AUDIENCIA
GENERAL: "LA INFANCIA, TESORO PRECIOSO Y VULNERABLE DE LA FAMILIA
HUMANA"
El pecado,
afirmó Juan Pablo II comentando en la catequesis del miércoles
el Salmo 50, no es una mera cuestión psicológica o social,
sino un evento que afecta directamente a la relación con Dios,
violando su ley, rechazando su proyecto en la historia, socavando
la escala de valores. El mismo día comenzaba en Nueva York
la sesión especial de la Asamblea de las Naciones Unidas sobre
la infancia y el Santo Padre llamó la atención sobre
este importante encuentro que analizaría las plagas que continúan
afligiendo a la infancia, tesoro precioso, pero también vulnerable,
de la familia humana.
"Pienso
en las guerras, en la pobreza, la explotación y abusos de todo
tipo de los cuales son víctimas. Durante estos días
en que se reúnen representantes de todos los países
del mundo para reflexionar sobre las condiciones en que se encuentran
los niños, invito a todos a la oración para el buen
desarrollo de los trabajos. Deseo, además, que esta cumbre
suscite un compromiso renovado de la Comunidad Internacional en favor
de los niños, de manera que las acciones sociales reservadas
a ellos se inspiren en una auténtica promoción de la
dignidad humana y en un respeto pleno de sus derechos fundamentales".
Prevista
del 19 al 21 de septiembre pasado, la sesión fue aplazada tras
los trágicos atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos.
La cita reúne a países y ONGS de todo el mundo para
valorar los progresos habidos desde la Cumbre Mundial de 1990 y para
analizar los objetivos que quedan aún por realizar.
En cuanto
al contenido concreto de la catequesis: el Salmo 50, el Miserere,
el que la Liturgia de Laudes eleva al Señor el viernes de cada
semana, es el Salmo penitencial más cantado y meditado, el
himno dirigido al Dios misericordioso por el pecador arrepentido.
Juan Pablo II volvió de nuevo sobre este Salmo del que, en
una catequesis anterior, había presentado un cuadro general.
Se entra en la región tenebrosa del pecado para luego llevar
al orante a la luz del arrepentimiento humano y del perdón
divino. Se exalta a continuación el don de la gracia divina,
que transforma y renueva el espíritu y el corazón del
pecador arrepentido. "Esta, afirmó el Santo Padre, es
una región luminosa , llena de esperanza y de confianza".
La invocación
inicial se levanta a Dios para obtener el don de la purificación:
"Purifícame con el hisopo y quedaré limpio; lávame
y quedaré más blanco que la nieve". El salmista
confiesa su pecado de manera abierta y clara: "Contra ti, contra
ti solo he pecado, cometí lo que tú repruebas".
Entra en escena, pues, la conciencia personal del pecador que reconoce
su mal. Esta experiencia implica libertad y responsabilidad cuya consecuencia
es por lo tanto la necesidad de tomar una decisión de cambio
radical. El verbo "reconocer" (la culpa, el propio pecado)
no comprende solamente una adhesión intelectual sino una opción
de vida.
El reconocimiento
y la conciencia del pecado, reiteró el Pontífice, es
fruto de una sensibilidad adquirida gracias a la luz de la Palabra
de Dios. En la confesión del Miserere se subraya de manera
particular que el pecado no es percibido solamente en su dimensión
personal y "psicológica", sino que es delineado especialmente
en su perspectiva teológica. Se ve nítidamente en la
frase: "Contra ti, contra ti solo he pecado". Es la exclamación
del pecador al que la tradición atribuye el rostro de David,
consciente de su adulterio con Betsabé, crimen denunciado por
el Profeta Natán así como el asesinato del marido de
ella, Urías.
El pecado,
afirmó Juan Pablo II, no es una mera cuestión psicológica
o social, sino un acontecimiento que afecta directamente a la relación
con Dios, violando su ley, rechazando su proyecto en la historia,
socavando la escala de valores. Más que una eventual injuria
contra el hombre, el pecado es principalmente una traición
a Dios. El hijo pródigo, al volver a casa dice: ¡Padre,
he pecado contra el cielo -es decir, contra Dios- y contra ti!".
Aquí
el salmista introduce otro aspecto, más directamente unido
a la realidad humana. En el versículo 7 afirma: "Mira,
en la culpa nací, pecador me concibió mi madre".
Aunque el salmista no habla explícitamente de pecado original,
queda claro que, según el texto del Salmo, el mal se anida
en las profundidades del hombre, es inherente a su realidad histórica,
de ahí que sea decisiva la petición de la intervención
divina. Por este camino, dijo finalmente el Papa, la teología
del pecado original y toda la visión bíblica del hombre
pecador son evocados indirectamente con palabras que dejan entrever
la luz de la gracia y de la salvación.
RESUMEN
DE LA CATEQUESIS EN ESPAÑOL
Queridos
hermanos y hermanas:
En la celebración de los Laudes de los viernes se recita el
Salmo cincuenta, el más cantado y meditado, conocido como el
Miserere, el cual es un himno penitencial del pecador arrepentido
al Dios misericordioso. El Salmista confiesa el propio pecado de modo
directo y sin dudas, reconociendo claramente su culpa por haber roto
su relación con Dios, violando su ley, rechazando su proyecto
salvífico y cambiando el bien por el mal (cf. Is 5, 20). A
ello le sigue la decisión firme y radical de convertirse.
El mal
anida en el corazón del hombre, es inherente a su realidad
histórica y, por eso, es decisiva la petición de ayuda
de la gracia divina: el poder del amor de Dios es superior al del
pecado y, como indica san Pablo, "donde abundó el pecado,
sobreabundó la gracia" (Rm 5, 20).
Saludo
a los fieles de lengua española; en especial a los parroquianos
de San Saturnino, de Alcorcón, al grupo de peregrinos de Jumilla
y al de la Misión católica española de Wintenthur,
Suiza. Invito a todos a pedir confiadamente la misericordia de Dios,
para alcanzar así su gracia.
Gracias por vuestra atención.
******
Terminados
los saludos en las diversas lenguas, el Santo Padre dirigió
unas afectuosas palabras a los jóvenes a los enfermos y a los
recién casados. Recordando que este día estaba dedicado
a Nuestra Señora de Pompeya, invitó a los jóvenes
a que se esfuercen en imitarla, confiando siempre en su intercesión
maternal. "Que Ella os ayude a llevar, les dijo, un rayo de serenidad
donde hay tristeza y soledad.
A los
enfermos les deseó que, con la ayuda de María, vivan
su condición, abandonados confiadamente a la voluntad del Señor.
Y pidió a María que sostenga a los recién casados
para que encuentren alegría y entusiasmo en su recíproca
fidelidad y sean siempre y en todo momento testigos del amor.
EL
TESTIMONIO DE CARIDAD DE LA MADRE TERESA HONRA LA NACIÓN ALBANESA
PRESENTACIÓN DE LAS CARTAS CREDENCIALES DEL EMBAJADOR DE
ALBANIA
Juan
Pablo II recibió en viernes por la mañana en el palacio
apostólico del Vaticano las Cartas Credenciales del nuevo embajador
de Albania ante la Santa Sede, Zef Bushati. El Santo Padre en su discurso
recordó la visita pastoral que realizó al país
en 1993 y dijo que reza constantemente a Dios para que Albania continúe
con confianza el camino emprendido de prosperidad y de paz, siempre
salvaguardando, entre todos sus habitantes, el mutuo respeto, el diálogo
y la colaboración. "Si realmente se desea construir una
sólida unidad nacional -dijo- es necesario que cada ciudadano
crea en los valores de la renacida democracia y en los beneficios
de la concordia social.
El Pontífice
recordó al nuevo embajador albanés que su patria, que
puede contar con un rico tesoro de tradiciones étnicas, culturales
y espirituales, debe saber tomar de ellas la savia vital que le permitan
proseguir con confianza el camino de profunda renovación social
en el cual se encuentra. Respecto a las relaciones con la Sede Apostólica,
el Papa subrayó que son "pluriseculares e intensas"
y que ahora han podido ser de nuevo saldadas en un clima de entendimiento
y de estima, instaurándose una proficua colaboración,
después del triste paréntesis de la dictadura comunista.
Luego,
el Papa ha sacado a relucir el papel desempeñado por dos importantes
figuras de la historia de Albania: Jorge Castriota Skanderbeg, héroe
nacional, que con su valentía y determinación entró
en contacto repetidamente con los Romanos Pontífices los cuales
le invitaron a perseverar en la defensa de la fe ante la amenaza otomana
; y luego Ganxha Bojaxhiu, la Madre Teresa de Calcuta, hija también
del pueblo albanés, de la que el Papa dijo que su testimonio
de caridad ha dado honor y lustro a toda la nación albanesa
y a toda la Iglesia católica. Dos personajes sobre los que
el pueblo albanés puede hacer constante referencia por su dotes
humanos y espirituales.
"Estas
virtudes podrán ayudar a los albaneses -finalizó diciendo
Juan Pablo II- a concretizar los objetivos de reconstrucción
y de desarrollo que le esperan en su futuro". "Albania desea
encontrar su papel en un cuadro internacional más amplio, abriéndose
al mundo entero. Pero la primera condición y al mismo tiempo
consecuencia de esta justa aspiración -subrayó el Papa-
es la exigencia de una mayor cohesión y de una mayor estabilidad
en su interior, que hagan de Albania un país más autorizado
en el consenso de las demás naciones.
CÍRCULO
DE SAN PEDRO: "PUNTO DE REFERENCIA PARA CUANTOS ESTÁN
SOLOS Y ABANDONADOS Y AFRONTAN SITUACIONES GRAVES
Y PROBLEMAS DE SALUD"
Juan
Pablo II recibió el viernes a los miembros del Círculo
San Pedro, a los directivos y socios de esta Obra de beneficencia
de la Iglesia que desarrolla un válido servicio social y apostólico
y cuya misión constituye también parte de los donativos
económicos del Óbolo de San Pedro. En su breve saludo,
el Santo Padre dijo que el servicio de estos benefactores, quizá
poco conocido por los grandes medios de comunicación social,
constituye un punto de referencia seguro y acogedor para cuantos están
solos y abandonados y se encuentran ante el problema de afrontar situaciones
graves y problemas de salud.
El espíritu
de caridad de las obras del Círculo San Pedro nacen destinadas
a los que viven al margen de la sociedad opulenta. Los "últimos"
de esta sociedad se convierten en los "primeros" objetos
de atención prioritaria y amoroso servicio, dice el Papa. Se
trata de obras benéficas y distintas iniciativas que "pueden
contar con la disponibilidad y los sacrificios de los miembros de
esta asociación que, proponiendo la imagen del Buen Samaritano,
se inclina ante los hermanos heridos en la carne y en el espíritu"
para darles con la ayuda material, "la confortación de
una palabra de esperanza y de un gesto de fraterna caridad".
"Que
en vuestra múltiple actividad y amor por los pobres -les dijo
el Papa- no falte nunca el tiempo para dedicarlo a la escucha de la
Palabra de Dios y del Evangelio. Frente a las formas del nuevo paganismo,
que fascinan a tanta gente, deseo que vuestra caridad discreta y laboriosa,
alimentada de intensa oración, constituya un signo elocuente
de la ternura que Dios tiene para cada ser humano.
VIAJE
A BULGARIA PARA ESTRECHAR LOS LAZOS DE COMUNIÓN CRISTIANA ENTRE
LA IGLESIA CATÓLICA Y LA ORTODOXA
Juan
Pablo II recibió el sábado a la delegación de
Bulgaria, con motivo de la festividad de los Santos Cirilo y Metodio,
que este año coincide con su visita apostólica a esta
nación, en el viaje que le llevará primero a Azerbaiyán,
del 22 al 26 de mayo.
En lo
que ya es una cita tradicional, Juan Pablo II recibió el sábado
a la delegación de Bulgaria que ha viajado a Roma con motivo
de la festividad de los Santos Cirilo y Metodio, que este año
coincide con la visita que el Papa realizará a esta nación.
La delegación, encabezada por el ministro búlgaro de
Relaciones Exteriores, contaba con la presencia también del
metropolita Kalinik, en representación del Patriarca Maxim.
En sus palabras de bienvenida, el Santo Padre destacó precisamente
el significado especial de este encuentro, cuando faltan dos semanas
para su llegada a la ciudad de Sofía. Ésta será
la segunda etapa del Viaje Apostólico que realizará
el Pontífice a Azerbaiyán, del 22 al 23 de este mes
de mayo, y a Bulgaria, del 23 al 26.
"Al
tiempo que mi visita a vuestro país tiene un fin pastoral,
el de confirmar en la fe a los hermanos y hermanas, tengo también
el anhelo ferviente de estrechar los lazos de comunión cristiana
entre la Iglesia Católica y la Iglesia Ortodoxa de Bulgaria",
afirmó Juan Pablo II, destacando luego que espera que los encuentros
de los próximos días impulsen a los búlgaros
en la consolidación de sus raíces cristianas, en un
tiempo en el que se abre una vida nueva en esta nación. En
este contexto, el Santo Padre señaló que desea que su
visita se enmarque asimismo en un servicio de las Iglesias al continente
europeo, con el fin de impulsar una nueva unidad, contribuyendo al
desarrollo cada vez mayor de las riquezas de Europa Oriental y Occidental.
Evocando
a los Santos Cirilo y Metodio, "cuya visión de unidad
en la diversidad mantiene gran importancia a través de los
siglos", Juan Pablo II puso de relieve que esa misma visión,
"arraigada en el Evangelio de Jesucristo se funda en la libertad
que mana de la verdad y en la esperanza ante toda aflicción".
El Papa señaló que en su visita a Bulgaria, visitará
al pueblo nacido del testimonio de estos dos Santos y encontrará
la cultura que encarna el alma de sus enseñanzas.
Desde
las tumbas de los Apóstoles, Juan Pablo II dirigió cordiales
saludos de paz en el Señor al Santo Sínodo de la Iglesia
Ortodoxa de Bulgaria. Y, expresando su alegría por la visita
que realizará a este país dentro de pocos días,
el Papa encomendó al gobierno y pueblo búlgaros a la
protección de la Madre del Salvador y a la intercesión
de los Santos Cirilo y Metodio.
IMPULSAR
UN DIÁLOGO FECUNDO ENTRE EL MENSAJE CRISTIANO Y LAS CULTURAS
Juan
Pablo II recibió el viernes a los participantes en la XXX Asamblea
General del Centro Católico Internacional para la UNESCO, sobre
el tema "El diálogo intercultural e interreligioso. Una
oportunidad para la humanidad". En su discurso, el Pontífice
destacó el cincuenta aniversario, que se cumple este año,
del nombramiento del primer Observador permanente de la Santa Sede
ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación,
la Ciencia y la Cultura, en la persona del entonces Monseñor
Roncalli, el Beato Papa Juan XXIII.
"Desde
entonces, la Santa Sede sigue con atención las actividades
de la UNESCO en los bienes fundamentales de la Educación, la
Ciencia, las Ciencias Humanas, las Comunicaciones y la Información,
aspectos de la Cultura, realidad fundamental que nos une y que es
cimiento y finalidad" precisamente de este Organismo, puso de
relieve el Papa, señalando luego la importante labor del Centro
Católico Internacional para la UNESCO, que en colaboración
con otros Centros también católicos, participa en las
grandes actividades de la mencionada Organización de las Naciones
Unidas.
Exhortando
a los miembros del Centro Católico Internacional para la UNESCO
a proseguir en su "misión", de difundir a través
de sus iniciativas y publicaciones, "el saber y la preparación
específica, ofreciendo a nuestros contemporáneos la
posibilidad de afrontar los grandes desafíos culturales de
nuestro tiempo con respuestas dignas de la persona humana", Juan
Pablo II hizo hincapié en que "los grandes bienes que
constituyen la educación y la cultura, las comunicaciones y
la ciencia, conllevan una dimensión ética fundamental".
En este
contexto, el Santo Padre señaló que para "poder
ofrecer respuestas apropiadas, es necesario adquirir un conocimiento
científico adecuado, cumpliendo una reflexión profundizada
y proponiendo el esclarecimiento del humanismo cristiano y de los
valores morales universales". Y tras recomendar "una atención
especial" en lo que respecta a la familia, a la que le corresponde
en primer lugar la misión de educar a los jóvenes, Juan
Pablo II alentó a los miembros del Centro Católico Internacional
para la UNESCO a proseguir sin descanso en su importante tarea, con
el fin de impulsar un diálogo fecundo entre el mensaje cristiano
y las culturas.
El Santo
Padre, expresando su profunda gratitud por el servicio cumplido por
este Centro Internacional en la formación de expertos católicos,
"preparándolos seriamente y sin descuidar el permanecer
arraigados siempre en la fe", subrayó la importancia de
"ofrecer al mundo un testimonio creíble, alimentado con
la Palabra de Dios y el magisterio de la Iglesia".
Asimismo,
el Papa expresó su deseo de que las investigaciones cumplidas
por este Centro Internacional Católico sobre temas científicos,
culturales y educativos, "realizadas a la luz del Evangelio,
puedan ser puestas a disposición de todos los católicos
que actúan en estos sectores, y ello de forma habitual y accesible,
según las posibilidades ofrecidas por los medio modernos".
PAPEL
COMPLEMENTARIO E INSUSTITUIBLE DE SACERDOTES Y LAICOS
LOS
OBISPOS DE ANTILLAS FINALIZAN SU VISITA AD LIMINA APOSTOLORUM
"La
Iglesia debe ser misionera y apostar por la caridad", recordó
el Papa en su discurso a los obispos de las Antillas, señalando
el papel complementario e insustituible de sacerdotes y laicos.
Juan
Pablo II, en su discurso a los obispos de la Conferencia Episcopal
de las Antillas, que el martes finalizaron hoy su Visita ad Limina
Apostolorum, expresó su convicción de que los "numerosos
problemas que afrontan en el ministerio pastoral, incluso la necesidad
de mayores vocaciones sacerdotales y religiosas, se pueden resolver
con una valiente entrega de sí mismos y con una generosidad
cada vez mayor en la tarea misionera". "Importante meta
presentada por el Concilio", recordó el Papa señalando
luego "que si se han presentado problemas internos en la Iglesia,
en parte se deben quizá al hecho de que la comunidad católica
ha sido menos misionera de lo que el Señor Jesús y el
Concilio deseaban".
El Papa
subrayó a los prelados antillanos que "también
sus Iglesias particulares deben ser misioneras", "que deben
llegar con valentía a todos los rincones de la sociedad caribeña,
también a los más escondidos, armados con la luz del
Evangelio y el amor que no conoce fronteras". Y reiteró
que es el tiempo de echar las redes donde parece que no hay peces,
animando a los obispos antillanos a "Remar mar adentro"
y recordar en su misión que "debemos apostarlo todo por
la caridad".
Con palabras
de su Carta Apostólica "Novo Millennio Ineunte" (49)
Juan Pablo II hizo hincapié en la importancia de "la práctica
de un amor activo y concreto con cada ser humano". Pues éste
es un ámbito que "caracteriza de manera decisiva la vida
cristiana, el estilo eclesial y la programación pastoral".
Una vez más, el Santo Padre puso de relieve que "el siglo
y el milenio que comienzan tendrán que ver todavía,
y es de desear que lo vean de modo palpable, a qué grado de
entrega puede llegar la comunidad cristiana en la caridad hacia los
más pobres".
Analizando
las malas interpretaciones surgidas en lo que respecta al papel de
los laicos en la Iglesia católica, el Pontífice recuerda
que las enseñanzas de los Padres Conciliares "pusieron
de relieve la profunda complementariedad entre sacerdotes y laicos
que implica la naturaleza sinfónica de la Iglesia". Y
que precisamente una "mala interpretación de esta complementariedad
ha conducido algunas veces a una crisis de identidad y de confianza
entre los sacerdotes, así como a formas de compromisos laicos
demasiado clericales o demasiado políticos".
En este
contexto, en su discurso a los Obispos antillanos el Papa subrayó
que el "compromiso de los laicos se vuelve una forma de clericalismo
cuando los papeles sacramentales o litúrgicos que corresponden
al sacerdote son asumidos por fieles laicos o cuando los laicos asumen
tareas que competen al gobierno pastoral propio del sacerdote".
El Santo Padre recordó que, aún ante la disminución
de las vocaciones, "el sacerdote, como ministro ordenado, es
el que, en nombre de Cristo, preside la comunidad cristiana en lo
que concierne a los ámbitos litúrgicos y pastorales".
La Iglesia - subrayó Juan Pablo II - necesita un sentido de
la complementariedad entre la vocación del sacerdote y la de
los laicos que sea más profunda y creativa. Sin ello no podremos
ser fieles a las enseñanzas del Concilio ni salir de las dificultades
que suelen concernir a la identidad del sacerdote, la confianza en
él y la llamada al sacerdocio".
GUARDIA
SUIZA: "LA SANTIDAD, META DE TODA VIDA VERDADERAMENTE CRISTIANA"
Juan
Pablo II recibió el lunes al Cuerpo de la Guardia Suiza Pontificia,
entre ellos 28 reclutas que juraron esa tarde, y los alentó
a alcanzar la santidad, meta de toda verdadera vida cristiana. El
Papa recibía a los miembros del Cuerpo de la Guardia Suiza
Pontificia, en el aniversario de la caída de 147 soldados suizos
para defender al Papa Clemente VII, durante el asedio de Roma, en
1527.
En su
saludo pronunciado en alemán, francés e italiano, el
Santo Padre expresó su gratitud a "los jóvenes
que han aceptado entregar algunos años de su vida para velar
por el Papa, y para garantizar la seguridad de todos aquellos que
trabajan para la Santa Sede, volviéndose así herederos
de la larga tradición de fidelidad y entrega de la Guardia
Suiza". En este contexto, el Pontífice destacó
que a pesar de "las dificultades y pesos que conlleva este servicio,
los miembros de este cuerpo viven plenamente su misión como
una profundización de su propia fe y apego a la Iglesia, y
como una experiencia de fraternidad" entre ellos mismos.
Tras
alentarlos a sostenerse siempre los unos con los otros en su trabajo
cotidiano, enriqueciéndose mutuamente, el Papa saludó
a los familiares, amigos y representantes de las Autoridades suizas
que habían llegado para acompañarlos en este día
de fiesta. A los queridos reclutas, Juan Pablo II les pidió
que "nunca dejen de vivir el servicio responsable que prestan
a la Santa Sede en calidad de 'soldados del Papa', como misión
que el Señor mismo les confía". Y a "aprovechar
el tiempo que transcurren en Roma, en el centro de la Iglesia, para
crecer en la amistad con Cristo y caminar hacia la meta de toda verdadera
vida cristiana, que es la santidad". En este mes de mayo, dedicado
de forma especial a María, el Santo Padre les deseó
que los ayude a experimentar cada día la comunión profunda
con Dios, que para nosotros los creyentes comienza en la tierra y
se completa en el cielo.
XXII
MARATÓN DE PRIMAVERA
Antes
de la acostumbrada cita dominical, Juan Pablo II saludó a los
miembros del vigésimo segundo Maratón de Primavera que
iniciaba su recorrido precisamente desde la Plaza de San Pedro. El
Maratón de Primavera, organizado en ocasión de las jornadas
de fiesta de las escuelas católicas romanas es una cita en
la que participan alumnos, profesores, colaboradores, ex alumnos y
benefactores de la Escuela Católica con la finalidad de subrayar
una realidad social y educativa comprometida en llevar adelante un
proyecto de formación inspirado en el Evangelio.
El Pontífice
exhortó a las distintas escuelas católicas de Roma a
perseverar con valor y dedicación en esta importante misión
al servicio de las jóvenes generaciones. De igual forma el
Papa deseó que puedan llegar a buen término los pasos
que ya se han dado en el camino de la efectiva igualdad entre escuela
estatal y privada.
REGINA
COELI: CONFIANZA RECÍPROCA PARA LA CONVIVENCIA EN ORIENTE MEDIO
AMOR,
JUSTICIA, RECONCILIACIÓN Y PAZ: CIMIENTOS DE UN FUTURO EN EL
QUE SE RESPETEN LOS DERECHOS DE ISRAELÍES Y PALESTINOS
Juan
Pablo II reiteró el "mensaje universal de Belén".
"Amor, justicia, reconciliación y paz", "cimientos"
para "un futuro en el que se respeten los derechos" de israelíes
y palestinos.
En su
acostumbrada cita dominical del mediodía para el rezo mariano,
Juan Pablo II reiteró el "mensaje universal de Belén"
de "amor, justicia, reconciliación y paz", "cimientos"
para "un futuro en el que se respeten los derechos" de israelíes
y palestinos. Tras recordar que en muchos países se celebraba
en este domingo la solemnidad de la Ascensión de Cristo, el
Papa puso de relieve también la celebración en este
día de la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales. Y
después del Regina Caeli expresó el "gran alivio"
producido ante el hecho de que "la Basílica de la Natividad
de Belén ha sido devuelta a Dios y a los fieles".
El Santo
Padre, agradeciendo de todo corazón a cuantos han contribuido
"a devolver a este lugar santo su verdadera identidad religiosa",
mencionó de forma especial a las comunidades de los Franciscanos
y de los Greco y Armenio-ortodoxos que, con grandes sacrificios, "han
permanecido como custodios fieles del santuario". Asimismo, el
Papa alentó de forma apremiante a la "población
de Belén y sus alrededores" a "retomar el camino
con fe y esperanza en Dios, que en su tierra se acercó tanto
al hombre".
Y tras
señalar que su Enviado Especial, el Cardenal Roger Etchegaray,
que el sábado viajó nuevamente a Tierra Santa, "es
hoy portavoz en Belén" de estos sentimientos suyos, Juan
Pablo II hizo hincapié en el mensaje universal del lugar donde
nació Jesús: "El mensaje universal de Belén
es: amor, justicia, reconciliación y paz. Es sobre estos cimientos
sobre los que se puede construir un futuro que respete los derechos
de los pueblos israelí y palestino, en la confianza recíproca".
El Papa
señaló que con la solemnidad de la Ascensión
de Cristo, recordamos que Jesús, después de su resurrección,
se presentó a los discípulos dándoles muchas
pruebas de que vivía, apareciéndoseles durante cuarenta
días al final de los cuales, los llevó al monte de los
Olivos y "fue levantado en presencia de ellos, y una nube le
ocultó a su vista" (Hechos 1,9).
"Resucitado
y ascendido al Cielo, el Redentor constituye para los creyentes el
ancla de salvación y consuelo en el compromiso cotidiano al
servicio de la verdad y de la paz, de la justicia y de la libertad",
hizo hincapié el Santo Padre, recordando luego que "subiendo
al Cielo, Él nos vuelve a abrir el camino hacia la Patria celestial,
pero no para apartarnos de la historia, sino para dar a nuestro camino
el aliento de la esperanza".
Y subrayando
que, en efecto, cada día debemos confrontarnos con las realidades
de este mundo, como nos recuerda la Jornada Mundial de las Comunicaciones
Sociales, que hoy celebramos, Juan Pablo II destacó que los
recientes progresos en los medios de comunicación y en las
informaciones han colocado a la Iglesia ante "inéditas
posibilidades de evangelización". En este contexto, el
Santo Padre explicó que por ello ha elegido para este año
un tema de gran actualidad: "Internet: un nuevo foro para la
proclamación del Evangelio".
El Papa
exhortó a "entrar en esta moderna y densa red de comunicaciones
con realismo y confianza, convencidos de que, si se utiliza con competencia
y consciente responsabilidad, puede ofrecer oportunidades válidas
para la difusión del mensaje evangélico". Por lo
que "no se debe tener miedo a 'remar mar adentro' en el vasto
océano informático", pues "también
a través de él la Buena Nueva puede alcanzar el corazón
de los hombres y mujeres del nuevo milenio".
El Papa
introdujo el Regina Coeli señalando "que no se debe olvidar
que el secreto de toda acción apostólica es ante todo
la oración". Y que "precisamente en intensa oración,
después de la Ascensión, vivieron los discípulos
en el Cenáculo esperando al Espíritu Santo prometido
por Cristo. Y entre ellos estaba María, la Madre de Jesús".
Mientras nos preparamos para celebrar el próximo domingo la
solemne fiesta de Pentecostés, Juan Pablo II invitó
a invocar con María al Espíritu Santo, "para que
infunda en los cristianos un renovado impulso misionero y guíe
los pasos de la humanidad por la senda de la solidaridad y la paz".
El Papa
dirigió asimismo unas palabras en español a los fieles
presentes en la Plaza de San Pedro para rezar con él el Regina
Caeli: "Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española,
especialmente a los grupos de las parroquias del Sagrado Corazón
y de San Pedro de Madrid. Que la escucha de la Palabra de Jesucristo,
en esta Solemnidad de la Ascensión, os aliente en vuestra tarea
evangelizadora: "Id y haced discípulos de todos los pueblos".
¡ Qué Dios os bendiga!".
INTENCIÓN
GENERAL DE ORACIÓN PARA EL MES DE MAYO
En la
Intención General de Oración para este mes de mayo,
Juan Pablo II nos propone rezar "para que los cristianos vivan
la fe de modo coherente y sean testigos creíbles de la esperanza
evangélica". El Padre Eduardo Barrios, reflexionando sobre
este tema, señala el importante episodio, que supuso para la
causa ecuménica, la firma por parte de católicos y luteranos
de la "Declaración conjunta sobre la doctrina de la justificación".
Acto que tuvo lugar en la ciudad de Augsburgo, el 31 de octubre de
1999. Por la Iglesia Católica firmó el Cardenal Edward
Cassidy y por la Federación Luterana Mundial el Obispo Christian
Krause.
En dicha
Declaración se afirma, en el número 15, que "Sólo
por gracia mediante la fe en Cristo y su obra salvífica y no
por algún mérito nuestro, somos aceptados por Dios y
recibimos el Espíritu Santo que renueva nuestros corazones,
capacitándonos y llevándonos a buenas obras".
Con las
palabras del Papa "fe coherente" se nos recuerda que las
buenas obras son "fe-en-acción" y "fe practicada",
teniendo presente siempre que el hombre no puede gloriarse de sus
buenas obras, pues no las pone en práctica sin el soplo de
la gracia.
En su
Carta Apostólica Novo Millennio Ineunte, Juan Pablo II indica
de forma concreta el testimonio que los cristianos debemos dar en
nuestros días. Nos recuerda para ello la importancia de la
santidad, de la oración, del fortalecimiento de la vida interior,
que a su vez produce crecimiento en la caridad. Pues la auténtica
vida espiritual lleva a vivir con más fervor el mandamiento
nuevo del amor (cf. n. 42)
El Papa
hace un primer desarrollo del testimonio de la caridad en términos
de una mayor comunión y afirma que "En la Iglesia la comunión
ha de ser patente en las relaciones entre obispos, presbíteros
y diáconos, entre pastores y todo el Pueblo de Dios, entre
clero y religiosos, entre asociaciones y movimientos eclesiales"
(n. 45).
Además,
subraya el Santo Padre, "La caridad se abre por su naturaleza
al servicio universal, proyectándonos hacia la práctica
de un amor activo y concreto con cada ser humano" (n. 49), por
lo que cuando la comunión 'intraeclesial' se estrecha, se dan
saludables repercusiones 'ad extra'. Y haciendo hincapié en
que "en la persona de los pobres hay una presencia especial de
Cristo que impone a la Iglesia una opción preferencial por
ellos" (ibid.)
Mediante
esta opción - afirma también el Papa - se testimonia
el estilo del amor de Dios, su providencia, su misericordia y, de
alguna manera, se siembran todavía en la historia aquellas
semillas del Reino de Dios que Jesús mismo dejó en su
vida terrena atendiendo a cuantos recurrían a Él para
toda clase de necesidades espirituales y materiales, señalando
luego que es la hora de un nueva " imaginación de la caridad
", el Papa pone de relieve que "la caridad de las obras
corrobora la caridad de las palabras".
ENÉRGICA
CONDENA Y PESAR DEL PAPA POR MATANZA DE CIVILES EN COLOMBIA
"Juan Pablo II ha recibido con profundo pesar la triste noticia
del execrable atentado" perpetrado en Colombia por la guerrilla,
con bombas incendiarias, que ha causado más de 120 muertos
- la mayoría niños y mujeres - y numerosos heridos entre
la población civil refugiada en la iglesia de Bellavista, en
Bojayá. Así se lee en el telegrama que envió,
en nombre del Papa, el cardenal Secretario de Estado, Angelo Sodano,
al obispo de la diócesis colombiana de Quibdó.
También
en esta circunstancia, el Papa expresaba "su más enérgica
reprobación por estos nuevos actos de terrorismo que atentan
la pacífica convivencia y ofenden los sentimientos del querido
pueblo colombiano". Juan Pablo II, mientras ofrece sufragios
por el eterno descanso de los fallecidos, ruega a monseñor
Fidel León Cadavid Marín que haga llegar su más
sentido pésame a los familiares de las víctimas, junto
con la seguridad de su plegaria por el pronto y total restablecimiento
de los heridos.
El mismo
telegrama señala que el Santo Padre se siente muy cercano al
Pastor y comunidad eclesial de la diócesis colombiana de Quibdó,
"tan afectada por la violencia guerrillera, que no respeta personas
ni lugares sagrados". También la Conferencia Episcopal
colombiana expresó su profundo dolor por esta nueva terrible
matanza de inocentes, perpetrada la semana pasada cuando en la región
selvática se produjeron violentos combates entre la guerrilla
de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y los grupos paramilitares
de las Autodefensas Unidas de Colombia.
El presidente
de la Conferencia Episcopal de Colombia, afirma que el ataque al templo
donde niños, mujeres y hombres buscaron protección "es
una ofensa grave a la Iglesia Católica y a la comunidad".
Mons. Alberto Giraldo señala que la guerrilla de las Fuerzas
Armadas Revolucionarias de Colombia y los grupos paramilitares de
las Autodefensas Unidas de Colombia "están recorriendo
el camino equivocado para conseguir la paz y la justicia que dicen
buscar para los colombianos".
TELEGRAMA
DEL PAPA POR EL ACCIDENTE AÉREO EN NIGERIA
El cardenal
Secretario de Estado envió, en nombre del Papa, un telegrama
al obispo de la diócesis nigeriana de Kano, expresando el pesar
de Juan Pablo II por el accidente aéreo sucedido el sábado
en el norte de Nigeria, donde un avión se estrelló contra
un grupo de edificios poco después de despegar. Según
fuentes de los equipos de rescate, los fallecidos son unos 150, pues
a los 76 ocupantes del aparato - 69 pasajeros y los siete miembros
de la tripulación - hay que sumar al menos 80 personas que
estaban en las proximidades del lugar del accidente al producirse
el impacto.
DECLARACIÓN
DEL PORTAVOZ DE LA SALA DE PRENSA
El director de la oficina de prensa de la Santa Sede Joaquín
Navarro Valls respondiendo el martes a las preguntas de los periodistas
dijo que "no han habido contactos oficiales con las autoridades
italianas sobre un hipotético interés del Vaticano para
que fueran acogidos en Italia los refugiados palestinos" que
se encontraban todavía en la Basílica de la Natividad.
Y esto porque Italia, de momento, no se había dicho dispuesta
a aceptar en su territorio a los trece militantes palestinos.
VIAJE
DEL ENVIADO ESPECIAL DEL PAPA A TIERRA SANTA
El domingo
5 de mayo en Jerusalén, el cardenal Roger Etchegary, el enviado
especial del Papa a Tierra Santa, presidió una solemne concelebración
eucarística en la concatedral del Patriarcado latino ante la
presencia de centenares de fieles. En su homilía el purpurado
se dijo esperanzado de que se consiga la paz entre palestinos e israelíes.
"Aquí en Jerusalén la responsabilidad de los cristianos
-dijo- es más grande que en otras partes, porque están
iluminados por la memoria gloriosa de Cristo, que muriendo en la Cruz,
como dijo san Pablo, ha destruido el muro de la vergüenza y ha
creado en su propia carne, a partir de los hermanos enemigos, un único
hombre nuevo".
"Después
de un acontecimiento como la Pascua, nada es absurdo, lo imposible
se convierte en posible, afirmó el purpurado dando a entender
que espera en el "milagro de la paz". "Señor
danos la paz del mundo, salvando la paz de Tierra Santa". El
cardenal Etchegaray explicó a los fieles que había venido,
en nombre del Papa, para pedir el fin lo más rápidamente
posible de una situación trágica e inaceptable. "Yo
me he comprometido con todas mis fuerzas y con la ayuda del Nuncio
Apostólico podemos agradecer a todas las abejas silenciosas
que con un fervor obstinado intentan abrir la estrecha puerta de la
paz en Belén"· Yo espero antes de mi regreso a
Roma poder celebrar la misa en Belén, porque "Dios da
el coraje de la paz a todos los que se comprometen en esta causa,
que es también la causa de Dios" .
TIERRA
SANTA: "NADIE PUEDE QUEDARSE DE BRAZOS CRUZADOS"
El enviado
especial del Papa a Tierra Santa, cardenal Etchegaray declaró
tras su llegada a Roma que "nadie puede quedarse con los brazos
cruzados" y ha hecho un llamamiento para que se forme una cadena
de solidaridad de Oriente a Occidente. El Cardenal Etchegaray, en
su declaración difundida el miércoles por la oficina
de prensa de la Santa Sede - recuerda la profunda preocupación
de Juan Pablo II - y señala la "desconfianza, desprecio
y venganza que se ha acumulado en el difícil camino de la paz"
entre palestinos e israelíes.
El purpurado
francés, afirmó que la situación de la Basílica
de la Natividad de Belén, que lleva más de un mes es
"trágica e intolerable", e hizo hincapié en
que "la solución de la crisis que se vive en este lugar
simbólico y santo será la prueba de la voluntad de estos
dos pueblos de querer alcanzar un paz verdadera en toda Tierra Santa".
El enviado del Papa que transcurrió algunos días en
la región lamentaba que no se pudiera superar el último
obstáculo surgido cuando parecía que se había
llegado a una feliz solución.
Y el
viernes ante el feliz desenlace de la crisis de la Basílica
de la Natividad en Belén, el cardenal Etchegaray, afirmaba
que "lo sucedido en Belén representa una nueva Noche Buena,
con la luz de la paz que ahora resplandece en la Basílica e
ilumina a dos pueblos, a los israelíes y a los palestino".
El purpurado expresó profunda gratitud a todos aquellos que
han logrado llevar adelante la difícil negociación y
a los responsables de la Unión Europea por su valiosa contribución.
También
el Patriarca Latino de Jerusalén, monseñor Michel Sabbah
expresó su acción de gracias a Dios, recordando a los
cristianos que nunca hay que perder la esperanza. Por su parte, el
padre Giacomo Bini, ministro General de la Orden de frailes franciscanos
menores manifestó la alegría de toda la familia franciscana
y reiterando el compromiso cristiano en favor de la paz en Tierra
Santa. El Padre Bini destacó que "es un suspiro de alivio
para todos los comprometidos con la paz, aunque somos conscientes
de que se trata sólo de una etapa de un largo y difícil
camino de reconciliación y de entendimiento".
REUNIÓN
DEL CARDENAL SODANO Y EL MINISTRO DE EXTERIORES ISRAELÍ
El viernes
se hizo pública una declaración del director de la Sala
de Prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro-Valls en la que
se informaba de que esa mañana, Simón Peres, ministro
de Exteriores del Estado de Israel había sido recibido por
el secretario de Estado cardenal Angelo Sodano, acompañado
por el Secretario para las Relaciones con los Estados, Mons. Jean-Louis
Tauran. "El encuentro afortunadamente ha tenido lugar en el contexto
de la feliz conclusión del asedio de la Basílica de
la Natividad de Belén, pero que no nos puede hacer olvidar
los graves problemas que obstaculizan todavía la llegada de
la paz".
"El
cordial coloquio, continúa diciendo el comunicado, ha ofrecido
la ocasión para realizar un intercambio de opiniones sobre
la dolorosa situación actual en Tierra Santa y, en particular,
en la ciudad de Belén. Por parte de la Santa Sede se ha recordado
la línea promovida por el Santo Padre y por sus colaboradores
para una solución pacífica de los problemas, gracias
a un perseverante y leal diálogo entre las partes, con la ayuda
de la comunidad internacional". El comunicado termina indicando
que se ha discutido también sobre el proyecto de una Conferencia
Internacional de paz que debería terminar con compromisos precisos
para una paz justa y duradera.
EL
CARDENAL ETCHEGARAY VIAJA A DE NUEVO A TIERRA SANTA CON LA BENDICIÓN
DEL PAPA
Llevando
la bendición del Papa, el cardenal Etchegaray viajó
nuevamente a Jerusalén para presidir el domingo en Belén
una solemne eucaristía de alabanza, expiación y reconciliación.
El sábado
por la mañana el cardenal Roger Etchegaray viajó de
nuevo a Jerusalén. La declaración del director de la
oficina de prensa de la Santa Sede, que daba la noticia, añadía
que a raíz de la conclusión del asedio a la Basílica
de la Natividad de Belén, el purpurado presidiría el
domingo, en la Iglesia adyacente de Santa Catalina, una solemne eucaristía
de alabanza, expiación y reconciliación llevando a todos
la bendición del Santo Padre.
También
el sábado por la mañana, el clero y la población
de Belén se reunió en la Plaza del Pesebre, situada
delante de la Basílica de la Natividad, para un encuentro de
oración de acción de gracias por la liberación
de la comunidad religiosa y de la Basílica.
MONS.
TAURAN: ESTATUTO ESPECIAL PARA LOS LUGARES SANTOS
El secretario
vaticano para las relaciones con los estados, monseñor Jean-Louis
Tauran, se refería el domingo, en una entrevista publicada
por el periódico italiano "Il Corriere della Sera",
al hecho deplorable, y afortunadamente único, en la larga historia
de los lugares santos, de la ocupación de la Basílica
de la Natividad. "La implicación de la comunidad internacional
para resolver la crisis -insiste monseñor Tauran- ha demostrado
la validez de la fórmula que la Santa Sede lleva proponiendo
reiteradamente para preservar el carácter único y sagrado
de los lugares santos: un estatuto especial garantizado internacionalmente.
El secretario
para las Relaciones con los Estados reprocha además el hecho
de que la labor de la comisión israelo-palestina haya estado
obstaculizada por la falta de confianza recíproca entre las
partes. "Toda la problemática de Tierra Santa -insiste
el prelado- tiene que ser resuelta a través de un diálogo
sincero que presuponga que una parte no considere a la otra como el
enemigo, sino como un interlocutor y que entiendan el compromiso común
como una contribución a la construcción del gran mosaico
de la paz".
Monseñor
Tauran, que sugiere que hubiera sido deseable una implicación
internacional más incisiva, recuerda a este propósito
las palabras del cardenal Etchegaray el pasado domingo, durante la
Santa Misa celebrada en Jerusalén: "Señor salva
la paz en el mundo, salvando la paz en Tierra Santa".
En cuanto
a las acusaciones dirigidas a la Santa Sede de ser partidaria de los
palestinos, monseñor Tauran afirma que la Santa Sede siempre
ha estado de parte de la verdad y la justicia y sabe que la paz no
es nunca unilateral, pero hay que reconocer que nos encontramos frente
a dos pueblos que tienen los mismos derechos. El prelado añade
además que en este momento no debemos conformarnos con una
tregua, sino ayudar a ambos a eliminar las causas de futuras crisis.
"No
olvidemos que el objetivo final de cualquier proceso de paz es el
final de la ocupación y la creación de dos Estados con
fronteras seguras, recuerda monseñor Tauran que finaliza repitiendo
las palabras del Papa al cuerpo diplomático el pasado mes de
enero: "Los unos contra los otros, israelíes y palestinos,
no vencerán la guerra. Los unos junto a los otros podrán
ganar la paz".
OBLIGACIÓN
MORAL DE LAS RELIGIONES DE CUIDAR DE LA INFANCIA
Un día
antes de la apertura de la sesión especial de las Naciones
Unidas dedicada a la infancia, tuvo lugar el primero de los actos
promovidos por la Conferencia Mundial de las Religiones por la Paz,
en colaboración con UNICEF. El objetivo de los mismos es subrayar
la exigencia de acciones concretas y sensibilizar a gobiernos y comunidades
religiosas para que asuman mayores compromisos en beneficio de todos
los niños del mundo.
La Jornada
se inauguró con un simposio sobre el papel de las religiones
en la promoción de los derechos de niño, al que asistieron,
además de los líderes religiosos, responsables de los
organismos de la ONU y de Organizaciones No Gubernamentales. Durante
la tarde, los representantes de las distintas religiones tuvieron
encuentros con altos funcionales de Naciones Unidas, antes de participar
en una función religiosa interconfesional, en la que se puso
de relieve el lugar particular de los niños en todas los credos
y tradiciones religiosas y la obligación moral de las religiones
de cuidar de la infancia.
En esta
Jornada participaron entre otros: el arzobispo de Canterbury, George
Carey; el gran Jeque de Al-Azhar, Mohamed Sayed Tantawi; el cardenal
Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo Pontificio para
la Familia; Su Beatitud Anastasios, arzobispo de Tirana y de toda
Albania; el gran Rabino René Sirat, de la Conferencia de los
Rabinos Europeos.
Esta
fue la declaración del cardenal Alfonso López Trujillo
durante la Reunión de Líderes Religiosos como parte
de la Sesión Especial de la Asamblea General sobre los Niños
(Nueva York, 7 de mayo 2002):
"Hay
ciertas verdades en el mundo a las cuales todos adhieren y que continúan
siendo confirmadas por datos empíricos, tales como hechos matemáticos
y certezas científicas. Estas verdades siguen dirigiendo el
aprendizaje y el conocimiento, abriendo las puertas a mayores descubrimientos
y secretos.
Simultáneamente
hay ciertas verdades universales respecto a la humanidad y a la sociedad,
reconocidas o determinadas como indiscutibles, que son el fundamento
de las declaraciones de derechos humanos y de las leyes internacionales,
y que han sido custodiadas en un documento que, por esta razón,
ostenta el titulo de "Declaración universal de derechos
humanos". Es sorprendente que esta universalidad después,
no sea, de hecho, reconocida. Así, en el Articulo 3 de la Declaración,
se afirma la defensa del derecho a la vida, pero luego, se rechaza
de varias maneras, especialmente en lo concerniente al crimen del
aborto.
En este
diálogo, en el que los líderes religiosos están
comprometidos, conviene preguntar por qué esas verdades sociales,
verdades que son consideradas tan reales y concretas como cualquier
prueba matemática o dato científico, son tan a menudo
ignoradas, puestas en duda, o tergiversadas, especialmente en las
actividades de las Naciones Unidas.
Por
ejemplo, la Carta de las Naciones Unidas declara que: "Nosotros
los pueblos de las Naciones Unidas hemos determinado... reafirmar
la fe en los derechos humanos fundamentales, en la dignidad y valor
de la persona humana, en la igualdad de derechos de hombres y mujeres
y de naciones grandes y pequeñas...". La Declaración
Universal de los Derechos Humanos proclama en su primer Articulo:
"Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y
derechos...", y, sin embargo, muchas delegaciones rechazan hablar
de esta dignidad humana de la que todos hemos sido dotados y compartimos.
No se trata tan sólo de que esta verdad, este hecho, sea la
verdadera piedra angular de los derechos humanos resaltados por las
Naciones Unidas, sino de que es la piedra angular de la misma humanidad.
El reconocimiento de nuestra dignidad humana contribuye a reunirnos
y nos llama a cuidar a los demás y preocuparnos por ellos entonces,
¿por qué es ignorada?
La Declaración
de los Derechos de los Niños reconoce que "...el niño,
por su inmadurez física y mental, necesita especial salvaguardia
y cuidado, incluyendo una apropiada protección legal, tanto
antes como después del nacimiento" (Preámbulo)
y "...cada niño tiene el derecho inherente a la vida"
(Articulo 6). A pesar de ello, muchas delegaciones y gobiernos rehúsan
reconocer, tanto este hecho y derecho a la vida, como la verdad de
que la vida se inicia realmente en el momento de la concepción.
Delegaciones y gobiernos se niegan a afirmar que todo niño
tiene derecho a una protección y cuidado especiales, en virtud
de aquella dignidad de la que Dios le ha dotado a él o ella,
y que se debe dar al niño tal protección tanto antes
como después de su nacimiento.
Es desconcertante
que muchas delegaciones rechacen reconocer la dignidad humana de los
niños por nacer, mientras claman al mismo tiempo en favor de
la dignidad de los oprimidos a de quienes son victimas de discriminación.
Este selectivo, superficial a distorsionado reconocimiento y comprensión
de la dignidad humana supone una auténtica negación
de una de aquellas verdades sociales que nunca deberían ser
puestas en duda o tergiversadas.
La Declaración
de los Derechos Humanos declara también que "La familia
es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho
a la protección de la sociedad y del Estado" (Articulo
16). El mismo sentir se halla en el Preámbulo de la Declaración
de los Derechos del Niño, y ha sido repetido varias veces en
Planes y Programas de Acción de las Naciones Unidas. Parece
que en casi todos los debates en que se discute el rol de la familia,
sin embargo, esta verdad básica y reconocida, tenga que ser
tergiversada y muchas delegaciones intenten cambiar la interpretación
del carácter y rol de la familia en la sociedad y en la vida
del niño.
Los
niños tienen el derecho a vivir en una familia, a ser protegidos
y atendidos par unos padres o tutores que los quieren y cuidan. La
importancia de la familia y del rol que los padres juegan en la vida
de los niños es de todos conocida. Simultáneamente,
se deterioran los derechos de los padres, y se daña su patrimonio
religioso y social, así como su herencia cultural. En aquellas
penosas situaciones en que se rompen las estructuras de la familia
y el rol de los padres, los mismos que afirman profesar los mejores
intereses de los niños, a menudo abandonan sus responsabilidades
de proveer un desarrollo de los niños en amor, seguridad y
alimentación conveniente, negando, en la práctica, el
principio del bien superior del niño. En nombre del progreso,
se aparta otra verdad fundamental, desmoronándose la tradición
y comenzando el declive de la sociedad.
Todos
tienen derecho de acceder a la educación, sin embargo vemos
que sigue abierta la brecha entre ricos y pobres y entre los porcentajes
de chicos y chicas que acceden a la escuela y terminan un curso, de
educación.
Todos
tienen derecho al nivel más, asequible de salud, ¿puede
el mundo decir que la gente goza de este derecho? Demasiada gente,
demasiados niños, mueren cotidianamente por no tener acceso
a las medicinas más indispensables o a la atención sanitaria.
Demasiada gente sufre porque no tienen agua potable o porque viven
en ambientes insalubres.
Todos
tienen derecho a poder contar con un cobijo adecuado, y sin embargo
muchos niños no tienen un hogar y mucha gente vive en habitaciones
repletas de ciudades congestionadas. Este es otro importante derecho
negado frecuentemente.
Éstos
no son asuntos solamente religiosos sino más bien sociales,
aunque sea deber de la religión, que trata de la relación
espiritual que tenemos con Dios y unos con otros, el de señalar
cuando y donde el campo político y secular se desvía
de su verdadero camino.
El propósito
de establecer la Organización de las Naciones Unidas fue claramente
definido en su Carta. Durante estos cincuenta seis años, las
Naciones Unidas han luchado par hacer de esa declaración fundacional
una realidad en el mundo. Los principios enunciados en la Carta fueron
más que simples ideales. Ellos siguen guiando las acciones
concretas de la comunidad internacional en vistas a hacer del mundo
un mejor lugar para los niños de hoy y del mañana".
NO
SE PUEDE PERMANECER INDIFERENTE ANTE EL SUFRIMIENTO DE TANTOS NIÑOS
"La
Santa Sede quiere ser siempre fiel al amor de especial predilección
y ternura del Señor por los niños, en el reconocimiento
y respeto pleno que les es debido. Son don maravilloso de Dios".
Así empezó su intervención en la 27 sesión
especial de la Asamblea General de la ONU sobre la Infancia, el jueves
en Nueva York, el presidente del Consejo Pontificio para la Familia.
El Cardenal Alfonso López Trujillo, recordando la advertencia
de Juan Pablo II de que "no se puede permanecer indiferentes
ante el sufrimiento de tantos niños", destacó la
'Carta a los Niños' que el Santo Padre escribió en el
Año Internacional de la Familia, en 1994. Carta en la que el
Papa, poniendo de relieve que "los niños son amados por
Dios en el Niño Jesús, que se presenta en Belén
como un recién nacido", denunciaba "los sufrimientos,
amenazas y atentados de que son víctimas" los menores
en muchas partes del mundo.
"Padecen
hambre y miseria, mueren a causa de las enfermedades y la desnutrición,
perecen víctimas de las guerras, son abandonados por sus padres
y condenados a vivir sin hogar, privados del calor de una familia
propia, soportan muchas formas de violencia y abuso por parte de los
adultos" (Carta de Juan Pablo II a los Niños).
Advirtiendo
que "hay otras formas de violencia que proliferan, con drásticos
efectos", "cuando los valores morales son impunemente conculcados,
cuando la atmósfera es cargada artificiosamente de erotismo,
y se vacía y banaliza el significado de la sexualidad humana
,
el Card. López Trujillo recordó que a lo largo de los
siglos han surgido, en las comunidades cristianas, incontables instituciones
y obras en favor de la niñez e hizo hincapié en la exigencia
fundamental de luchar contra la pobreza, que flagela cruelmente a
la infancia cobrando tantas víctimas.
Tras
destacar las numerosas actividades de la Iglesia para impulsar la
tutela de la infancia a lo largo y ancho del mundo, el presidente
del Consejo Pontificio para la Familia señaló que "parece
que se ha perdido y debe ser renovado" el "reconocimiento
pleno de la dignidad humana del niño, de todos los niños,
imágenes de Dios, desde el momento de su concepción".
La Santa
Sede afirma que deben ser articulados los Derechos del Niño
con los Derechos de la Familia, señaló el cardenal López
Trujillo e hizo hincapié en que "como institución
fundamental para la vida de toda sociedad, la familia, fundada en
el matrimonio, ha de ser entendida como pacto por el cual 'el hombre
y la mujer constituyen entre sí un consorcio para toda la vida,
ordenado por su misma índole al bien de los cónyuges
y a la generación y educación de los hijos' (Juan Pablo
II, Carta a las Familias, Gratissimam sane, 1994, n. 7)
En la
27 sesión especial de las Naciones Unidas sobre la Infancia,
el cardenal López Trujillo afirmó que la delegación
de la Santa Sede "sostiene que ha de obtenerse una legislación
de protección de la niñez que preserve a los niños
de todas las formas de explotación y abuso, como por ejemplo
el incesto y la pederastia, ya sean en el trabajo, en la esclavitud,
en los delitos abominables de la prostitución y la pornografía,
en los secuestros o cuando son utilizados como soldados o guerrilleros,
ya sea como víctimas de conflictos armados o de sanciones internacionales
o unilaterales impuestas a algunos países; plagas todas ellas
que afrentan y escandalizan a la humanidad".
Tras
reiterar que estas variadas formas de violencia no deben quedar impunes,
el presidente del Consejo Pontificio para la Familia recomendó
que "es preciso vigilar cuidadosamente para que las adopciones
- nacionales o internacionales -, cuando sean realmente aconsejables,
observado el principio del 'Bien superior del niño, sean hechas
por matrimonios que ofrezcan verdaderas garantía por su estabilidad,
solvencia moral, capacidad de acompañamiento y ejemplaridad,
de tal forma que los niños puedan ser adecuadamente educados,
no entorpecidos, cuando no destruidos en su misma personalidad. Como
la misma ciencia enseña, forma parte del interés del
niño, para su desarrollo integral y armónico, el poder
tener un padre y una madre".
Y, señalando
una vez más la necesidad e importancia de que se reconozca
"el derecho fundamental a la vida", el cardenal López
Trujillo recordó que "los niños constituyen una
riqueza y una esperanza para la familia humana", por lo que "la
delegación de la Santa Sede hace votos para que esta Sesión
Especial de la Asamblea General de las Naciones Unidas tenga muchos
y valiosos frutos para asegurar que los niños de todo el mundo
sean 'primavera de la familia y de la sociedad'".
VISITA
DEL CARDENAL KASPER A YUGOSLAVIA
Del 10
al 15 de mayo el cardenal Walter Kasper, presidente del Consejo Pontificio
para la promoción de la Unidad de los cristianos, acompañado
por uno de sus colaboradores, está realizando una visita a
Yugoslavia respondiendo a una invitación de la Conferencia
episcopal de país. Así se lee en un comunicado difundido
por el Consejo Pontificio, en el que se indica, también, que
la visita permitirá desarrollar un programa con carácter
ecuménico, espiritual y de contacto con la Iglesia católica
e incluirá un encuentro con el Patriarca Serbio, Su Beatitud
Pavle.
El domingo,
el cardenal Kasper asistió a la liturgia oficiada por el Patriarca
Pavle en el Santuario de San Sava, en presencia del Patriarca greco-ortodoxo
de Alejandría, Petros VII, que está realizando en estos
días la visita al Patriarcado de Serbia. Después se
trasladó a la Catedral ortodoxa de Belgrado para realizar una
oración y una visita a este lugar sagrado.
El denso
programa del viaje incluye encuentros con los sacerdotes de Belgrado
a los que hablará de la visión de la Iglesia católica
sobre el ecumenismo; con los obispos de las diversas iglesias presentes
en el País, el cardenal Kasper tratará el tema: "Los
cristianos responsables de su unidad"; también se encontrará
con los religiosos, las religiosas y los representantes de la vida
social y cultural de la República Federal de Yugoslavia.
El comunicado
termina señalando que el Cardenal se trasladará por
último a Novi Sad, para tener un encuentro con los obispos
y sacerdotes de Serbia y Montenegro y visitará el monasterio
ortodoxo de Kovilj. Será recibido por el presidente del Gobierno
serbio y encontrará a los ministros del Culto y de Asuntos
Exteriores. La visita se inaugurará con una vigilia de oración
en la Catedral católica de Belgrado y una reflexión
sobre El Espíritu Santo, Transformador de la vida.
NOMBRAMIENTOS
PONTIFICIOS
ARCHIDIÓCESIS
DE GOIÂNIA (BRASIL)
Juan Pablo II ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral presentada
por monseñor Antonio RIBEIRO DE OLIVEIRA, en conformidad al
canon 401 § 1 del Código de Derecho Canónico. En
su lugar el Papa ha nombrado arzobispo metropolitano a monseñor
Washington CRUZ, C.P., hasta ahora obispo de São Luís
de Montes Belos.
DIÓCESIS
DE CRUZ ALTA (BRASIL)
El Pontífice ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de
la diócesis presentada por monseñor Jacob Roberto HILBERT,
en conformidad al canon 401 §1 del Código de Derecho Canónico.
El Papa ha nombrado en su lugar a monseñor Frederico HEIMLER,
S.D.B., hasta ahora obispo coadjutor de Umuarama.
DIÓCESIS
DE UMUARAMA (BRASIL)
El Santo Padre ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la
diócesis presentada por monseñor José Maria MAIMONE,
S.A.C., en conformidad al canon 401 §2 del Código de Derecho
Canónico.
DIÓCESIS
DE PELOTAS (BRASIL)
Juan Pablo II ha nombrado auxiliar de la diócesis al sacerdote
Jacinto BERGMANN, del clero de la archidiócesis de Porto Alegre,
hasta ahora subsecretario para la pastoral de la Conferencia Episcopal
Nacional, asignándole la sede titular episcopal de Ausuccura.
DIÓCESIS
DE SANTO DOMINGO DE LOS COLORADOS (ECUADOR)
Juan Pablo II ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis
presentada por monseñor Emilio Lorenzo STEHLE, en conformidad
al canon 401 §1 del Código de Derecho Canónico.
El Papa ha nombrado nuevo obispo al sacerdote Wilson Abraham MONCAYO
JALIL, párroco de Conocoto en la archidiócesis de Quito
y secretario de la Comisión de la Pastoral Social de la Conferencia
Episcopal Ecuatoriana.
DIÓCESIS
DE BATA (GUINEA ECUATORIAL)
El Pontífice ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de
la diócesis presentada por monseñor Anacleto SIMA NGUA,
en conformidad al canon 401 §2 del Código de Derecho Canónico
y ha nombrado en su lugar a monseñor Juan MATOGO OYANA, C.M.F.,
hasta ahora obispo de Ebebiyin.
OBSERVADOR
PERMANENTE DE LA SANTA SEDE ANTE LA UNESCO
El Santo Padre ha nombrado observador permanente de la Santa Sede
ante la UNESCO a monseñor Francesco Follo, minutante de la
sección para los Asuntos Generales de la Secretaría
de Estado.
GOVERNATORATO
DEL ESTADO DE LA CIUDAD DEL VATICANO
Juan Pablo II ha nombrado director general de los monumentos, muesos
y galerías pontificias a Francesco BURANELLI, hasta ahora regente
de la misma dirección general.
COMENTARIO
A LA LITURGIA DEL DOMINGO
SOLEMNIDAD
DE LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR (A): 12.05.02
"Se
me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra"
Celebramos
hoy con la Iglesia la Ascensión de Jesús a la derecha
del Padre, como Señor. Es el momento supremo de su vuelta al
Padre, tras realizar la obra de nuestra redención; el acontecimiento
que culmina su misión, para dar paso ya a la misión
de la Iglesia; el preanuncio de cómo vendrá al final
de la historia, para consumar su obra de salvación. Es lo que
viene a decirnos S. Lucas, en la narración que escuchamos como
primera lectura...
Era
ya la última vez que el Resucitado, de modo visible, compartía
la mesa con sus discípulos. Fue, entonces, cuando les recomendó:
"No os alejéis de Jerusalén; aguardad que se cumpla
la promesa de mi Padre, de la que yo os he hablado. Juan bautizó
con agua, dentro de pocos días seréis bautizados con
Espíritu Santo... Y, cuando el Espíritu Santo descienda
sobre vosotros, recibiréis fuerza para ser mis testigos en
Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y hasta los confines
del mundo". Dicho esto, lo vieron levantarse hasta que una nube
se lo quitó de la vista... La misión de Jesús,
aquella que comenzó con la unción del Espíritu
al querer ser bautizado por Juan, llegaba ahora a su culminación.
Sí, porque fue en la fuerza del Espíritu como había
proclamado la llegada del Reino de Dios, invitando a su acogida; porque,
animado del Espíritu, fue la implantación de ese Reino
lo único que, de verdad, le interesó; porque, al ser
rechazado por su pueblo, fue el Espíritu quien lo impulsó
a entregarse voluntariamente a la muerte, para hacerlo realidad lograda
con su resurrección. Y así, cumplido ya ese Reino plenamente
en Él como primicia, se manifestó durante cuarenta días
a los suyos para hacerlos sus testigos. Son ellos los que ahora habían
de ser ungidos por el Espíritu, para poder dar con valentía
esa gran noticia a todos los pueblos.
No,
el Reino de Dios no era ya una expectativa, más o menos utópica;
ni una esperanza cierta, pero sólo futura; ni una realidad
todavía oculta y por desvelar. En ese cacho de mundo, que era
la humanidad del Cristo Resucitado, brillaba ya con claridad. Y hoy,
en su Ascensión, es exaltado a la diestra del Padre, desde
donde reina sobre el cosmos y la historia de la humanidad. Por eso,
más que del Reino, es de Él de quien los suyos tenemos
que hablar. Y, para hacerlo con toda sabiduría, tenemos que
ser ayudados por el Espíritu de Dios en la forma que hoy nos
desea S. Pablo: "Que el Dios del Señor nuestro Jesucristo,
el Padre de la gloria, os dé espíritu de sabiduría
y revelación para conocerlo. Ilumine los ojos de vuestro corazón
para que comprendáis cuál es la esperanza a la que os
llama; cuál la riqueza de gloria que da en herencia a los santos;
y cuál la extraordinaria grandeza de su poder para nosotros,
los que creemos, según la eficacia de su fuerza poderosa. Esa
que desplegó en Cristo, resucitándolo de entre los muertos
y sentándolo a su derecha en el cielo".
De este
poder del Resucitado, exaltado hoy como Señor, deriva la misión
universal de sus apóstoles y su potestad santificadora en la
Iglesia. Lo escuchamos en el Evangelio: En aquel tiempo, los once
discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les
había indicado... Y acercándose a ellos Jesús,
les dijo: "Se me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra.
Id y haced discípulos de todos los pueblos bautizándolos
en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; y
enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado. Y
sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin
del mundo". Sí, son ellos los encargados de introducir,
a los que acepten su testimonio, en esa realidad cumplida ya plenamente
en Jesús: primero, mediante el bautismo que los engendra como
hijos del Padre, miembros de Cristo y templo del Espíritu;
luego, mediante la predicación con la que enseñarlos
a vivir conforme a ese don. Lógicamente, porque primero es
el ser y luego el hacer; sencillamente, porque el don de Dios es siempre
anterior a la respuesta del hombre; simplemente, porque la gracia
antecede al mérito. Y, para eso, está con su Iglesia
el Señor todos los días, hasta que su obra quede completada...
MENSAJE
DEL CUSTODIO DE TIERRA SANTA TRAS FINAL DEL ASEDIO DEL SANTUARIO
DE LA NATIVIDAD
La ocupación-asedio
del Santuario de la Natividad, en Belén, un capítulo
de la historia sin precedentes, será un recuerdo inolvidable
para los franciscanos, del heroísmo de los religiosos y religiosas
que han resistido durante toda una verdadera y propia "cuaresma".
Este es el mensaje hecho público el domingo por el Custodio
de Tierra Santa, padre Giovanni Battisteli, en un comunicado en el
que además manifiesta "la esperanza de que en particular
se haya podido percibir el testimonio que los religiosos han querido
dar de la superioridad del Amor, del Perdón e incluso de la
simple humanidad respecto al odio vengativo que, demasiado a menudo,
alienta a las fuerzas enfrentadas en la región.
La orden
franciscana en Tierra Santa explica además las razones de la
permanencia en el interior de la Basílica de la Natividad de
Belén de los frailes franciscanos y las religiosas, que "no
teniendo nada que temer ni de los palestinos, ni de los israelitas,
por el respeto que han tenido siempre hacia los dos pueblos, han permanecido
en su lugar".
Los religiosos,
que subrayan en la nota su deber de ser fieles custodios de este lugar
sagrado, reafirman la defensa de la dignidad de la persona independientemente
de sus creencias, cultura o pertenencia a una estirpe o nación.
"Hubiéramos permanecido y actuado de igual forma -añade
textualmente la nota- quienquiera que hubiese estado dentro o fuera".
"Nuestro objetivo final y nuestro deseo era el de encontrar una
solución diplomática", manifiestan los religiosos,
que agradecen la labor de todos los que han trabajado para llevarla
a cabo.
MARCHA
EXTRAORDINARIA PERUSA-ASÍS POR LA PAZ EN ORIENTE MEDIO
El jueves
fue presentada en Roma en una conferencia de prensa, la "Marcha
extraordinaria Perusa-Asís por la paz en Oriente Medio",
organizada por distintas asociaciones pacifistas y coordinada por
los mismos frailes franciscanos de Asís. La manifestación,
que se celebró el domingo, 12 de mayo, había sido convocada
ante la espiral interminable de violencia en Tierra Santa: los atentados,
las represalias, la ocupación militar, el asedio a la basílica
de la Natividad de Belén y a las ciudades palestinas, la angustia
y el miedo constante en ambas partes...todo ello ante la indiferencia
y la poca voluntad internacional en querer terminar con este conflicto.
Los promotores
de la marcha por la paz querían denunciar el comportamiento
irresponsable de la Comunidad Internacional y solicitar una intervención
decisiva, concreta y urgente de Europa y de las Naciones Unidas que
acabe con esta tragedia que está ensangrentando a dos pueblos.
Junto a los palestinos y judíos que abrirán la marcha
el domingo, los promotores de esta iniciativa pedirán la paz
para Jerusalén, ciudad símbolo de las tres religiones
monoteístas y quieren decir "basta" a la "guerra
infinita", a la ocupación y a la violencia.
"LA
IGLESIA E INTERNET" Y "ÉTICA E INTERNET"
La
Pontificia Universidad Salesiana organizó el martes una mesa
redonda sobre los dos documentos del Consejo Pontificio para las Comunicaciones
Sociales publicados recientemente y que llevan por título:
"La Iglesia e Internet" y "Ética e Internet".
Participó en la mesa redonda monseñor John Foley, presidente
del dicasterio para las Comunicaciones, Sociales que destacó
la oportunidad de celebrar este encuentro en la semana que precede
la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales centrada este año
en el tema: "Internet: un nuevo Foro para proclamar el Evangelio".
En su
breve alocución, Mons. Foley explicó las ventajas que
supone para la Iglesia Católica tener un sito propio e independiente
como el de "vatican.va" (este es el nombre). Y esto por
dos razones: en primer lugar, porque es fácil recordar la palabra
"Vaticano" que tiene pocas variantes en las distintas lenguas
y cuya forma en inglés "vatican" es universalmente
conocida, mientras en cambio "Santa Sede" resultaba más
complicada y una palabra no siempre familiar a todos.
En segundo
lugar, dijo el presidente de Consejo Pontificio para las Comunicaciones
Sociales, "vatican.va" puede ser reconocido como un verdadero
centro de comunicación de la Iglesia. Que da una información
auténtica desde el centro mundial de la Iglesia Romana Católica.
Existen muchos sitos que se declaran católicos, muchos ofrecen
un servicio extraordinario, excelente; pero otros, en cambio, están
sujetos a intereses e ideologías personales y difunden cosas
ajenas al Evangelio. " "vatican.va" en cambio -dijo
monseñor Foley- ofrece una garantía al dar seguridad
de información y de comunicación auténticamente
católicas, a menos que los "hackers" no consigan
penetrar y atravesar el muro de defensa".
XXXVI
JORNADA MUNDIAL DE LAS COMUNICACIONES SOCIALES
El domingo
se celebraba la trigésimo sexta Jornada Mundial de las Comunicaciones
Sociales. En Italia se había preparado por medio de un Encuentro
promovido por la Conferencia Episcopal Italiana, sobre el tema de
la Jornada Mundial de este año: "Internet: un nuevo Forum
para proclamar el Evangelio". El presidente del Consejo Pontificio
para las Comunicaciones Sociales, monseñor John Foley, presidió
el sábado en Milán, la Eucaristía de clausura
del Encuentro. En su homilía habló de San Ambrosio como
del ""empresario" ideal para Internet, capaz de ofrecer
no sólo la experiencia tecnológica, sino también
los contenidos apropiados e interesantes". El principio ambrosiano
de "toma y lee", puede ser válido también
"para los navegantes de Internet, de modo que lleguen al sitio
web adapto para obtener respuesta a su búsqueda religiosa y
espiritual.
"Internet
es un medio excelente para transmitir la Buena noticia de la Palabra
de Dios", continuó diciendo monseñor Foley. Y tomando
las características que definen a la Iglesia: una, santa, católica
hizo una descripción de Internet para concluir poniendo en
evidencia problemas y la posibilidad de mal conectados con la red
y afirmando el reto que tiene la Iglesia de adaptar Internet para
su uso apostólico.
ENCUENTRO
PANAMERICANO DE PRODUCTORES DE TELEVISIÓN CATÓLICA
El secretario
del dicasterio de las Comunicaciones Sociales, monseñor Pierfranco
Pastore, participó en un encuentro panamericano de productores
de televisión católica, que se celebró del 6
al 9 de mayo en la isla de Santo Domingo. Uno de los objetivos del
encuentro era la puesta a punto de las orientaciones y coordinación
de "Televida internacional", un proyecto televisivo que
quiere extender a todo el continente americano los géneros
y las finalidades evangelizadoras de la programación, ya ofrecidas
en la República Dominicana por la emisora católica "Televida".
"Los
valores familiares, así como los valores ciudadanos y democráticos
peligran constantemente y requieren una perseverante actividad educativa
por parte de los agentes sociales autorizados. En el área religiosa,
en muchos casos, predomina el prejuicio sobre la información;
tal mentalidad encuentra terreno fértil en algunos medios de
comunicación. "Por eso -explicó monseñor
Pastore- la Iglesia está llamada a ofrecer su mensaje en todos
los espacios posibles, alcanzar todos los tipos de público
y emplear los diversos lenguajes que cada uno requiere.
Por otro
lado el espacio mediático es cada vez más competitivo,
más global y fraccionado, señaló el obispo. "Junto
a las grandes cadenas televisivas surgen innumerables canales temáticos
que llegan por satélite y cable". Monseñor Pastore
dijo que "son oportunidades ante las cuales la Iglesia no puede
estar ausente. Y en este sentido "Televida" ha de encontrar
un amplio consenso en los episcopados del continente para dar respuestas
a estas realidades, configurando un buen equipo de coordinación
y de contenidos; manteniendo y acrecentando la calidad técnica
y de programación; y asegurando una reserva de programación
amplia.
"Acertar
con el modelo económico, multiplicar los lenguajes y estilos,
es también indispensable", afirmó monseñor
Pastore, puesto que "la identidad católica, universal,
de esta iniciativa sugiere que el anuncio del Señor ha de hacerse
en todos los formatos, con apertura a las distintas sensibilidades
eclesiales que laten en el continente y en el Pueblo de Dios".
Y todo ello ha de ser integrado en un contexto multi mediático.
"Hoy -dijo finalmente el secretario del dicasterio de las Comunicaciones
sociales- es imposible para un medio subsistir aislado, y por otra
parte, los distintos medios se potencian": los periódicos
anuncian programas de TV, la TV remite a la radio, la radio a Internet.