santuario, "imagen privilegiada de la Iglesia de Jesucristo, en los nuevos tiempos".

Juan Pablo II, a través de un telegrama enviado al Presidente del Consejo Pontificio para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes, Mons. Stephen Fumio Hamao, tras destacar el tema del encuentro, "El Santuario, espacio para una acogida fraterna y universal", invita a "tener como objetivo prioritario" precisamente "la necesaria acogida y atención espiritual, tanto a los peregrinos, como a los numerosos visitantes y turistas, haciendo de su paso por esos lugares sagrados un momento propicio para la nueva evangelización".

Presentándoles - señala el Papa - lo que para ellos puede ser un momento especial de gracia para su vida cristiana. Por ello, el Pontífice alienta a poner en juego todos los recursos humanos e iniciativas pastorales para que, en virtud de la misma identidad del santuario, "lugar donde Dios acoge al hombre, y donde el hombre se convierte a Dios", los visitantes puedan descubrir el auténtico rostro del Señor, que les lleve a una existencia cada vez más conforme con el Evangelio.

 

PRESCRIBEN AL PAPA REPOSO POR PERSISTENTE DOLOR EN LA RODILLA

El médico que atiende al Santo Padre, tras haber consultado a sus colaboradores, considerando que persiste el dolor en la rodilla derecha, de origen artrítico, prescribió al Papa un período de reposo con el fin de curar lo antes posible esta dolencia. El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, al hacer esta declaración, añadía que, por tal motivo, la Audiencia General del miércoles 6 de marzo, se desarrollaría en dos momentos.

En primer lugar, en el Aula Pablo VI se leería la catequesis preparada por el Santo Padre en distintas lenguas y luego los peregrinos se trasladarían a la Plaza de San Pedro, para recibir el saludo y la bendición final de Juan Pablo II, que se asomará a la ventana de su estudio privado del Palacio Apostólico Vaticano. Además, el doctor Navarro Valls informó de que quedaban aplazadas para más adelante las dos visitas del Papa a sendas Parroquias de Roma, previstas para los domingos siguientes.

 

CANCELADO EL PROYECTO DE CONSTRUCCIÓN DE LA MEZQUITA EN NAZARET

Satisfacción de la Santa Sede ante la decisión del gobierno israelí de cancelar el proyecto de construcción de una mezquita en las cercanías de la Basílica de la Anunciación, en Nazaret. Restableciendo así la legalidad, el respeto de los Lugares Santos y la consideración de las respectivas comunidades de creyentes. Una Nota del director de la Oficina de Prensa vaticana al respecto añade asimismo el anhelo de que se reanude, con la contribución de las Autoridades y de toda la población, la tradicional armoniosa convivencia entre musulmanes y cristianos en Nazaret, que había sido puesta en peligro por una iniciativa provocadora.

La Declaración del Doctor Joaquín Navarro Valls concluye destacando que "es fácil comprender que no se trata de una decisión en contra de los musulmanes, cuyas autoridades religiosas y políticas - en la región y en el mundo - habían manifestado en su mayoría estar en contra de un proyecto que hería la sensibilidad del mundo cristiano y de los peregrinos".

 

ENTREVISTA AL PREFECTO DE LA CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE

Después del 11 de septiembre, "se está difundiendo cada vez más la convicción de que para obtener una nueva paz mundial, la fe cristiana deba renunciar a su pretensión de verdad". Con esta constatación el cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, intervenía hace pocos días en una conferencia en Lugano, Suiza, sobre el tema "Fe, verdad y tolerancia". En declaraciones a los medios de comunicación el prefecto del dicasterio vaticano respondía a la pregunta de si también para la Iglesia había cambiado algo después del 11 de septiembre.

- "Yo no diría que con el 11 de septiembre haya habido una revelación de cosas absolutamente nuevas. La amenaza de la violencia terrorista existía ya antes. Ahora sin embargo estamos más atentos a aquella amenaza. Si algo ha cambiado, es nuestra consciencia occidental de la percepción del peligro. Parafraseando a san Agustín podríamos decir que hoy vemos más claramente el abismo que el hombre tiene ante sí.

La confrontación con el Islam es un tema candente. En su opinión, ¿se puede hablar de una superioridad de la cultura judeocristiana?

-"Es un terreno minado, pero no quiero evitar la pregunta. Cuando se habla de cultura tenemos que distinguir los valores de sus realizaciones históricas. La verdad de la fe cristiana nos aparece en toda su profundidad pero no debemos olvidar que lamentablemente ha sido oscurecida muchas veces por los comportamientos concretos de quien se decía cristiano. También el Islam ha tenido momentos de gran esplendor y de decadencia en el curso de su historia.

Por tanto, ¿no se puede hablar de superioridad de una cultura sobre otra?

- Naturalmente podemos y debemos decir que, por ejemplo, los valores del matrimonio monógamo, de la dignidad de la mujer, etcétera, demuestran indudablemente una superioridad cultural. Es verdad que el mundo islámico no está del todo equivocado cuando reprocha a Occidente de tradición cristiana la decadencia moral y la manipulación de la vida humana. Se hace fuerte en nuestras debilidades, en nuestro escepticismo. Esto nos impone un serio examen de conciencia. Lo importante es ir a las raíces de los valores anunciados por las diversas religiones. Es aquí donde puede empezar un verdadero diálogo interreligioso.

¿Es más peligroso el fundamentalismo o la indiferencia religiosa?

- Hay diversas formas de fundamentalismo. Los obispos estadounidenses, por ejemplo, prefieren no usar el término fundamentalismo para indicar el extremismo violento, porque en Estados Unidos una parte del mundo protestante se define fundamentalista, pero sin caer en la violencia y en el fanatismo. Y también la indiferencia religiosa tiene formas diversas. Hay quien se dice no creyente pero conserva un impulso ético de fondo y se da también la indiferencia anárquica y arrogante de quienes pretenden desmontar al hombre recomponiendo después sus trozos a su modo y no según la lógica del Creador.

Usted habla a menudo de un catolicismo de minoría y de una Iglesia que inevitablemente se reducirá en el futuro. ¿Cómo se concilia todo esto con la llamada que ha hecho el Papa a Europa a no olvidar sus propias raíces cristianas?

- La Iglesia de masas puede ser algo hermoso pero no es necesariamente la única modalidad de ser Iglesia. Pero esto no quiere decir que se reduzca a un grupo cerrado en sí mismo. La Iglesia tiene una responsabilidad universal, una responsabilidad misionera para anunciar la nueva evangelización. Forma parte de esta tarea la llamada a las raíces cristianas de Europa. Es más, la Iglesia debe echar mano de todas sus energías creativas para hacer que no disminuya la fuerza viva y atrayente del Evangelio.

 

EL CARDENAL SEPE REAFIRMA EN LA INDIA LA IMPORTANCIA DEL DIÁLOGO

El cardenal Crescenzio Sepe, prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, viajó a la India para participar en la Asamblea General de la Conferencia Episcopal de este país, que se celebró desde el lunes hasta el jueves. En la homilía de la Santa Misa en la Catedral de Jalandhar, el purpurado recordó la importancia del diálogo y el reciente encuentro de líderes religiosos en Asís, como "prueba de la voluntad de buscar la unidad en la diversidad y de trabajar juntos para construir una familia humana unida, en la cual prevalezcan la paz y la justicia". Asimismo, el cardenal Sepe destacó a dos grandes profetas del diálogo y de la paz que vivieron en la India, el Mahatma Gandhi y la Madre Teresa de Calcuta.

En su discurso a la Asamblea, en Jalandhar, en el estado indio de Punjab, el cardenal Sepe reiteró el valor del diálogo en todos los ámbitos, poniendo de relieve el papel privilegiado de la comunidad católica en la India, comunidad que suma el 2% de una población de más de mil millones de personas.

Y, tras calificar esta Iglesia como "muy dinámica, llena de diversidades y creatividad", el purpurado señaló los desafíos que la misma debe afrontar, tanto en sus relaciones con el exterior como en su interior. En efecto, existen en la India leyes contra las conversiones y amenazas por parte de grupos fundamentalistas que dificultan toda posibilidad de evangelización. Así como tensiones en las iglesias locales y en la nacional, alimentadas a veces por estructuras sociales y etnias distintas.

El prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, haciendo hincapié en que los ritos presentes en la Iglesia de la India - latino, siro-malabar y siro-malankar- "ofrecen una riqueza y una diversidad únicas", ha elogiado el tema elegido para este encuentro episcopal dedicado a "La Iglesia en diálogo". Y exhortó precisamente al diálogo entre los católicos y al diálogo interreligioso, para ser capaces de apartar las heridas del pasado y encontrar la forma más eficaz de afrontar el desafío de la Evangelización.

El cardenal Sepe indicó asimismo la necesidad de encontrar una teología apropiada, que presente a Cristo como único Redentor. Y, recomendado la colaboración y unidad entre Obispos y teólogos, anunció que la Santa Sede ha programado un encuentro interdicasterial con los representantes de los obispos y de los institutos eclesiásticos en la India. Otros temas destacados por el purpurado fueron el de la formación sacerdotal, subrayando la importancia de estudios de misionología en los seminarios; y la comunión de los bienes, exhortando a la Iglesia en la India para que logre ser autosuficiente.

En el encuentro con las autoridades civiles del estado indio de Punjab y con otros líderes religiosos, el cardenal Sepe señaló que "cada religión tiene que servir a la humanidad con sus propios valores y tradiciones", haciendo hincapié luego en que "el cristianismo sigue ofreciendo a personas de todos los sectores de la sociedad, ricos y pobres, la Buena Nueva de Jesucristo, con el anhelo de contribuir a la paz y bienestar de todo el país.

 

SEGUNDA MEDITACIÓN DE CUARESMA

El Santo Padre asistió el viernes a la segunda meditación de Cuaresma del Predicador de la Casa Pontificia, Padre Raniero Cantalamessa, en la Capilla Redemptoris Mater. El Predicador introdujo su reflexión señalando que así como los objetos fluorescentes, que se han vuelto opacos, necesitan ponerse ante una luz muy fuerte para volver a brillar, también el espíritu de los creyentes puede volver a su resplandor si se expone a una luz apropiada. Es decir a la del rostro de Cristo.

Rostro con características humanas y al mismo tiempo divinas -reiteró el Padre Cantalamessa - porque están ligadas a una verdad que la Iglesia ha defendido con tenacidad de toda herejía, proclamando, hace tantos siglos, con el Concilio de Nicea, que "la divinidad de Jesús no está subordinada, atenuada, ni es secundaria a la del Padre, sino consustancial a la misma".

En tantos episodios narrados en el Nuevo Testamento - recordó el predicador de la Casa Pontificia - se atesta la profunda conciencia mesiánica y divina de Cristo; que sabe que actúa 'con la autoridad misma de Dios', 'juez final de los hombres y de la historia'. Y no con la limitada por 'algún rabbi de Galilea'. La divinidad del Redentor mana pues totalmente de la del Padre. Si se comprende su esencia - explicó el Padre Cantalamessa - "se vuelve vano" "todo intento de poner en alternativa a Dios y a Cristo".

Asimismo, el Padre Cantalamessa recordó que no fueron sólo las escrituras las que impulsaron a la Iglesia a afirmar con convicción, hace casi 17 siglos, 'la divinidad plena de Cristo'. Sino que la misma Iglesia fue sostenida por 'la experiencia de salvación que vivía gracias a Él'. Y que "se sigue renovando aún hoy, a través de tantas fecundas revoluciones existenciales que estallan a menudo con discreción, sin clamor, quizá cobijadas en los confesionales, y que impulsan al fiel anónimo a redescubrir y vivir las palabras del ciego de nacimiento: "estaba ciego y ahora veo".

También hoy - subrayó el Predicador de la Casa Pontificia - se verifica algo nuevo e inconmensurable cada vez que una persona, rompiendo las ataduras, sale de la esfera de la neutralidad del mundo. De la esfera del simple narrar, explicar y discutir. Y, exponiéndose, como el ciego de nacimiento a ser expulsado de la sinagoga, afirma: "¡Señor, yo creo!". Éstos eran los momentos que hacían exultar a Jesús durante su vida terrena y le hacían exclamar "Te bendigo, oh Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios e inteligentes y se las has revelado a los pequeños". El Padre Cantalamessa terminó sus palabras deseando que el Espíritu Santo nos conceda estar entre estos "pequeños, hoy y siempre".

 

NOMBRAMIENTOS PONTIFICIOS

NUNCIO APOSTÓLICO EN GUINEA-BISSAU
El Papa ha nombrado nuncio a monseñor Giuseppe PINTO, arzobispo titular de Anglona, Nuncio Apostólico en Senegal, Malí, Cabo Verde y delegado apostólico en Mauritania.

ARCHIDIÓCESIS DE INERHI (KENIA)
El Papa ha nombrado arzobispo coadjutor a monseñor John NJUE, hasta la fecha obispo de Embu.

 

COMENTARIO A LA LITURGIA DEL DOMINGO

DOMINGO IV DE CUARESMA (A): 10.09.02
"Despierta, Cristo te iluminará"

A mitad de la Cuaresma encontramos el "Domingo del Laetare" o "Domingo del gozo". Como el gozo es inseparable de la luz, podemos llamarle, también, "Domingo de la luz". Ya desde la primera lectura de este día encontramos la luz y el gozo: un desconocido pastorcillo, David, es elegido por Dios para ser el Rey de Israel. Entre líneas se deja entrever que Dios reserva la dignidad real a toda criatura humana introducida, por medio del Bautismo, en un Pueblo de reyes, sacerdotes y profetas. Pero las páginas más luminosa de este día son el Evangelio de Juan y la Carta a los Efesios.

Los primeros cristianos llamaban al bautismo "iluminación", por lo que se denominaban "iluminados" o bautizados. Desde esta perspectiva el evangelio del ciego de nacimiento se convierte en una preciosa catequesis bautismal. Los que todavía no han sido bautizados son como los ciegos que no ven el rostro del Padre celeste, no reconocen en los demás hombres a sus hermanos y hermanas, ni descubren en las criaturas los peldaños de una escalera que te lleva directamente al Dios creador de todas las cosas. Jesús se compadece de estos pobres ciegos y les ilumina con el Sacramento del Bautismo. Y es que los sacramentos son acciones de Jesús, son sus manos que tocan al hombre y lo ensalzan, haciéndole nueva criatura, hijo de Dios y santo.

El ministro del Bautismo, sacerdote o laico, en caso de necesidad, presta sus manos, su voz y sus gestos a Jesús, ya que, como afirma San Agustín: "Es Cristo en persona el que bautiza". Tras haber reconocido una elocuente figura del Bautismo en la curación del ciego de nacimiento, pueden extrañarnos algunos gestos llevados a cabo por el Señor en aquella ocasión. Parece natural que el Señor enviase al ciego a lavarse a la fuente de Siloé, ya que el Bautismo es un lavado exterior como signo eficaz de una purificación interior. Menos natural parece el gesto de hacer un emplasto con la saliva y la tierra para aplicárselo sobre los ojos. Es una alusión clara a la creación del hombre, sacado del fango de la tierra, puesta en relación con el Bautismo, nueva creación, que hace del cristiano nueva criatura.

El ciego tras ser curado es abordado por los fariseos que querían inducirle a declarar que no había sido iluminado o a esconder el evento. Sí, es lo mismo que ocurre hoy con tantos que pretenden que los bautizados olvidemos nuestra condición de tales o que lo escondamos hasta el punto de avergonzarnos de reconocerlo en público. Después, fueron acosados por las preguntas de los fariseos los padres del ciego. El miedo a caer en desgracia y encontrarse con problemas les lleva a refugiarse en la evasiva.

No pudiendo servirse de la familia vuelven a la carga contra el ciego curado; le repiten que Jesús es un pecador y le invitan a narrar de nuevo el milagro. Cansado de que intentasen enfrentarlo con el que le había curado, les preguntó con ironía: "Acaso queréis también vosotros ser sus discípulos". La provocación era excesiva. El ciego es expulsado con palabras de desprecio de la presencia de los fariseos. Algo similar a lo que les ocurre a los bautizados que proclaman con coraje su fidelidad a Cristo. Pero el Señor es siempre bondadoso, y como se presentó al ciego que había curado para premiarlo y darle ánimo, así se hace visible a cada uno de los que defienden y viven la fe recibida en el Bautismo.

San Pablo recuerda hoy a los bautizados de Éfeso que están en la luz del Señor y que se deben comportar como hijos de la luz. Los hijos de la luz son reconocidos por sus obras, que el Apóstol indica con tres palabras: "bondad, justicia y verdad". Santo Tomás de Aquino veía en la bondad el cumplimiento de los deberes hacia uno mismo; en la justicia la observación de los deberes sociales (hoy clamorosamente violados); en la verdad el cumplimiento de las obligaciones religiosas o de la recta relación con Dios. A quién no observa estos deberes, la Carta a los Efesios le alienta hoy así: "Despierta, tú que duermes, levántate de la muerte y Cristo Jesús te iluminará".

 

LA MEJOR EXPRESIÓN DE LA IDENTIDAD CRISTIANA DE AMÉRICA SON SUS SANTOS

El Santo Padre Juan Pablo II realizará un viaje apostólico a la ciudad de Guatemala para la canonización del beato Pedro de San José de Betancur, del 31 de julio al 1 de agosto próximo, en una breve etapa en Centroamérica, durante su viaje de regreso a Roma procedente de la Jornada Mundial de la Juventud que el Pontífice presidirá días antes, a finales de julio, en Toronto. Se trata del primer santo guatemalteco, del primer santo centroamericano y del primer santo tinerfeño. Sí, porque el beato Pedro de San José de Betancur nació en el pueblo español de Vilaflor, en Tenerife, en las Islas Canarias, el 19 de marzo de 1626.

"La mejor expresión y los mejores frutos de la identidad cristiana de América son sus santos. Sabemos que en ellos se ha realizado un encuentro con Jesucristo vivo en modo profundo y comprometido, que los ha impulsado a construir el Reino de Dios y a hacer de él el sentido y el alma de toda su vida personal y comunitaria". Estas son palabras de Juan Pablo II en su visita a México en el año 1996. En aquella ocasión el Papa recordaba que desde el siglo XVI hubo en América santos como Rosa de Lima, Toribio de Mogrovejo, Martín de Porres, el beato indígena Juan Diego (que también será canonizado por el Papa en el Santuario mariano mexicano de la Virgen de Guadalupe un día antes de su llegada a Guatemala)...santos que como Pedro de San José de Betancur, son modelos de virtudes para la Iglesia universal, que les venera fervorosamente.

El hermano Pedro de San José era un laico que encontró el camino de la santidad en el amor solidario a los más necesitados: indígenas, españoles empobrecidos lejos de su patria, convalecientes de hospitales ... en un siglo en el que, como en el nuestro, se hacía necesaria la misericordia, la compasión, la justicia, y el saber ver a Cristo en el hermano más pequeño. Todo ello ocurría en las jóvenes colonias españolas del Nuevo Mundo. Gracias al hermano Pedro era posible decir que apenas a un centenar de años de fe cristiana ya existían frutos de santidad en el Nuevo Mundo.

Pedro de San José de Betancur dejó una profunda huella en el corazón y en la vida de los guatemaltecos desde la época de la colonia hasta hoy, a pesar de que viviera tan sólo 18 años en América. "Fue un hombre que materialmente no traía nada y no quería nada, pero que desde su fe hizo suyos el dolor y el sufrimiento, la miseria y la ignorancia de los demás". Por esta entrega desinteresada, se le ha querido dedicar al santo un museo que será inaugurado el próximo 17 de marzo, como ha indicado el franciscano, Edwin Alvarado, quien coordina los festejos de la ya cercana canonización.

Tres galerías exhibirán en el museo pinturas y cuados antiguos, mensajes de agradecimiento por los milagros obtenidos, y objetos personales como las vestimentas o la campana que utilizaba el hermano para pregonar y que hoy es un símbolo para identificar al futuro santo. El padre Alvarado adelantó que con motivo de la canonización, los restos del hermano Pedro, como se le conoce popularmente, serán exhibidos de nuevo a los feligreses, tras varias décadas de permanecer ocultos. Dentro de las actividades que prepara la Iglesia destacan una misa en la Antigua Guatemala, ciudad colonial a 45 kilómetros de la capital donde vivió y murió el místico español, así como una solemne procesión.

"Queremos que el hermano Pedro salga a caminar de nuevo por las calles de Antigua" apuntó el padre Alvarado, quien ha contribuido en la edición de un libro, titulado "Escritos", que recopila coplas, sentencias, refranes, oraciones, cartas y otros textos del religioso, que murió el 25 de abril de 1667. Recordamos que este es el tercer viaje pastoral que realiza JPII a Guatemala, país en el que estuvo por primera vez en marzo de 1983 y al que regresó en febrero de 1996.

 

DECLARACIÓN FINAL DEL COLOQUIO DE BERLÍN

"ASUMIR LA RESPONSABILIDAD DE UNA NUEVA ETAPA DE LA INTEGRACIÓN EUROPEA"
(28 de febrero-2 de marzo)

A invitación del Comité Central de los Católicos Alemanes y de las Semanas Sociales de Francia, una centena de personalidades provenientes de 20 países europeos han estado reunidos en la Academia Católica de Berlín del 28 de febrero al 2 de marzo de 2002, celebrando un Coloquio dedicado a las responsabilidades sociales de los cristianos de cara a la evolución de la construcción europea.

Los participantes en este Coloquio han acordado crear un Grupo de Trabajo que tenga como objetivo la preparación de una importante declaración europea para el otoño de 2004. Esta actuación quiere estar abierta a todos aquellos para los que el mensaje social cristiano debe continuar inspirando la construcción institucional y las iniciativas de la sociedad civil de cara a las grandes cuestiones de nuestro tiempo.

El Coloquio, al final de sus trabajos, ha aprobado la declaración siguiente:

1) Las razones por las cuales numerosos cristianos se han comprometido a favor de la unificación de Europa son de importante actualidad. Hoy como ayer la unificación de Europa es un proyecto que está en el centro de nuestras preocupaciones éticas y espirituales: el respeto de la dignidad humana, el perdón y la reconciliación, la llamada a sus miembros más grandes a no imponer su voluntad a los más pequeños, la solidaridad de los más ricos hacia los más pobres, una concepción del hombre marcada por el amor de Cristo, que da a la conciencia europea una fuerte identidad social.

Son estas consideraciones las que inspiraron el Manifiesto "Por una conciencia europea", hecho publico en mayo de 2000 por los presidentes del Comité Central de los Católicos alemanes y de las Semanas Sociales de Francia, y que ahora el conjunto de los firmantes de esta Declaración hacen suyo.

2) La Unión Europea está en una encrucijada de caminos y se encuentra enfrentada en su organización interior a dos desafíos simultáneos: su profundización y su ampliación. Siendo a menudo presentados como contradictorios sin embargo participan en una misma esperanza: construir en pie de igualdad una misma comunidad política entre nuestros países, es decir, una estructura federal específica en una unión de Estados y de Naciones. Esta federación europea, concebida en base a los principios de solidaridad y subsidiariedad, respetuosa con la diversidad de historias políticas, de tradiciones y de culturas de sus miembros, será necesariamente evolutiva en su misión, en su perímetro territorial y en la organización de sus poderes. Pero ahora es indispensable fijar las bases de esta Europa a través de la elaboración de una Constitución europea abierta y flexible.

3) Saludamos, por consiguiente, la convocatoria realizada por los jefes de Estado y de Gobiernos de la Convención Europea y la apertura de sus trabajos a todas las fuerzas y organizaciones de la sociedad civil de los países miembros y de los países candidatos. Intentaremos responder a esta llamada con análisis y propuestas. Intentaremos también llevar una contribución particular a la ampliación de la Unión a través de nuestros esfuerzos de los laicos cristianos para hacer reencontrar las tradiciones católicas, protestantes, anglicanas y ortodoxas presentes en el Viejo Continente. Al mismo tiempo que es necesario el dialogo de Iglesia a Iglesia, es también el momento de intensificar los encuentros entre los mismos creyentes, portadores de la rica diversidad de sus culturas. El diálogo ecuménico e interreligioso es una exigencia ineludible para una Europa que va más allá de un proyecto económico o un mercado.

4) Los cristianos no pueden conformarse con una Europa unida en un mundo desgarrado, con una Europa tranquila en un mundo en conflicto, con una Europa enriquecida en un mundo que se enfrenta al desafío de la pobreza. Ahora bien, corremos el riesgo de que nuestro continente envejecido se repliegue sobre sí mismo, fatigado por la historia, ensimismado en los resultados de su inteligencia y rememorador de los grandes acontecimientos de su pasado. Por el contrario, Europa tiene que asumir su cuota de responsabilidad en la construcción de un mundo nuevo: un mundo más humanizado, portador de valores, respetuoso con las libertades personales - entre ellas la libertad religiosa- ; un mundo en continuo desarrollo; un mundo en el que el diálogo y el compromiso recaigan con más fuerza sobre los más pobres. Los ciudadanos y ciudadanas de Europa tienen que asumir el coste político y económico de esta responsabilidad. La solidaridad está en el centro de los cincuenta años de la historia de la unificación europea. Esta unificación está fundada en el amor al prójimo y en la universalidad de nuestra fe.

Berlín, 2 de marzo de 2002

Representantes de la Conferencia Episcopal Española en este coloquio:

Mons. José Sánchez González. Obispo de Sigüenza - Guadalajara
D. José Tomás Raga Gil. Presidente de Semanas Sociales de España
Rvdo. Fernando Fuentes Alcántara. Director del Secretariado de la Comisión Episcopal de Pastoral Social (Conferencia Episcopal Española)

 

DIÓCESIS ALEMANA ABANDONA EL SISTEMA PÚBLICO DE CONSULTORIOS

La única diócesis alemana que seguía emitiendo los polémicos certificados de consulta a las mujeres que quieren abortar anunció el viernes 8 de marzo, el abandono de su presencia en el sistema público de consultorios por indicación del Papa. En 1999, los obispos alemanes ya habían tomado esta decisión. La participación en el sistema establecido por la ley exigía a los consultorios católicos emitir un certificado a la mujer que había pedido su asesoría. Este documento permitía a la embarazada acceder al aborto despenalizado.

Sin quererlo, los consultorios se convertían así en cómplices implícitos de la operación abortiva. Ahora monseñor Franz Kamphaus, obispo de Limburg, el único que no había aplicado la propuesta que hizo Juan Pablo II, ha recibido una carta en la que el Pontífice le pide unirse a la misma decisión de sus hermanos en el episcopado. El prelado, sin embargo, a diferencia de lo que algunas voces periodísticas habían señalado, permanecerá en su cargo.

El cardenal Karl Lehmann, presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, dio la noticia el viernes calificándola como una "solución positiva" "que acaba con un largo y difícil proceso". La decisión papal de exigir la suspensión de la emisión del certificado, pero de dejar en su cargo al obispo, "revela la estima que Juan Pablo II ha demostrado a Kamphaus y la decisión valorar el servicio del obispo de Limburg a la Iglesia", añade Lehmann en declaraciones concedidas a la prensa.

Elementos necesarios para llegar a esta decisión, según el obispo de Maguncia, han sido "la disponibilidad para el diálogo y la paciencia y la sensibilidad de todas las partes involucradas". "Es evidente que el Papa ha intervenido con espíritu de fraternidad para ofrecer un común testimonio de la Iglesia y para mantener la comunión", añade el presidente del episcopado alemán. El cardenal explicó que obedecer al Papa ha sido una decisión "dolorosa a nivel personal" para monseñor Kamphaus, quien quería mantener los consultorios católicos en el sistema público con el objetivo de salvar al mayor número de vidas humanas posible.

De hecho, Kamphaus no ha escondido su desilusión: "Hasta el final había esperado que se llegara a una solución diferente del conflicto". Y añadió: "sigo siendo obispo de Limburg, golpeado, pero con la misma disponibilidad de siempre, en el espíritu del Evangelio, para hacer los posible por los pobres y por la diócesis".

 

LOS OBISPOS COLOMBIANOS INVITAN A PARTICIPAR EN LAS ELECCIONES

En medio de circunstancias dramáticas, los obispos de Colombia hicieron un llamamiento a participar en las elecciones legislativas del domingo, 10 de marzo. Un comunicado firmado por monseñor Alberto Giraldo Jaramillo, presidente de la Conferencia Episcopal, alentaba asimismo a los políticos que se presentan como candidatos al Senado y la Cámara "con programas basados en principios de respeto por los derechos humanos, la vida, la paz, la justicia y la solidaridad".

La jornada electoral tuvo lugar después de que el 20 de febrero el presidente Andrés Pastrana rompiera las negociaciones con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con las que buscaba poner fin a una guerra interna de 38 años que dejó 40.000 muertos en la última década. La guerrilla había prometido boicotear con la violencia las elecciones. La Policía y el Ejército movilizaron a 180.000 hombres para asegurar la tranquilidad. A los 102 escaños del Senado aspiran 2.279 personas y a los 161 de la Cámara unas 9.400, en una amplia gama de candidatos que incluyen indígenas, ex reinas de belleza, humoristas, actores. Algunos de los candidatos están secuestrados en este momento por la guerrilla.

La misma Iglesia es víctima de las amenazas guerrilleras. El 1 de marzo, el diario "El Colombiano" informaba que hombres de las FARC hirieron a golpes de culata de sus fusiles a dos sacerdotes que acompañaban a campesinos muy pobres a vender el café recogido en los últimos veinte días de trabajo. Los padres José Gabriel Segura Urrego, párroco de Caicedo y Ángel Rodríguez, del corregimiento La Encarnación, tuvieron que ser hospitalizados. Los campesinos, por su parte, se quedaron sin cosecha, pues fue robada por los guerrilleros.

"Una vez más reafirmamos que la paz es posible y no podemos declinar en el compromiso de lograrla por caminos de diálogo, de concertación y de respeto mutuo y no por las vías de la confrontación armada", afirman los obispos en su mensaje con motivo de las elecciones. "El país necesita parlamentarios e instituciones con un alto compromiso en la implantación de políticas que conduzcan a resolver los problemas de los más necesitados", sigue diciendo el presidente del episcopado, y arzobispo de Medellín. "Invitamos a cada ciudadano a asumir las jornadas electorales de este año en un ambiente de esperanza y con la conciencia plena de que la participación de cada uno es importante y urgente", añade.

"El "clientelismo", es decir, vender el voto o dejarse manipular por amenazas o presiones de cualquier orden --advierte--, votar por eslóganes, sólo conduce a crear más violencia, más corrupción y a destruir las instituciones y la democracia que nos pueden dar la paz que anhelamos". Por último, el mensaje episcopal recuerda que "el ejercicio de nuestra ciudadanía no termina con el voto, con el derecho de elegir o de ser elegidos". "Después de las elecciones queda para todos la tarea, igualmente urgente, de hacer seguimiento y control sobre los elegidos y sobre todos los funcionarios públicos --explica--. La sociedad tiene derecho a recibir una rendición pública de cuentas por parte de quienes han sido elegidos y al mismo tiempo puede realizar acciones legítimas para impedir actos de corrupción".

 

ELEGIDO NUEVO PRESIDENTE DE LA CONFERENCIA EPISCOPAL INDIA

Cyril Mar Baselios, arzobispo de Trivandrum, ha sido elegido presidente de la Conferencia Episcopal de India (CBCI), durante la asamblea general bianual de la misma el pasado de marzo, informa la agencia católica india "SAR News". "Trataré de hacer todo lo mejor posible dentro de mis limitadas fuerzas para continuar el ministerio que me han confiado los obispos de India", dijo. Ha sido elegido por un periodo de dos años. Mar Baselios, que fue el primer vicepresidente de la CBCI se convirtió automáticamente en presidente a la muerte del arzobispo Alan de Lastic, a causa de un accidente de tráfico en Polonia hace dos años.

El arzobispo Baselios, de 67 años, es la cabeza de los 400.000 católicos de la Iglesia siro-malankar, que cuenta con cuatro diócesis y siete obispos. Estos católicos son considerados tradicionalmente con sucesores de la evangelización comenzada por santo Tomás apóstol en la India. Ha sido obispo durante 25 años y ha realizado su servicio como pastor y profesor de teología. Es doctor en derecho canónico y autor de varios libros y artículos. Es miembro de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia y ha sido miembro del Sínodo de Asia y del Sínodo de los Obispos celebrados en Roma.

Tras ser elegido, el arzobispo recordó que su lema "Confianza en el Amor" le ha guiado en su ministerio como obispo. "Dios es amor y podemos confiar en Él. Confío en Dios y la fe en la gente han sido las fuerzas directrices de mi vida", añadió. Hablando sobre la composición de la CBCI, el arzobispo dijo que las tres tradiciones eclesiásticas de la Iglesia católica, expresadas en las tradiciones siro-malankar, siro-malabar y latina, son un reflejo de la universalidad y riqueza de la Iglesia. La diversidad es un enriquecimiento, aclaró.

El arzobispo Mar Baselios negó el que haya divisiones importantes en la Iglesia católica en India. "Las diferencias son a menudo interpretadas como divisiones, pero eso no es acertado", dijo el arzobispo. "Las diferencias son parte de la diversidad. No siempre tienen que ser negativas. Las diferencias pueden llevar a la división pero no es el caso de la iglesia en India", añadió Baselios. Dijo que en el estado de Kerala coexisten los tres ritos sin mayores problemas.

Preguntado sobre los desafíos que tiene como presidente, dijo a SAR News que la CBCI es una conferencia de las tres Iglesias católica y por lo tanto tendrá que ocuparse de temas de una naturaleza común y nacional que tocan a las tres Iglesias. Los asuntos que pertenecen a las Iglesias individuales se dejan a sus propias conferencias episcopales. El recién elegido presidente tiene muchos desafíos ante él. Entre ellos, conversaciones con el Gobierno para hacerle comprender los intereses de las comunidades minoritarias como la católica, el aumento del fundamentalismo religioso, etc.