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AUDIENCIA GENERAL: RESUENA EL TRIUNFO DE CRISTO SOBRE EL MAL Y LA MUERTE Juan Pablo II después de los actos litúrgicos de Semana Santa y de las ceremonias de Pascua celebró el miércoles en medio de fuertes, pero discretas, medidas de seguridad, su primera Audiencia General de los miércoles en la plaza de San Pedro, que en esta ocasión estaba repleta de peregrinos y fieles de distintas partes del mundo. El Papa por consejo de sus médicos tras los largos y fatigosos ritos litúrgicos de estos días, y como señaló en una nota el director de la sala de prensa Navarro Valls, no leyó la catequesis en italiano, como hacía últimamente. En su nombre, fue leída por un oficial de la secretaría de estado. El Santo Padre en su catequesis reflexionó sobre la Secuencia Pascual que “retoma y relanza el anuncio de esperanza del Señor de la vida”. El Santo Padre quiso colocar el encuentro del miércoles en el clima luminoso de la Octava de Pascua que estamos viviendo, donde resuena el triunfo de Cristo sobre el mal y la muerte. “Este es el grito de dicha que en estos días prorrumpe en el corazón de la Iglesia. Victorioso sobre la muerte, Jesús hace don de la vida que no conoce la muerte a los que la acogen y creen en Él. Su muerte y su resurrección constituyen por tanto, el fundamento de la fe de la Iglesia”. “Los evangelios - explicó después el Santo Padre - refieren con riqueza de detalles los encuentros del Señor resucitado con las mujeres que corrieron al sepulcro y, luego, con los apóstoles. Como testigos oculares fueron ellos los que proclamaron antes que nadie el Evangelio de su muerte y de su Resurrección. Después de Pentecostés, sin miedo, afirmarán que en Jesús de Nazaret se han cumplido las Escrituras que hablan del Mesías prometido”. La Iglesia depositaria de este universal misterio de salvación lo ha ido comunicando, de generación en generación, a los hombres y mujeres de todo tiempo y lugar. También en nuestra época, recordó el Papa, es necesario que, gracias al compromiso de los creyentes, resuene con vigor el anuncio de Cristo muerto, que, por la fuerza de su Espíritu, está ahora vivo y triunfante. Para que los cristianos puedan cumplir plenamente este mandato que les ha sido confiado es indispensable - señaló el Pontífice - que encuentren personalmente el Crucificado resucitado, y se dejen transformar por la potencia de su amor. Cuando esto sucede, la tristeza se transmuta en alegría, el temor cede el paso al ardor misionero. Y el Papa explicó después como el evangelista Juan nos cuenta, por ejemplo, el conmovedor encuentro del Resucitado con María Magdalena, que fue de buena mañana al sepulcro, y encontrándolo abierto y vacío temió que el cuerpo del Señor hubiera sido robado. Por ello se puso a llorar desconsoladamente hasta que de improviso una voz la llamó por su nombre. Pensó que era el guardián del jardín y comprobó en cambio que era el Maestro. Corrió rápidamente a anunciar a los once apóstoles con entusiasmo: “he visto al Señor”. “Cristo mi esperanza ha resucitado”. Con estas palabras la Secuencia subraya un aspecto del misterio pascual, que la humanidad de hoy tiene necesidad de comprender más profundamente: “Marcados por inminentes amenazas de violencia y de muerte, los hombres están a la búsqueda de alguien que les dé serenidad y seguridad. ¿Pero dónde encontrar la paz, si no en Cristo, el inocente, que ha reconciliado a los pecadores con el Padre?” Sobre el Calvario la misericordia divina ha manifestado su rostro de amor y de perdón para todos. En el Cenáculo, después de la Resurrección, Jesús ha confiado a los Apóstoles la tarea de ser ministros de esta misericordia, fuente de reconciliación entre los hombres. “Santa Faustina Kowalska en su humildad, dijo Juan Pablo II, ha sido elegida para anunciar este mensaje de luz a los hombres de hoy. Es un mensaje de esperanza que invita a abandonarse en las manos del Señor. Que María, Mujer de la Esperanza y Madre de misericordia, nos haga encontrar personalmente a su Hijo muerto y resucitado. Nos haga agentes incansables de su misericordia y de su paz”. Este fue el resumen de la catequesis del Papa en español para los peregrinos de nuestra lengua presentes en la plaza de san Pedro, leído por un colaborador suyo de la Secretaría de Estado: Queridos
hermanos y hermanas: Juan Pablo II después de cada resumen catequético en distintas lenguas saludó personalmente a los peregrinos. Estas fueron sus palabras a los fieles de lengua española.
Y como siempre, al final de la Audiencia, el Santo Padre dedicó unas palabras a los jóvenes, a los enfermos y a los recién casados. El Papa invitó a los jóvenes, en esta ocasión especialmente numerosos los provenientes de algunas parroquias de la archidiócesis de Milán que hacen este año su Profesión de fe, a renovar precisamente la fe en el Salvador resucitado. “Sed entusiastas, sed sus testigos en la Iglesia y en la sociedad”. A los enfermos Juan Pablo II dijo que “la luz de la Resurrección, que es confortación y apoyo para el que cree, ilumine y haga fecunda vuestra cotidiana existencia”. Y a los recién casados que obtengan cada día del “Misterio Pascual la fuerza espiritual para alimentar y hacer crecer espiritualmente su familia”.
EVANGELIZACIÓN ESTÁ ESTRECHAMENTE LIGADA A FENÓMENOS DE EMIGRACIÓN Juan Pablo II recibió el sábado a los participantes en el Congreso Internacional promovido por la Unión Cristiana de Asociaciones que asisten a los emigrantes italianos en todo el mundo. Destacando su gratitud por la importante contribución a la evangelización, el Papa alentó a los que colaboran generosamente con estas asociaciones en las comunidades parroquiales. Tras dirigir un afectuoso saludo a todas las comunidades de emigrantes italianos en el mundo, el Pontífice recordó que la evangelización está estrechamente ligada a los fenómenos de la emigración. Y exhortó a los miembros de estas asociaciones «a permanecer en la fe con el testimonio del amor fraterno y de la atención activa a cuantos se encuentran en dificultad».
LAS POBLACIONES DE ÁFRICA EN EL CORAZÓN DEL PONTÍFICE ¡Que Dios bendiga a la gran familia humana, al pueblo mozambiqueño, a África y a cuantos la ayudan! Juan Pablo II reiteró el sábado que lleva siempre en su corazón a las poblaciones de África, al recibir al presidente de Mozambique y de la Unión Africana, Joaquín Alberto Chissano. En su saludo de bienvenida, el Papa se refirió a los grandes desafíos y esperanzas del continente africano, con el anhelo de que Dios bendiga a toda la humanidad, a África y a los que la ayudan: «Señor presidente Chissano, le saludo con deferencia deseándole los mejores éxitos en las nobles tareas confiadas a la Institución que preside. ¡Que el Espíritu celestial descienda sobre la gran familia humana y suscite en el corazón de todos la pasión y el don de la vida! ¡Que Dios bendiga a su familia, a todo el pueblo de Mozambique, a África y a cuantos la ayudan!
“QUE
CESE EL DERRAMAMIENTO DE SANGRE EN IRAK Y TIERRA SANTA” Tristeza de Juan Pablo II por las trágicas noticias de Tierra Santa e Irak. En su apremiante llamamiento en el Regina Coeli, el Pontífice pidió que «cese el derramamiento de sangre de los hermanos» - «actos inhumanos contrarios a la voluntad de Dios» y suplicó la liberación de los secuestrados En el rezo del Regina Coeli de este Domingo in Albis, de la Misericordia Divina, en el que «el Señor nos envía a llevar a todos su paz…», Juan Pablo II recordó la gran necesidad que tiene hoy la humanidad de experimentar precisamente la misericordia de Dios. Tras el rezo a «María, Madre de Cristo nuestra paz», el Papa, expresando profundo pesar por las trágicas noticias que llegan de Tierra Santa e Irak, dirigió un apremiante llamamiento: «Sigo con gran tristeza las noticias trágicas que llegan de Tierra Santa e Irak ¡Que cese el derramamiento de sangre de los hermanos. Semejantes actos inhumanos son contrarios a la voluntad de Dios!» Juan Pablo II manifestó su cercanía en la oración a los familiares de los que sufren con trepidación por la suerte de sus seres queridos, en especial por los secuestrados apelando a los sentimientos de humanidad de los secuestradores: «Invito a los secuestradores a tener sentimientos de humanidad. Les suplico que devuelvan a sus familias a las personas que están en sus manos, mientras ruego a Dios misericordioso por las poblaciones de Tierra Santa y de Irak y por todos aquellos que en esas regiones trabajan por la reconciliación y la paz». El Santo Padre hizo hincapié en el perdón que nos ha dejado como testamento Jesucristo desde lo alto de la Cruz el Viernes Santo. Martirizado y burlado, Cristo «invocó misericordia por quienes le mataron. Sus brazos abiertos y su corazón traspasado se volvieron así el sacramento universal de la ternura paterna de Dios, que ofrece a todos el perdón y la reconciliación». Tras evocar las palabras del Señor, «la paz con vosotros», el día de su resurrección, las mismas que pronunció ocho días después en el Cenáculo, como leemos en la página evangélica de este domingo, Juan Pablo II recordó que «la paz es el don por excelencia de Cristo crucificado y resucitado, fruto de la victoria de su amor sobre el pecado y la muerte», pues «ofreciéndose a sí mismo, inmaculada víctima de expiación sobre el altar de la Cruz, Él ha derramado sobre la humanidad la ola benéfica de la Misericordia Divina». Una vez más, el Papa puso de relieve que Jesús «es nuestra paz, porque es la manifestación perfecta de la Divina Misericordia. Él infunde en el corazón humano, que es un abismo expuesto siempre a la tentación del mal, el amor misericordioso de Dios». En este contexto, Juan Pablo II destacó que el mismo Señor nos invita también a nosotros a llevar su paz a todos: “El Señor nos envía también a nosotros a llevar a todos su paz, fundada en el perdón y en la remisión de los pecados. Se trata de un don extraordinario, que ha querido enlazar con el Sacramento de la penitencia y de la reconciliación. ¡Cuánta necesidad tiene la humanidad de experimentar la eficacia de la misericordia de Dios en estos tiempos marcados por la incertidumbre creciente y por violentos conflictos!”. Después del rezo mariano, rogando a la Madre de Cristo, que «en el Calvario acogió su testamento de amor», para que «nos ayude a ser testigos y apóstoles de su infinita misericordia», el Papa dirigió un saludo especial a los peregrinos procedentes de distintos países, venidos a Roma para celebrar este Domingo de la Misericordia Divina. Y los exhortó a seguir el ejemplo de santa Faustina Kowalska, testimoniando, precisamente, el amor misericordioso de Dios. Estos numerosos peregrinos, antes de dirigirse a la Plaza de San Pedro, para rezar con el Pontífice, habían participado en la Santa Misa que celebró esta mañana el cardenal vicario del Papa para la Diócesis de Roma, en la Iglesia del Santo Espíritu en Sassia, cerca del Vaticano, que es el principal centro romano de devoción a la Misericordia Divina.
REGINA COELI: MARÍA PROPORCIONA LA SERENIDAD INTERIOR QUE NINGÚN MIEDO PUEDE ALTERAR El Papa confió, en el Regina Coeli, a María "las preocupaciones y los temores de todo el mundo", porque ella "proporciona la serenidad interior que ningún miedo puede alterar". “El lunes del ángel que cada uno de nosotros se detenga junto al sepulcro vacío para meditar sobre el sublime prodigio de la resurrección de Cristo”. Este fue el deseo de Juan Pablo II durante el rezo del Regina Coeli, oración que sustituye al Ángelus en el tiempo pascual, un canto que expresa la alegría de María por la resurrección de su divino Hijo. “Que la Virgen María, silencioso testigo de este misterio, nos confirme la adhesión personal a Cristo, que murió y resucitó para la salvación del ser humano. Que sea nuestra maestra y guía en la fe; que nos sostenga en los momentos de la duda y la tentación; que nos procure esa serenidad interior que ningún miedo puede alterar porque se basa en la certeza de que Cristo de verdad ha resucitado”. Juan Pablo II subrayó también que María es el modelo de la comunidad cristiana, que se alegra por la Pascua de su Señor, fuente auténtica de alegría para todos los creyentes. Consciente de este evento salvífico, que cambió el rumbo de la historia, la Iglesia se asocia a quien que más de cerca vio la Pasión, la muerte y la Resurrección de Jesús.
«LA IGNORANCIA DEL PROPIO PASADO CONDUCE FATALMENTE A LA CRISIS Y A LA PÉRDIDA DE LA IDENTIDAD DE LOS INDIVIDUOS Y DE LAS COMUNIDADES» «La Iglesia de Cristo tiene para con el hombre una responsabilidad que de alguna forma alcanza cada dimensión de su existencia». Lo recordaba Juan Pablo II en su Mensaje a los participantes en el Encuentro organizado por el Comité Pontificio para las Ciencias Históricas, con motivo del cincuenta aniversario de su fundación. Tras hacer hincapié en que la Iglesia de Cristo «se ha sentido comprometida siempre en la promoción del desarrollo de la cultura humana, favoreciendo la búsqueda de lo verdadero, lo bueno y lo bello, con el fin de que el hombre pueda corresponder cada vez más a la idea creadora de Dios», el Santo Padre pone de relieve la importancia de cultivar «un serio conocimiento histórico en los distintos campos en los que se articula la vida de los individuos y de la comunidad». En este contexto, el Papa recuerda que «no hay nada más inconsistente que hombres o grupos sin historia», pues «la ignorancia del propio pasado conduce fatalmente a la crisis y a la pérdida de la identidad de los individuos y de las comunidades». Reiterando que «las Sagradas Escrituras de la Antigua y Nueva Alianza son una ulterior clave de lectura para un conocimiento adecuado del hombre y del mundo», Juan Pablo II subraya que, en efecto, «en el mensaje bíblico se conoce el acontecer humano en sus dobleces más escondidos. La creación, la tragedia del pecado y la redención». De esta forma, «se define el verdadero horizonte interpretativo en el que se pueden comprender eventos, procesos y figuras de la historia en su significado más profundo». «En este marco, se deben indicar también las posibilidades que un cuadro histórico renovado puede conducir a una convivencia armoniosa entre los pueblos, sostenida por la comprensión mutua y por el intercambio recíproco de las respectivas adquisiciones culturales», recuerda asimismo el Papa, haciendo hincapié luego en «el papel insustituible para derribar las barreras que existen entre los pueblos» que desempeña «una investigación histórica libre de prejuicios y vinculada únicamente a la documentación científica». De hecho, «en el curso de los siglos, se han levantado a menudo barreras debido a la parcialidad de la historiografía y al resentimiento recíproco», señala Juan Pablo II, poniendo de relieve que «la consecuencia ha sido que aún hoy persisten incomprensiones que son obstáculo para la paz y la fraternidad entre los hombres y los pueblos». Reiterando también que «la revelación de Dios a los hombres ha sucedido en el espacio y en el tiempo» y que «su momento culminante, es decir, el hacerse hombre del Verbo divino, su nacimiento de la Virgen María en la ciudad de David en el tiempo de Herodes el Grande, ha sido un evento histórico, con el que Dios entró en la historia humana», el Papa recordaba que «por ello contamos los años de nuestra historia a partir del nacimiento de Cristo». «Evento histórico es también la fundación de la Iglesia, por medio de la cual Cristo ha querido transmitir, después de su resurrección y ascensión, el fruto de la redención a la humanidad», insiste asimismo Juan Pablo II, para subrayar nuevamente que «la misma Iglesia es un fenómeno histórico y, por lo tanto, un objeto eminente de la Ciencia histórica». En efecto, «numerosos estudiosos – algunos de los cuales sin pertenecer siquiera a la Iglesia católica – le han dedicado su propio interés, dando una contribución importante a la elaboración de sus vivencias terrenales».
«ÁFRICA
Y EUROPA: UN DESTINO COMÚN» En ocasión del encuentro celebrado en Roma, con el lema «África y Europa: un destino común», el Santo Padre transmitió a los participantes su anhelo de que «esta iniciativa contribuya a suscitar una toma de conciencia cada vez más atenta a los graves problemas del continente africano». En un telegrama, enviado en su nombre por cardenal Secretario de Estado Angelo Sodano al alcalde de la capital italiana, Walter Veltroni, Juan Pablo II manifiesta asimismo su anhelo de que se impulsen «soluciones que respeten la dignidad de la persona en orden a la promoción del inestimable don de la vida humana y del desarrollo integral» de los pueblos de África. Precisamente en esta cita romana participó también el presidente de Mozambique y de la Unión Africana, Joaquín Alberto Chissano, que había sido recibido el sábado por el Papa. El mencionado encuentro, organizado por el ayuntamiento de Roma y por la Comunidad de San Egidio, que se inauguró el viernes y se clausuró el sábado, profundizó en temas políticos, históricos, culturales y sociales. Los participantes fueron afrontando estos temas en tres sesiones dedicadas a «África y Europa, releer la historia juntos, derechos humanos y democracia, de los conflictos a la paz»; «Humanismo africano y cultura europea en diálogo, responsabilidad de Europa y riqueza del pluralismo» y «Europa y África, una comunidad de destino, desarrollo sostenible, derecho a la salud, justicia social».
INTENCIÓN GENERAL PARA EL APOSTOLADO DE LA ORACIÓN PARA ABRIL En este mes de abril, Juan Pablo II invita al Apostolado de la Oración a rezar - en su Intención General - «Para que, con un cuidado particular se promuevan la sólida preparación de los candidatos a las Sagradas Ordenes y la formación permanente de los ministros ya ordenados». Intención ésta que lleva a profundizar en la Exhortación Apostólica Posinodal «Pastores Dabo Vobis», de Su Santidad al episcopado, al clero y a los fieles «sobre la formación de los sacerdotes en la situación actual». Documento que lleva la fecha del 25 de marzo — solemnidad de la Anunciación del Señor — de 1992, décimo cuarto año de su Pontificado y, en cuya Introducción, el Papa evoca las palabras del profeta Jeremías, «Os daré pastores según mi corazón» (Jer 3, 15). Aquellas con las que «Dios promete a su pueblo no dejarlo nunca privado de pastores que lo congreguen y lo guíen: «Pondré al frente de ellas - o sea, de mis ovejas - Pastores que las apacienten, y nunca más estarán medrosas ni asustadas» (Jer 23, 4). Precisamente al comenzar esta Exhortación Apostólica, el Santo Padre hace hincapié en que «la Iglesia, Pueblo de Dios, experimenta siempre el cumplimiento de este anuncio profético y, con alegría, da continuamente gracias al Señor. Sabe que Jesucristo mismo es el cumplimiento vivo, supremo y definitivo de la promesa de Dios: «Yo soy el buen Pastor» (Jn 10, 11). Él, «el gran Pastor de las ovejas» (Heb 13, 20), encomienda a los apóstoles y a sus sucesores el ministerio de apacentar la grey de Dios» (cf. Jn 21, 15ss.; 1 Pe 5, 2). Tras reiterar que «la formación permanente encuentra su propio fundamento y su razón de ser original en el dinamismo del sacramento del Orden», Juan Pablo II señala que «ciertamente no faltan también razones simplemente humanas que han de impulsar al sacerdote a la formación permanente». Y que «ello es una exigencia de la realización personal progresiva, pues toda vida es un camino incesante hacia la madurez y ésta exige la formación continua». Así como «es también una exigencia del ministerio sacerdotal, visto incluso bajo su naturaleza genérica y común a las demás profesiones, y por tanto como servicio hecho a los demás; porque no hay profesión, cargo o trabajo que no exija una continua actualización, si se quiere estar al día y ser eficaz. «La necesidad de «mantener el paso» con la marcha de la historia es otra razón humana que justifica la formación permanente», subraya el Papa, añadiendo luego que «estas y otras razones quedan asumidas y especificadas por las razones teológicas que se han recordado y que se pueden profundizar ulteriormente». En este contexto, Juan Pablo II recuerda que «el sacramento del Orden, por su naturaleza de «signo», propia de todos los sacramentos, puede considerarse —como realmente es— Palabra de Dios. Palabra de Dios que llama y envía es la expresión más profunda de la vocación y de la misión del sacerdote»…. …«Y el sacerdote da respuesta, en la fe, a la llamada de Jesús: «vengo y te sigo». Desde este momento comienza aquella respuesta que, «como opción fundamental, deberá renovarse y reafirmarse continuamente durante los años del sacerdocio en otras numerosísimas respuestas, enraizadas todas ellas y vivificadas por el «sí» del Orden sagrado». «Alma y forma de la formación permanente del sacerdote es la caridad pastoral: el Espíritu Santo, que infunde la caridad pastoral, inicia y acompaña al sacerdote a conocer cada vez más profundamente el misterio de Cristo, insondable en su riqueza (cf. Ef 3, 14 ss.) y, consiguientemente, a conocer el misterio del sacerdocio cristiano». Es más, hace hincapié Juan Pablo II «la misma caridad pastoral empuja al sacerdote a conocer cada vez más las esperanzas, necesidades, problemas, sensibilidad de los destinatarios de su ministerio, los cuales han de ser contemplados en sus situaciones personales concretas, familiares y sociales».
CHINA: LIBERADO EL OBISPO DE LA DIÓCESIS DE SHENGDING Monseñor Jia Zhiguo, obispo de la Diócesis de Shengding, ha sido puesto en libertad tras ser arrestado el pasado 5 de abril por las autoridades chinas, que cada año, durante los días más señalados de las celebraciones litúrgicas, arrestan a los responsables de las Iglesias católicas ya que las autoridades de Pekín no las reconocen como tales. El obispo, que había abierto un orfanato en su propia casa, ha sido detenido y llevado a prisión en multitud de ocasiones, las últimas fueron en marzo de 2002 y 2003 respectivamente, en ambas ocasiones faltaban pocos días para la celebración de la Semana Santa. El prelado, de 69 años, fue ordenado Obispo en 1980 y en total ha pasado ya 20 años en prisión. La última detención fue definida por la Santa Sede como un hecho “inadmisible en un estado de Derecho que declara que garantiza ‘la libertad religiosa’ y ‘los derechos humanos”. Se trata del segundo prelado leal a Roma arrestado y puesto en libertad en el último mes en Pekín.
IRAK: L’OSSEVATORE ROMANO CALIFICA DE BARBARIE SIN FIN» LA TRÁGICA EJECUCIÓN DE UNO DE LOS REHENES ITALIANOS Profundo pesar por el deterioro de la situación en Irak. «Barbarie sin fin», el diario vaticano «L’Osservatore Romano» lamentaba el jueves la trágica ejecución de uno de los rehenes italianos. Prosigue el ir y venir de noticias sobre el deterioro de la difícil situación iraquí. «Barbarie sin fin en Irak». Refiriéndose al «abismo de violencia» reflejado con la ejecución de uno de los rehenes italianos secuestrado en días pasados, el diario vaticano «L’Osservatore Romano» lamentaba en primera página este «acto inhumano» que es también «expresión de una espantosa brutalidad». La comunidad internacional sigue con preocupación esta situación caótica, que habla de combates en Faluya - donde la tregua es constantemente violada. Tras la liberación de otros tres rehenes japoneses y del asesinato de un diplomático iraní después de haberse anunciado la mediación de Teherán, el Nuncio Apostólico en Bagdad, Mons. Fernando Filoni, nos habló sobre cómo se viven estos momentos: «Pensando en las familias, en los rehenes… ello hace extremadamente complicada una situación ya de por sí difícil. No sólo desde un punto de vista psicológico sino también militar, político y diplomático. Se deben sopesar todos estos aspectos usando la razón para evitar que pueda haber otras situaciones que aumenten este momento de gran dolor. Pero también debemos pensar en el drama que vive el pueblo iraquí desde hace un año». Al ser preguntado sobre la posibilidad de que la Santa Sede medie por la liberación los demás rehenes - que según distintas fuentes, incluyendo los tres italianos que permanecen secuestrados, son algo más de 40 personas procedentes de doce países diferentes - el Nuncio Apostólico en Bagdad ha señalado plena disponibilidad a pesar de la dificultad de no saber con quién tratar: «Todo es posible, pero en realidad la situación es difícil porque no se sabe bien quiénes son los autores de los secuestros, por lo que es difícil establecer contactos para eventuales mediaciones. Son aspectos extremadamente graves. En línea de principio estamos abiertos a cualquier ayuda que podamos brindar».
MISIÓN EN TIERRA SANTA DEL CARDENAL DAOUD El Cardenal Ignace Moussa I Daoud, Patriarca de Antioquía de los Sirios y Prefecto de la Congregación para la Iglesia Oriental inició el martes una misión en Tierra Santa que se prolonga hasta el lunes 19 de abril. El miércoles, el purpurado acudió a la Basílica de la Natividad de Belén y a la del Santo Sepulcro de Jerusalén y además de presidir diferentes liturgias, el cardenal Moussa se entrevistó con el Custodio de Tierra Santa Giovanni Battistelli, con el patriarca latino Su Beatitud Michel Sabbah y con los responsables de otras Iglesias cristianas. La misión emprendida por el Patriarca de Antioquía de los Sirios se basa en analizar la situación de los cristianos en Tierra Santa. Situación que se debatirá durante las entrevistas que el cardenal Moussa tendrá con las autoridades tanto israelíes como palestinas.
CONCELEBRACIÓN EUCARÍSTICA EN MEMORIA DE MÁRTIRES Y POR RECONCILIACIÓN El presidente del Consejo Pontificio Justicia y Paz, Card. Renato Martino, presidió el domingo una concelebración Eucarística «en memoria de los mártires y por la reconciliación», en la clausura del simposio internacional organizado por la orden de los Frailes Menores sobre el tema «Diálogo interétnico y reconciliación». Con el décimo aniversario del genocidio en Ruanda como telón de fondo, y ante los numerosos conflictos interétnicos que hay en el mundo, este encuentro, que se celebró en Roma, en la Curia de la Orden de los Frailes Menores, se ha propuesto reflexionar sobre las causas de las violencias internas, basándose en la dramática experiencia ruandesa. Enfocando los problemas enlazados con el fenómeno denominado «etnocentrismo», es decir, el rechazo de los que no pertenecen a la misma religión, cultura, raza o grupo étnico, en este encuentro internacional se profundizó asimismo sobre la forma de impulsar el compromiso en favor de la reconciliación y de la paz. Intervinieron en esta cita el Secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, Arzobispo Robert Sarah; el obispo de Yibuti, Mons. Giorgio Bertin, exponentes de la Comunidad de San Egidio, de Caritas Internationalis y de otras organizaciones humanitarias. Así como religiosos procedentes de Pakistán, África del Sur, Estados Unidos, Mozambique, Israel e Indonesia.
ISRAEL: QUEJA DEL NUNCIO APOSTÓLICO EN JERUSALÉN POR TRATO A RELIGIOSOS El delegado apostólico en Jerusalén, el arzobispo Pietro Sambi, presentó una queja a los ministros israelíes de Interior, Abraham Poraz, y de Asuntos Exteriores, Silván Shalom, ante los problemas que están experimentando sacerdotes y religiosos en Tierra Santa. En días pasados la prensa informaba del último de una serie de incidentes protagonizados por agentes femeninas de la Policía de fronteras al inspeccionar los documentos y permisos de estancia en Israel de 23 monjas en el centro comercial de Malha, en Jerusalén. Las religiosas, encabezadas por la superiora de su convento, de 70 años, fueron obligadas a ponerse en pie y de cara a la pared para cachearlas, pues no tenían los visados, y ello debido a que el Ministerio del Interior se demora en entregárselos. El arzobispo Sambi afirma en su protesta formal que la demora en tramitar esos permisos afecta a religiosos de la Iglesia en todo el país. El Ministerio del Interior ha justificado las medidas coercitivas explicando que se trata de religiosos que llegan a Israel desde países árabes, y que por ello los trámites son más largos por razones de seguridad. Hace dos semanas, la Policía de inmigración detuvo a un fraile franciscano, de nacionalidad polaca, y estuvo a punto de expulsarlo del país, como en el caso de centenares de religiosos sin permiso de residencia, a pesar de que explicó a los agentes que estaba esperando la renovación de su permiso caducado. La expulsión fue evitada por una intervención del Ministerio de Exteriores. Las críticas por estos hechos se están haciendo preocupantes y los problemas se están agravando últimamente. Según fuentes de la Custodia Franciscana de Tierra Santa, Israel se niega también a conceder la residencia a 130 sacerdotes. Según ha informado en días pasados el diario «Haaretz», el primer ministro Ariel Sharon, ante las protestas de la Santa Sede, designó una comisión interministerial para resolver esos problemas.
ARCHIDIÓCESIS
DE VITÓRIA (BRASIL) ABADÍA
DE MONTECASSINO (ITALIA) VICARIATO
APOSTÓLICO DE BONTOC-LAGWE (FILIPINAS) CONSEJO
PONTIFICIO PARA LA CULTURA De las tareas y de los objetivos de este dicasterio relativamente moderno de la Iglesia, nos habló el mismo don Melchor, el cual ha colaborado en distintas ocasiones con el programa español de Radio Vaticano.
TRIBUNAL
SUPREMO DE LA SIGNATURA APOSTÓLICA
ACADEMIA
PONTIFICIA PARA LAS CIENCIAS
DOMINGO
II DE PASCUA (C): 18 de abril de 2004 Según antigua tradición, la Iglesia durante el tiempo de Pascua se olvida del Antiguo Testamento; no quiere escuchar sólo la promesa, impactada como está por la resurrección del Señor que es su cumplimiento. Por eso, la primera lectura está tomada de los Hechos de los Apóstoles, que son el Evangelio del Espíritu Santo. En ellos se narran los primeros hechos de la Iglesia naciente, ese nuevo Israel fruto de la Pascua del Señor, animado ya por su Espíritu. De este Libro se nos da hoy como un «flash» de aquella comunidad de Jerusalén. Se nos cuenta cómo crecía. No es que algunos se apuntasen a un grupo. No se trataba de pertenecer a un movimiento. No era cuestión de sintonizar con una espiritualidad particular. Es que crecía el número de los creyentes, hombres y mujeres, que se adherían al Señor, el único autor y protagonista de nuestra liberación. Y, por tanto, el único que la ofrece enseñándonos el camino. Porque Él es la salvación y Él es el camino. Por eso, intentando sintonizar con aquel primer entusiasmo, con aquella primera motivación, exclamamos con el salmista: Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Sí, era la proeza de Dios manifestada en Cristo y testimoniada por los apóstoles lo que atrajo desde el principio a la Iglesia. La segunda lectura está tomada del Libro del Apocalipsis. En ella Juan mismo nos narra la experiencia que tuvo, precisamente en domingo. Fue arrebatado al cielo, donde está vivo el Señor, que le reveló: No temas: Yo soy el primero y el último, yo soy el que vive. Estaba muerto y, ya ves, vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del abismo. Escribe lo que veas, lo que está sucediendo, y lo que ha de suceder más tarde... y envíaselo a las 7 iglesias de Asia. Sí, el Señor quería mostrarle la Iglesia vista desde arriba, verla como Él la ve, para comprender desde Él su propia obra: eso que Él hace en ella, y que no es transitorio, sino definitivo; eso que no es mera apariencia que se esfuma, sino profundo y sólido... Hoy el evangelio nos narra cómo a los ocho días, cuando otra vez era domingo, se hizo presente de nuevo el Señor, en medio de los suyos: Paz a vosotros, les dijo, y enseñándoles las manos y el costado los discípulos se llenaron de alegría. Es lo que el Señor sigue haciendo con nosotros cada domingo. Es Él el que eligió este día, y no otro, para encontrarse con todos los suyos. Es Él quien nos convoca y nos reúne; y no simplemente nosotros que acudimos. Y se pone delante, para mostrarnos los signos gloriosos de su victoria; para mostrarnos su entrega a la luz de su triunfo pascual; para actualizar con nosotros el misterio de su muerte y su resurrección. Quiere así llenarnos de alegría para podernos confiar su misión. Porque inmediatamente después les volvió a decir: Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado así también os envío yo. Y, dicho esto, exhaló su aliento sobre ellos diciendo: “Recibid el Espíritu Santo; a quienes les perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos”. Y es que el que experimenta esta salvación concedida en Jesús ya no puede callar, sino anunciar. Y es que el que se llena de la alegría de su presencia, ya no puede sino contagiarla. Y es que el que recibe su Espíritu, que es el mismo de Dios, ya no puede sino promover la comunión entre los hombres. Pero eso sí, hay que acudir con fe. Tomás faltó a la reunión y se lo perdió, porque era incrédulo y sólo creía en lo que veía. No se dejó convencer por la alegría de sus hermanos. Por eso tuvo que corregirlo el Señor. Vayamos, pues, hermanos con esta fe que le faltó a Tomás, porque el Señor le advirtió: Dichosos los que sin ver creen. Es así como podremos experimentar su presencia y su salvación: esa que es definitiva; eso que Él hace desde arriba, como pudo ver Juan cuando fue arrebatado aquél domingo; eso que nos puede abrir los ojos para saber mirar y para saber escoger sin ningún tipo de manipulación; ese don del Espíritu que nos puede arrancar de la tibieza y empujarnos a la misión de Jesús.
CATÓLICOS, ORTODOXOS Y PROTESTANTES CELEBRAN JUNTOS LA PASCUA Por segunda vez, desde que empezó el milenio, todos los cristianos han celebrado juntos la solemnidad de la Pascua. Una celebración conjunta de católicos, ortodoxos y protestantes que no coincide siempre porque la Iglesia católica y en general los cristianos de occidente siguen el calendario gregoriano, reformado por el Papa Gregorio XIII en 1582, mientras que los orientales continúan calculado la fecha según el calendario juliano establecido por Julio Cesar en el 46 después de Cristo. El distinto modo de calcular el tiempo, también para el calendario lunar, provoca que a menudo haya una diferencia de una o dos semanas entre la Pascua occidental y la oriental. En ocasiones, como este año, las fechas coinciden. Existe por parte de todos los cristianos un creciente deseo de celebrar en común la Pascua en una misma y única fecha. Ya el Concilio Vaticano II, en la Constitución litúrgica Sacrosantum Concilium, había expresado este deseo. Incluso e un coloquio celebrado en Siria en marzo de 1997, se propusieron algunas hipótesis en este sentido. También la Basílica del Santo Sepulcro en Tierra Santa celebró el domingo la alegría pascual con la participación de todos los cristianos de distintos ritos. La primera celebración de la misa solemne fue la del Patriarca Latino Michel Sabbah. Asistieron muchos peregrinos procedentes de distintas partes del mundo, pero faltaron los fieles de las vecinas ciudades palestinas a causa del bloqueo de los territorios ocupados por las amenazas de atentados terroristas. “Tiempos difíciles –dijo el Patriarca en su homilía- que sin embargo son de gracia y no de desesperación y no debe ser tiempo de venganza. El mal de nuestra tierra es la sangre derramada, el ser humano despreciado y sometida a la humillación y al miedo. Ahora es Pascua y nuestros pueblos, israelí y palestino, deben pasar de la muerte, en la que están inmersos hoy, a la vida que desean en paz y en el amor, en el respeto de la dignidad humana y el respeto de la propia tierra y de la propia independencia”. En el mismo contexto de la celebración de la Pascua, el Patriarca de Moscú ha invitado al clero ortodoxo a trabajar por la unidad y la comunión. “Deseo –escribe Alejo II- que la alegría de la Pascua, que todos celebran el mismo día, tanto en el este como en el oeste, se difunda en cualquier lugar”.
750.000 EUROPEOS A FAVOR DE CRISTIANISMO EN LA FUTURA CONSTITUCIÓN El proyecto de Constitución de la Unión Europea está siendo debatido en la actualidad por los representantes de los Gobiernos de los Estados miembros. A raíz de los debates y las polémicas que está causando la aprobación del texto en materias como la religión, 750.000 europeos han firmado a favor de que el cristianismo esté en la futura Constitución. La recolección de firmas comenzó durante la presidencia italiana de la Unión Europea, el segundo semestre de 2003, y tiene como objetivo llegar al millón de firmas necesarias para promover una iniciativa popular. El proyecto de Constitución Europea elaborado por la Convención, incluye en su preámbulo referencias tanto a la tradición grecorromana como al “iluminismo”; pero se omite cualquier alusión al cristianismo que a lo largo de 1.600 años permitió la consolidación de Europa. De ahí que más de tres cuartos de millón de europeos hayan firmado para que se haga referencia explícita al cristianismo en la futura Constitución. El proyecto de Constitución está siendo debatido en la actualidad en el marco de la Conferencia Intergubernamental ya que los Jefes de Estado y de Gobierno no alcanzaron un acuerdo en la cumbre de Bruselas del pasado diciembre, por lo que los debates continúan en 2004 bajo la presidencia irlandesa. La versión definitiva que adopte la Conferencia Intergubernamental deberá ser ratificada a continuación por los quince Estados miembros actuales y en los diez futuros Estados miembros de la Unión Europea.
CARDENAL ROUCO FELICITA AL NUEVO PRESIDENTE DEL GOBIERNO ESPAÑOL El presidente de la Conferencia Episcopal Española, cardenal Antonio María Rouco Varela, y el Secretario General, padre Juan Antonio Martínez Camino, expresaron el sábado, en nombre propio y en nombre de los obispos españoles, su «más sincera felicitación» al nuevo presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien fue investido para el desempeño de esta función el pasado viernes, por el Parlamento, y quien en el sábado prometió su cargo ante su Majestad el Rey. En una carta similar a la que ya le enviaron tras las elecciones generales del pasado 14 de marzo, el presidente de la Conferencia Episcopal Española y el Secretario General de la misma se refieren a la alta misión asumida por Rodríguez Zapatero, «cargada de tantas responsabilidades, en un momento delicado para España y para el mundo». Asegurando al presidente del gobierno español «una colaboración leal» y que «la Iglesia le asistirá» a él y a su gobierno «con la oración pública y privada que, según costumbre bimilenaria, eleva asiduamente a Dios por los gobernantes», en la misma carta se recuerda que «la Iglesia, cuya fe profesa una parte tan significativa de los españoles, desea aportar su colaboración específica al bienestar de todos y al fortalecimiento de la convivencia nacional sobre los cimientos de la justicia y la libertad».
MOZAMBIQUE: DESAPARICIÓN Y TRÁFICO DE ÓRGANOS DE CIENTOS DE NIÑOS La desaparición y el tráfico de órganos de centenares de niños mozambiqueños de Nampula continúa siendo el centro de la campaña de sensibilización y denuncia llevada a cabo por la Orden de los Siervos de María. En el mes de marzo los religiosos y religiosas de la congregación han hecho un llamamiento a las autoridades competentes nacionales e internacionales para que intervengan con eficacia y resuelvan la incapacidad de los órganos policiales locales y las amenazas de muerte dirigidas a las misioneras. La primera denuncia fue realizada en el mes de febrero por las Siervas de María, el arzobispo de Nampula, las Conferencias de religiosos y religiosas de Mozambique. El padre Claudio Avallone, de la misma orden, explicó que la edad media de los niños es de 13 años y subrayó la dificultad de establecer un número preciso de desaparecidos. Esta imposibilidad radica en la inexistencia de censos o estadísticas fiables, lo que ha obligado a basar las estimaciones en el número de comidas que las congregaciones distribuyen entre los chicos habitualmente. “En Navidad los niños de la calle que asisten a los comedores suele ser próximo al centenar. Este año –declaró el P. Avallone- solo se han distribuido 7 comidas”. Hablando específicamente del fenómeno, el sacerdote precisó que “los órganos son extraídos de los cadáveres y destinados al tráfico internacional y a la experimentación farmacéutica. Una buena parte se utiliza también en los ritos tribales. El religioso acusó también a la policía local que demuestra una cierta connivencia con los autores de estos terribles delitos.
ORACIÓN Y AYUNO COMO PREPARACIÓN ESPIRITUAL A ADHESIÓN DE POLONIA A LA UNIÓN EUROPEA El cardenal Josef Glemp, Primado de Polonia, dirigió una Carta Pastoral a los polacos de todo el mundo en la que los exhorta a una jornada de oración y ayuno para el próximo 30 de abril, como preparación espiritual a la adhesión de la nación polaca a la Unión Europea, que será el uno de mayo de este 2004. El purpurado invita asimismo a los polacos de todo el mundo a rezar el Rosario en los días del 25 de abril al 3 de mayo y a leer el Evangelio contribuyendo asimismo con donativos que serán destinados a la construcción de la iglesia de la Divina Providencia en un barrio de Varsovia. El anhelo de dicha construcción nació el año 1791 como acción de gracias a raíz de la proclamación, en Polonia, de la primera constitución democrática de Europa. La Iglesia polaca volvió a impulsar el anhelo de construir este templo de la Divina Providencia después del retorno de Polonia a la democracia en 1898. El próximo dos de mayo, el Card. Josef Glemp presidirá entre los cimientos de esta construcción la concelebración de una Misa de Acción de Gracias por la integración de su país en la Unión Europea.
I ANIVERSARIO DE LA ENCÍCLICA ECCLESIA DE EUCHARISTIA Hace un año, el 17 de abril, el Santo Padre firmaba y promulgaba la Encíclica “Ecclesia de Eucharistia”. Era el Jueves Santo de un año especial el XXV° del pontificado de Juan Pablo II y el Año del Rosario. Con testa ocasión tuvimos con nosotros al arzobispo Domenico Sorrentino, secretario de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos. Usted hace un año era el obispo prelado de Pompeya, ciudad del Rosario, donde el Santo Padre fue en peregrinación. ¿Cómo vivió la promulgación de aquella encíclica, aquel importante acontecimiento del magisterio del Santo Padre?
¿Cuál es el mensaje profundo de este documento pontificio?
En la Encíclica el Papa más de una vez narra sus experiencias personales respecto a la Eucaristía. ¿Nos puede decir alguna cosa de estas páginas autobiográficas?
La Encíclica recoge también el dolor del Papa por los abusos que a veces se hacen en la práctica litúrgica respecto a la Eucaristía.
CAMPAÑA DEL ENFERMO 2004: “MÁS CERCA DE LOS QUE ESTÁN LEJOS” “Más cerca de los que están lejos”, es el título del Mensaje de la Campaña del Enfermo 2004, que han lanzado los Obispos españoles de la Comisión Episcopal de Pastoral, con el fin de “acercar la salud y la salvación cristiana acogidas mediante un proceso de conversión personal cada vez más hondo”. El motivo por el que se ha presentado este documento es la firme convicción de los Obispos de la Comisión Episcopal de Pastoral de la Conferencia Episcopal Española de la voluntad de cercanía primordial hacia Dios: “no podemos hacer sentir a los hombres y al mundo su cercanía saludable y sanadora si no vivimos en una creciente comunión de vida con Él”, explican en el Mensaje. Desde 1985, año en que se iniciaron las Campañas del Día del Enfermo, la Iglesia que peregrina en España se ha servido de esta iniciativa pastoral para acercar cada vez más a los fieles, y a toda la sociedad, a los problemas más señalados del mundo de la salud como respuesta del Evangelio a los mismos desde la perspectiva de Jesucristo. “¿Quién enferma sin que yo enferme, quién cae sin que a mí me dé fiebre?” (2 Cor 11,29). Con esta exclamación de San Pablo es como desde la Comisión Episcopal de Pastoral se explica la sensibilidad de la Iglesia hacia la salud de los hombres y del mundo, “de su voluntad universal en el espacio y en el tiempo de acercarse, de hacerse presente y de asistir a todo hombre que viene a este mundo” (Jn 1,9). Por este motivo, explican, la gran tarea de la Iglesia, la evangelización, no es sino el desvelamiento a los hombres de una clave interpretativa de esa historia a la que no es posible acceder desde los solos recursos de la cultura humana, ya que es una clave revelada por “el Hijo único, que está en el seno del Padre, que es quien la ha dado a conocer al hacerse carne y habitar entre nosotros” (Jn 1, 14.18). De ahí la importancia de la Iglesia que está llamada a mostrar su cercanía a Dios, “traducida en asistencia sanadora, aliviadora y consoladora”, ya que “todos los cristianos deben ser instruidos diligentemente sobre el misterio de la enfermedad y sobre sus obligaciones para con los enfermos”, explican los Obispos. Esta unión que la Iglesia ofrece a todo ser humano con Dios, a través de los enfermos fue revelada de forma tangible por Dios, cuya vida resumió así el apóstol Pedro: “Pasó haciendo el bien y curando” (Hech 10, 38). “Él, a quien la Iglesia invoca como Sanador enfermado, Buen samaritano y Médico de nuestros cuerpos y nuestras almas – explican en el Mensaje los prelados – prometió estar con nosotros cada día, hasta el fin del mundo”. Por este motivo, el mundo de la sanidad se ha convertido en “el mundo de todos, de los cercanos y de los lejanos”, dice el documento, aunque al mismo tiempo resalta la importancia decisiva del mundo de la salud como lugar de encuentro entre la cultura cristiana y la científico- técnica, entre las asistencia médica y la asistencia pastoral. Con esta “Campaña del Enfermo 2004” se quiere resaltar la necesidad de acercamiento a los enfermos más necesitados y desasistidos cuya situación es precaria, como es la de los ancianos que viven solos en sus domicilios, y la de los enfermos mentales así como a sus familias. Una mención especial merecen los enfermos del “tercer y cuarto mundo” y las diferencias que se dan hoy en “el mundo global” que, lejos de acercar a las personas provoca “el alejamiento en las relaciones humanas”. Por eso en el documento se señala que “todos somos en mayor o menor medida ... el sacerdote, el levita y el buen samaritano de la parábola” (Lc 10, 30- 35), ya que es importante “la enorme repercusión que comporta la voluntad de aproximación y cercanía de los indigentes problemas sanitarios de nuestro mundo y, sobre todo, a quines los sufren o, por el contrario, las nefastas consecuencias que acarrea el desinterés o el declarado egoísmo de sus también múltiples manifestaciones insanas”, aclara el documento. Por último los Obispos de la Comisión Episcopal de Pastoral acuden a Santa María para que “sea el ejemplo vivo que inspire nuestras actitudes y acciones”, ya que ella “nos hizo presente a Dios, acogiéndolo en la humanidad de Jesús, el fruto bendito de su vientre”. “Que sea, pues, ella quien guíe nuestros pasos al encuentro de Jesús, presente en todos los afectados de salud en nuestro mundo y en sus cuidadores”, finaliza el documento.
DÍA INTERNACIONAL CONTRA LA ESCLAVITUD INFANTIL “¿Qué mal han cometido estos niños para merecer tanta desdicha? Desde una perspectiva humana no es sencillo, es más, resulta imposible responder a esta pregunta inquietante. Solamente la fe nos ayuda a penetrar en este profundo abismo de dolor”, con este llamamiento lanzado por Juan Pablo II durante esta Semana Santa, el Papa pidió por los más pequeños que sufren condiciones ingentes de vida y sobre todo, por los que viven en la esclavitud. Este es el caso del niño paquistaní Iqbal Mashib, asesinado el viernes hace nueve años y en cuya memoria diversas instituciones celebran hoy el Día Internacional contra la Esclavitud infantil. El 16 de abril de 1995, Iqbal, militante de la sección infantil del Frente de liberación del Trabajo Forzado de Pakistán, fue asesinado a la edad de 12 años por la mafia de la tapicería, después de múltiples amenazas, por cerrar empresas en las que todos los trabajadores eran niños esclavos. Su ejemplo trascendió internacionalmente, siendo premiado en Estocolmo y Boston y dedicando el premio para abrir una escuela, donde al colocar la primera piedra mostró su intención de continuar con la lucha contra la esclavitud infantil. En su memoria, símbolo de los más de 200 millones de niños esclavos de la actualidad se quiere reivindicar el día de su muerte como Día Internacional contra la Esclavitud Infantil ya que de esos 200, más de la mitad tienen menos de 5 años. “Convertirse en pequeños y acoger a los pequeños son dos aspectos de una única enseñanza, - recordaba Juan Pablo II, añadiendo - que el Señor renueva a sus discípulos en nuestro tiempo. Sólo aquél que se hace pequeño es capaz de acoger con amor a los hermanos más pequeños”. Pero la situación sigue siendo dramática para los más pequeños. La explotación infantil continúa aumentando en todo el mundo - se multiplica en el Sur empobrecido y reaparece en el Norte enriquecido - como consecuencia del comercio internacional, el monopolio tecnológico, la pasividad y cinismo de los organismos internacionales, así como por las políticas económicas impuestas por las instituciones financieras internacionales (Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, etc) y su complicidad con los gobiernos para favorecer a las grandes compañías internacionales.
MADRID: CELEBRACIÓN SOLEMNE DE LA FIESTA DE LA DIVINA MISERICORDIA En Madrid, en la catedral de la Almudena, se celebró con especial solemnidad el próximo 18 de abril, II Domingo de Pascua, la fiesta de la Divina Misericordia. La ceremonia comenzó con el rezo del Rosario de la Divina de la Misericordia meditado por D. Miguel Ángel Arribas, director espiritual del Seminario Mayor de Madrid, seguido de la Eucaristía presidida por el Cardenal Arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela. Este acto estuvo organizado por el Movimiento Apostólico Divina Misericordia, Asociación Pública de Fieles de la Diócesis de Madrid y presidido por el sacerdote D. Diego Martínez Linares. Jesús, en Ti confío, es la invocación que enseñaba la joven mística polaca santa Faustina Kowalska, canonizada por el Papa en mayo de 2000. El 17 de agosto de 2002, en su último viaje a Polonia, Juan Pablo II encomendó el mundo a la Divina Misericordia, al dedicar el nuevo santuario de Lagiewnikie, en Cracovia. La devoción a la Divina Misericordia se fundamenta en la misma Sagrada Escritura, y se desarrolla en la historia de la Iglesia mediante los sacramentos, la liturgia y el culto que se ha practicado a la Misericordia de Dios. En 1980 Juan Pablo II publicó la encíclica Dives in misericordia (Rico en misericordia), sobre la misericordia de Dios, dando una especial relevancia a este culto. En la Iglesia son varios los santos que recuerdan este culto y devoción: san Juan Eudes, presbítero, santa Margarita María de Alacoque, santa Teresa del Niño Jesús, carmelita, y otros santos que, además de su ejemplo de vida, nos han dado testimonio de su experiencia, por revelación, de la misericordia de Dios. Recordamos que esta celebración quedó instituida como fiesta para la Iglesia universal, como se refleja en el Decreto de 5 de mayo de 2000, de la Congregación para el Culto divino y la disciplina de los sacramentos.
RESPONSABILIDAD DE CRISTIANOS EN CONSTRUCCIÓN DE UNA EUROPA UNIDA Los miembros de la Comisión de las Conferencias de Obispos de la Comunidad Europea (COMECE) han organizado una serie de eventos, desde el 16 al 24 de abril, para remarcar la responsabilidad de los cristianos en la construcción de una Europa unida. Este acontecimiento se produce ante la inminente entrada en la Unión Europea de diez nuevos miembros: Chipre, República Checa, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Malta, Polonia, Eslovaquia y Eslovenia. Por este motivo la Iglesia, presente en todas las naciones europeas, también ha querido contribuir al éxito de una Europa más unida. Desde el 17 de abril, los obispos encabezan a 300 peregrinos de 25 países en el centenario camino de Santiago de Compostela. A ellos se han unido religiosos y laicos que han respondido a la llamada de los Obispos de la Comunidad Europea, entre los que se encuentran el Arzobispo de Santiago de Compostela, Monseñor Julián Barrio; el representante de la Iglesia Española Reformada Episcopal, el obispo Carlos López Losano; el antiguo miembro del Parlamento Europeo y actual miembro de la Presidencia de la Convención Europea, Iñigo Méndez de Vigo; y el arzobispo Manuel Monteiro De Castro, Nuncio Apostólico en España. “A través de los siglos, la esencia de la peregrinación a Santiago de Compostela ha sido la conversión al Dios vivo a través del encuentro con Jesucristo”, de esta forma el arzobispo de esta ciudad Monseñor Julián Barrio Barrio recordó lo que decía el mensaje pontificio para el Año Jubilar Compostelano 2004 enviado por Su Santidad; “la importancia” de este peregrinaje, remarcando que “a pesar de la actual crisis cultural que, en ciertos aspectos, repercute en la vida de algunos cristianos, debemos reafirmar que el Evangelio sigue siendo una referencia fundamental para el Continente”. Con los actos que se celebrarán durante esta semana se quiere recalcar la responsabilidad de los cristianos en la construcción de una Europa unida, fiel a los valores de su fe”. El sábado quedó abierta oficialmente esta peregrinación en Santo Domingo de Silos, desde donde se ha iniciado una primera marcha corta, como símbolo de este “camino de esperanza”, para después viajar a Burgos. Desde Burgos, tras la celebración del domingo de una eucaristía presidida por el Nuncio Apostólico en España, Monseñor Manuel Monteiro de Castro, en la capilla de Santa Tecla de la catedral burgalesa, la marcha continua hasta llegar a León y Ponferrada el lunes. Y, el martes, después de diferentes altos en el camino, alcanzará Santiago de Compostela, donde los peregrinos entrarán por la Puerta Santa de la catedral, abierta con ocasión del Año Santo 2004, donde serán recibidos por el arzobispo de Santiago quien recuerda el lema de este Año Santo: “Peregrinos por Gracia. ¿Qué conversación es la que lleváis por el camino?”, en referencia al relato evangélico de los discípulos de Emaús, imagen del peregrino cristiano muy adecuada para los peregrinos del nuevo milenio. El miércoles 21, para concluir los días de esta peregrinación, la eucaristía será presidida por el Presidente de la COMECE, Monseñor Josef Homeyer. Después de la llegada a la tumba del Apóstol Santiago, los obispos de la COMECE celebrarán un congreso titulado “Unión Europea: Esperanza y Responsabilidad. El desarrollo de la Unidad Europea desde una perspectiva teológica”, a la que asistirá como conferenciante el Cardenal Antonio María Rouco Varela. La semana de eventos termina con la Reunión Plenaria de Primavera de las Conferencias de Obispos de la Comunidad Europea en la que los obispos delegados de los nuevos países miembros de la Unión Europea participarán plenariamente por primera vez debatiendo en esta ocasión sobre el borrador de la Tratado Constitucional, las elecciones parlamentarias del 10 al 13 de junio y las negociaciones presupuestarias. El Consejo de Europa declaró el Camino de Santiago como Itinerario Cultural Europeo, en 1987, señalando el valor trascendental de la peregrinación en la formación de una civilización común a todos los pueblos europeos. El renacimiento de la peregrinación coincide con la formación de una nueva Europa, por este motivo los obispos y todos los fieles que les acompañen estos días quieren mostrar su apoyo al proyecto europeo. Santiago de Compostela, junto con Roma y Jerusalén, es uno de los lugares a los que se dirigen las peregrinaciones cristianas. Estas tienen dos orígenes distintos: uno, la veneración de los Santos Lugares en que vivió Jesucristo, y otro, el culto a los santos y sus reliquias. La peregrinación a Santiago nace a partir del descubrimiento del sepulcro con los restos del Apóstol, que al ser descubiertos, el rey Alfonso II el Casto decidió levantar una iglesia en el lugar, a partir de ahí se ha desarrollado el culto que motiva la peregrinación. El fortalecimiento de la ruta se produce a partir del año 1000; este hecho se sitúa en un marco general de expansión en Europa. Es en los siglos XI y XII cuando las peregrinaciones se convierten en un alud de personas procedentes de todos los puntos y en el año 1122 se estableció, finalmente, el Año Santo Compostelano, mientras que no fue hasta 1884 que el Papa León XIII declaró como auténticos los restos. Y para hablarnos con más detalle de esta peregrinación de los obispos de la Comisión de Episcopados de la Unión Europea a Santiago de Compostela con el fin de subrayar la responsabilidad de los cristianos en la construcción de una Europa unida, entrevistamos al arzobispo Julián Barrio Barrio.
«SACERDOCIO Y ACCIÓN CATÓLICA. ABIERTOS AL FUTURO CON ESPERANZA» «Sacerdocio y Acción Católica. Abiertos al futuro con esperanza». Es el lema del décimo encuentro general del apostolado seglar que se celebró el 13 y 14 de abril en Madrid. Con el objetivo de celebrar gozosamente los diez años de andadura del nuevo Proyecto de la Acción Católica y de estos encuentros de Pascua; profundizar en la misión de la Acción Católica en el contexto de la nueva evangelización y descubrir los retos que se presentan en la actualidad, este mismo encuentro en la capital española se propone dar a conocer la Acción Católica como instrumento singular de la Iglesia, para la formación de un laicado diocesano maduro y corresponsable, animando a los sacerdotes y seminaristas a acompañar a los Movimientos de Acción Católica como ‘consiliarios’. La presentación de esta cita estuvo a cargo del Arzobispo de Valladolid y Presidente de la Comisión episcopal española de Apostolado Seglar, Mons. Braulio Rodríguez, del Obispo de Ciudad Rodrigo y Obispo Consiliario de la Acción Católica, Mons. Atilano Rodríguez, y de la Secretaria General de este Movimiento laical, Beatriz Pascual Guijarro.
COLOMBIA: “LA CAMPAÑA POR LA RECONCILIACIÓN Y LA PAZ” 2004 “La Campaña por la Reconciliación y la Paz” 2004 que se está celebrando en Colombia durante todo este año, persigue el objetivo de acrecentar los compromisos de reconciliación y paz, como uno de los caminos para responder de forma concreta a la actual situación de conflicto familiar, social y armado que vive la región. La Conferencia Episcopal de Colombia aprobó la iniciativa de realizar durante el 2004 esta campaña, como un proceso de restitución de la dignidad y la humanidad de todas las personas víctimas del conflicto, la violencia y la injusticia social que se vive el país. Esta tarea se ha venido realizando desde los Secretariados de Pastoral Social de las jurisdicciones eclesiásticas que conforman la Regional. Esta Campaña está dirigida a familias, comunidades campesinas y parroquiales, instituciones educativas, organizaciones civiles y sociales que trabajan por la paz y la reconciliación, entidades gubernamentales a nivel local, departamental y regional, comunidades religiosas así como obispos sacerdotes y agentes de pastoral, con el fin de que todos ellos evangelicen por la Paz y los Derechos Humanos y se movilicen y hagan ver los gestos por la Paz en medio de la muerte, la injusticia y la descomposición social a nivel personal, familiar y comunitario. Precisamente por la Paz y la Reconciliación, el “Cristo del Agua” o “Señor de los milagros” de Buga (Colombia), realizará una peregrinación por diferentes zonas de Colombia, con una réplica de la talla, dadas las malas condiciones en las que se encuentra ya que, de acuerdo con los historiadores, la imagen tiene 430 años de antigüedad y tras el terremoto de 1776 y de dos atentados en 1938 y 1969 respectivamente, el Cristo se rellenó con yeso y material del río, de ahí la dificultad de ser trasladado. El “Cristo de las Aguas” se le apareció en 1580 a una anciana indígena que vivía a la orilla del río, en forma de estatuilla de madera que recogió y con el paso del tiempo la talla fue creciendo de tamaño hasta alcanzar medidas humanas. Ante el milagro, los devotos comenzaron a quitarle pedazos para llevárselo, razón por la cual ordenaron quemarlo. Durante la quema la imagen sudo copiosamente y no se destruyó, de ahí que se le denominara “Señor de los Milagros”. Con la muerte de la indígena, la imagen fue instalada en 1573 en una ermita y en 1666 el Obispo de Popayán declaró la imagen como milagrosa.
COMISIÓN ORGANIZADORA DEL V CENTENARIO DEL NACIMIENTO DE SAN FRANCISCO DE JAVIER También en España, a lo largo del año 2006 se celebrará el Quinto Centenario del Nacimiento de San Francisco de Javier y con tal motivo, se constituyó la comisión Organizadora de dicha conmemoración para poner en marcha la preparación y coordinación de los numerosos actos que tendrán lugar en honor del patrón de Navarra y de las misiones. La comisión está integrada por representantes de la Archidiócesis, de la Compañía de Jesús, del Gobierno de Navarra y del Ayuntamiento de Javier. En la ceremonia de constitución, llevada a cabo en el Palacio de Navarra, la comisión acordó el calendario de celebraciones que abarcará entre el 3 de diciembre de 2005 y la misma fecha del 2006. En la sesión se aprobó que en este periodo se celebre en Javier distintas concentraciones correspondientes a las Javieradas - en los días 5 y 11 de marzo y el 7 de abril de 2006, día en que se celebra, precisamente, el quinto centenario del nacimiento del santo.
PIEDAD POPULAR Y LA SEMANA SANTA Finalizada la Semana Santa tuvimos con nosotros al decano de la facultad de teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, padre José Román Flecha que nos habló sobre la Piedad popular y la Semana Santa
SUPERIORAS GENERALES Y PROVINCIALES DEBATEN EN ROMA CÓMO HACER HOY VISIBLE LA ESPERANZA EN UN MUNDO QUE CAMBIA Son cerca de medio millar las Superioras Generales y Provinciales que se reunieron desde el martes hasta el viernes, 16 de abril, en la Pontificia Universidad Urbaniana de Roma para debatir cómo hacer hoy visible la esperanza en un mundo que cambia, de manera que las religiosas de Italia y de Europa puedan construir un proficuo y evangélico intercambio generacional valorizando al máximo todas las edades de la vida y todas las situaciones que están llamadas a vivir en común las consagradas. La movilidad étnica, los usos y las costumbres, las culturas y las distintas religiones presentes en nuestra sociedad son una ocasión providencial que no hay que desatender porque pone a prueba la fidelidad al Evangelio de las religiosas y su pertenencia a la Iglesia, poniéndolas en contacto directo con los grandes problemas que afligen a la humanidad actual y obligándolas a cumplir actos y elecciones de solidaridad, de justicia y de fraternidad no solamente con el exterior, sino dentro de las mismas comunidades de vida. La temática elegida para esta Asamblea nacional de las Unión de Superioras Mayores de Italia está dividida en tres áreas. La primera comprende la reflexión de la vida religiosa en Italia y en Europa frente al fenómeno de la vejez. El desafío del diálogo y el intercambio generacional; la segunda temática pone el acento sobre vida religiosa frente al fenómeno socio cultural de la movilidad étnica y los desafíos que representan las nuevas fronteras para la solidaridad; y la tercera área se refiere a la vida religiosa en Italia y en Europa frente al fenómeno de una sociedad multi religiosa. |
