AUDIENCIA GENERAL: CRISTO DESCIFRA EL SENTIDO DE LA HISTORIA «Alabemos al Señor por el gran don de Cristo, que dio su vida por nosotros y que, con su obra histórica de redención, tiene la capacidad de descifrar el sentido de la historia». Juan Pablo II meditó en la catequesis, de su audiencia general de esta semana, sobre el himno de alabanza, de la Liturgia de las Vísperas, que pertenece a la solemne visión profética del Apocalipsis, inspirándose en «los preliminares del ‘gran día de Dios’», que «entrega al Cordero los destinos del mundo». Tras destacar que este himno - que alaba al Cordero que fue degollado y que con su sangre compró para Dios hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación, haciendo de ellos un Reino de Sacerdotes – presenta una «Liturgia celestial, a la que también nosotros, aún peregrinos en la tierra, nos asociamos durante nuestras celebraciones eclesiales», el Santo Padre señaló los dos elementos fundamentales que impulsan, precisamente, esta alabanza. El primero es el que se refiere a la celebración de la obra del Señor, la creación. Pues ésta, «revela, en efecto, la inmensa potencia de Dios», reiteró el Papa, evocando las palabras del Libro de la Sabiduría, que señalan que «de la grandeza y hermosura de las criaturas se llega, por analogía, a contemplar a su Autor». (13,5) En este contexto, citando asimismo lo que escribe el apóstol Pablo en su carta a los Romanos: «lo invisible de Dios, desde la creación del mundo, se deja ver a la inteligencia a través de sus obras» (Rm 1,20), Juan Pablo II puso de relieve la importancia «del canto de alabanza elevado al Creador para celebrar su gloria». El segundo elemento del himno que el Papa comentó se centra en «Cristo, Cordero inmolado». Aquél al cual, «los cuatro Seres y los veinticuatro Ancianos», aclaman con un cántico nuevo. «El centro de la alabanza es, por lo tanto, Cristo con su obra histórica de redención. Por lo que, precisamente por esta razón, Él tiene la capacidad de descifrar el sentido de la historia. Él es el que abre ‘los sellos’ del libro secreto que contiene el proyecto querido por Dios» (cfr. Ap 5,9). Reiterando que «toda la humanidad está llamada a formar la comunidad de hijos de Dios», el Santo Padre hizo hincapié en que este himno del Libro del Apocalipsis «se cierra con una aclamación final ‘en la voz de una multitud de ángeles’, su número era miríadas de miríadas y millares de millares… Es el momento de la contemplación pura, de la alabanza jubilosa, del canto de amor a Cristo en su misterio pascual». «Esta luminosa imagen de la gloria celestial es anticipada en la Liturgia de la Iglesia» - afirmó Juan Pablo II, recordando lo que enseña el Catecismo de la Iglesia católica. «Aquellos que la celebran, viven de algún modo, más allá de los signos, en la Liturgia celestial, donde la celebración es comunión y fiesta en su totalidad». El Santo Padre saludó, en distintas lenguas, a los numerosos peregrinos presentes en la Plaza de San Pedro. Éstas fueron sus palabras en español: Saludo con afecto a los fieles de lengua española, en particular a las Siervas de María Ministras de los Enfermos y a las Legionarias de María Inmaculada. También, a la Fundación ANDE y a los otros grupos venidos de España; a los peregrinos de México, así como a los demás visitantes de América Latina. Alabemos al Señor por el gran don de Cristo, que dio su vida por nosotros. Luego, en sus palabras a los jóvenes, a los enfermos y a los recién casados, Juan Pablo II se refirió a la solemnidad de Todos los Santos y a la conmemoración de los fieles difuntos, recién celebradas, así como a la memoria – que se celebraba el 4 de noviembre – de san Carlos Borromeo, particularmente especial para él. Y, tras desear que estas conmemoraciones impulsen a todos a «seguir el ejemplo de los santos, que han gastado su vida al servicio de Dios y del prójimo», el Papa agradeció las numerosas felicitaciones que le habían llegado de todo el mundo con motivo del día de su santo.
EL PAPA ASEGURA LA COLABORACIÓN CRISTIANA PARA IMPULSAR LA PAZ EN IRAK Al recibir el jueves al primer ministro de Irak, el Papa reiteró su cercanía al pueblo iraquí y sus oraciones por las víctimas del terrorismo y de la violencia injustificable y por los que trabajan por la reconstrucción, asegurando la colaboración de la comunidad cristiana en impulsar la paz en la región. Juan Pablo II recibió en el Vaticano, al primer ministro ad interim de Irak, Iyad Alawi, acompañado de su séquito. En su bienvenida, el Papa reiteró - una vez más - su «constante cercanía al pueblo iraquí, tan tristemente probado por los trágicos sufrimientos de los recientes años», así como sus oraciones «por todas las víctimas del terrorismo y de la violencia injustificable, por sus familiares y por todos aquellos que trabajan con generosidad en la reconstrucción de este país». El Papa señaló - también este jueves - que alienta los esfuerzos cumplidos por el pueblo de Irak para «establecer instituciones democráticas, que lo representen verdaderamente y que cumplan con el cometido de defender los derechos de todos. Respetando asimismo plenamente las diversidades étnicas y religiosas, que siempre han sido una fuente de enriquecimiento en este país». En este contexto, Juan Pablo II puso de relieve que confía en «que la comunidad cristiana - presente en Irak desde los tiempos apostólicos – podrá brindar su aporte en el desarrollo de la democracia y en la construcción de un futuro de paz en la región». El Santo Padre finalizó sus palabras invocando abundantes bendiciones del Todopoderoso sobre el primer ministro ad interim de Irak y sobre todo el amado pueblo iraquí. Después del encuentro con el Papa, el primer ministro de Irak, acompañado de su séquito, mantuvo un encuentro de trabajo con el cardenal Secretario de Estado, Angelo Sodano, en el que participaron también los monseñores Giovanni Lajolo y Pietro Parolin, respectivamente, Secretario y subsecretario para las Relaciones con los Estados; así como los oficiales de la Secretaría de Estado, Mons. Franco Coppola y Mons. Joseph Murpy. El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede declaró que «en el curso de las conversaciones se trataron varios aspectos de la situación en Irak, las perspectivas de pacificación y reconciliación que permitan sanar las profundas heridas del pasado y las repercusiones sobre la paz en la región. Asimismo, se hizo hincapié en la necesidad de asegurar la plena libertad religiosa y en la contribución que la comunidad cristiana puede ofrecer para la reconstrucción moral y material del país. El primer ministro deploró los ataques sufridos por algunas iglesias cristianas, asegurando, por parte de su gobierno, la voluntad de restaurarlas».
ARROJAR LUZ EN LA CONFUSIÓN DE UN MUNDO CADA VEZ MÁS GLOBALIZADO La cualidad espiritual de la vida consagrada puede conmover a las personas de nuestro tiempo, sobre todo “en los comienzos del tercer milenio, arrojando luz en la confusión que puede ocasionar un mundo cada vez más globalizado, irradiando paz y esperanza en tantas situaciones convulsas”. Juan Pablo II recibió el viernes al Capítulo General de los Agustinos Recoletos a quienes agradeció la actividad apostólica que desarrollan en 18 países. La profunda vida espiritual de los agustinos recoletos esta muy vinculada a la observancia y la contemplación, a la interioridad y búsqueda incansable de Dios. Este fascinador testimonio que ofrece la vida consagrada - subrayó el Papa- manifiesta también “la belleza inefable de Dios ante la carencia de valores supremos” y da “muestras de su amor por cada ser humano, creado a su imagen, aunque tantas veces desfigurado y sometido a una mentalidad destructora, insolidaria y excluyente. Reflejando en vuestro ser y actuar a Quien es “luz del mundo” (Jn 8, 12), serviréis a la Iglesia y a la humanidad, que siempre tiene hambre de Dios”. La oración asidua y la participación en los sacramentos son premisa fundamental para una acción apostólica fructuosa, pero Juan Pablo II mencionó en particular la Eucaristía como “mensaje viviente de concordia en un mundo dominado frecuentemente por la rivalidad y el conflicto”. En cuanto a la presencia de comunidades agustinas en países muy diversos y el progresivo aumento de religiosos provenientes de distintas nacionalidades, el Papa definió esta vida compartida en las comunidades como “un ensayo continuo de una comunión que, desde lo alto, sabe conjugar armoniosamente la diversidad de caracteres personales y de las tradiciones propias de cada país. Es la comunión de quien se alimenta del mismo Pan, permanece unido por el deseo incansable de buscar a Dios y se aglutina en el compromiso de servir incondicionalmente al Evangelio. En efecto, Cristo, al ser la “verdad completa” (Jn 16, 13), contiene toda la variedad de formas en que su luz se refleja en la multiplicidad de la realidad humana. El Pontífice subrayó la unidad que debe reinar entre todos los religiosos en torno a una misma vocación y misión en la Iglesia para invitar a los agustinos recoletos a vivir este clima de unidad y caridad fraterna “para dar ejemplo a todas las demás Comunidades y ser testimonio en la Iglesia y ante la humanidad de la riqueza espiritual que el Espíritu ha derramado sobre vosotros “para provecho común” (1 Co 12, 7). Los agustinos recoletos son una Orden religiosa española que remonta sus orígenes a la restauración católica de la segunda mitad del siglo XVI. Su nacimiento se sitúa en el mes de diciembre de 1588, en el seno de la provincia agustiniana de Castilla, con ánimo de instaurar un sistema de vida más austero y perfecto. En el siglo XIX la congregación experimenta un cambio profundo. Las desamortizaciones de España y Colombia la despojaron de sus conventos, impidieron la vida común y la transformaron en una comunidad apostólica y misionera. A principios del siglo XX la comunidad consiguió su plena autonomía jurídica. Los agustinos recoletos hunden sus raíces en san Agustín, su doctrina, espiritualidad y afán evangelizador, y viven la consagración a Dios destacando tres aspectos: la comunidad, la contemplación y el apostolado.
‘FE, PIEDAD POPULAR Y PECULIAR SENSIBILIDAD SOCIAL, CON ATENCIÓN ESPECIAL A LOS POBRES’ El Santo Padre recordó este viernes los desafíos del momento presente en el continente americano, al recibir a los participantes en la IX reunión del Consejo post sinodal de la Secretaría General del Sínodo de los Obispos para la Asamblea Especial para América. Entre estos desafíos Juan Pablo II enumeró «la acción nefasta de las sectas; las consecuencias negativas de la globalización, en especial cuando se atribuye valor absoluto a la economía; la creciente urbanización con su inevitable desarraigo cultural; el comercio y consumo de drogas; las ideologías modernas que señalan como superado el concepto de familia fundada en el matrimonio; el progresivo aumento de la brecha entre ricos y pobres; las violaciones de los derechos humanos; los movimientos migratorios y el complejo problema de la deuda externa». Sin olvidar «la cultura de la muerte que se expresa en múltiples formas, como la carrera armamentista y la execrable práctica de la violencia desencadenada por la guerrilla y el terrorismo internacional», el Papa expresó, sin embargo su satisfacción porque, a pesar de todo ello, «el pueblo cristiano puede contar con numerosos recursos para proseguir su misión, con renovada esperanza». Ante todo, Juan Pablo II recordó que el continente americano puede contar con «la fe, don que no sólo ha formado su identidad cristiana, sino que a lo largo de la historia, se ha manifestado en los principio y en los ideales morales que han alimentado la cultura de sus pueblos». «Otro gran don que la gracia divina ha suscitado en América» - destacó el Papa – es la piedad popular, que «convenientemente orientada, purificada y enriquecida con los elementos genuinos de la doctrina católica, «podrá ser un instrumento útil para ayudar a los creyentes a afrontar adecuadamente los desafíos de la secularización». Finalmente, Juan Pablo II puso de relieve «la riqueza de la peculiar sensibilidad social» - en especial hacia los pobres - de la Iglesia en América, que se manifiesta en una profunda solidaridad entre las personas y entre los pueblos. Y, en este contexto, el Papa recordó que fueron «precisamente, los Padres sinodales de la Asamblea General para América, quienes señalaron la oportunidad de preparar un ‘Catecismo de la Doctrina Social Católica’», sugerencia que el mismo Santo Padre ha querido acoger en su Exhortación apostólica post sinodal y que el Consejo Pontificio Justicia y Paz acaba de realizar, con la publicación del ‘Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia. Entre las iniciativas pastorales para desarrollar la comunión de todos los pueblos que viven en América, Juan Pablo II manifestó su profundo aprecio por los Congresos Americanos Misioneros, las Reuniones de los Obispos de la Iglesia en América y la celebración de Nuestra Señora de Guadalupe, Madre y Evangelizadora de América, como fiesta litúrgica en todo el continente.
SAN CARLOS BORROMEO, GRAN DEFENSOR DE LOS POBRES El Santo Padre evocó la figura de san Carlos Borromeo, «celoso pastor, reformador de la Iglesia después del Concilio de Trento y gran defensor de los pobres». Al recibir el jueves en el Aula Pablo VI a unos 600 peregrinos polacos, en su mayoría de las archidiócesis de Gdansk y de la diócesis de Tranów - que le felicitaron con motivo de su onomástica - Juan Pablo II deseó que todos se inspiren en el ejemplo de este santo arzobispo de Milán y cardenal, cuya memoria se celebra precisamente ese día. Recordándolo al comienzo del Año de la Eucaristía, el Papa expresó su anhelo de que san Carlos Borromeo «haga arder en nosotros el amor al Salvador, que quiso permanecer con nosotros bajo las especies del pan y del vino». El Pontífice agradeció las felicitaciones recibidas y, en particular, las oraciones que se elevan a Dios por las intenciones enlazadas con su servicio a la Sede de Pedro.
ES NECESARIO QUE LOS CRISTIANOS SEAN FERMENTO DE AUTÉNTICA RENOVACIÓN SOCIAL Juan Pablo II reiteró la importancia del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, como «subsidio útil para la formación y para el testimonio cristiano», tan necesario en la actualidad, en su audiencia a los miembros de la Banca de Crédito Cooperativo de Roma. «En todo tiempo - pero en especial en esta época nuestra - es necesario que los cristianos sean fermento de auténtica renovación social y levadura de esperanza evangélica en todos los sectores». Una vez más, el Papa reiteró este llamamiento al recibir a los dirigentes y socios de la Banca de Crédito Cooperativo de Roma, recordando, asimismo nuevamente, la importancia del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, publicado recientemente, como «subsidio útil para la formación y para el testimonio cristiano». Tras destacar que esta audiencia se desarrollaba en el marco del quincuagésimo aniversario de fundación del mencionado instituto de crédito, el Santo Padre recordó el anhelo de los fundadores de «brindar a la sociedad un servicio de solidaridad y mutualidad, inspirándose en los principios y enseñanzas de la doctrina social de la Iglesia». En este contexto, el Papa deseó que este banco pueda seguir por la misma senda, «teniendo siempre presentes las exigencias del bien común». Agradeciendo la atención que el mismo instituto de crédito «otorga a las comunidades eclesiales, a las parroquias, en especial a las rurales, y a las obras de promoción humana gestionadas por entes eclesiásticos o por comunidades religiosas», Juan Pablo II destacó que «ayudando las actividades de la Iglesia se contribuye a difundir el Evangelio y a consolidar la cultura del amor». Al finalizar su saludo, el Santo Padre alentó a los participantes en esta audiencia a «atesorar la experiencia alcanzada en las estructuras católicas del Crédito Cooperativo» y - como creyentes - a «tener siempre conciencia de que, para cumplir fielmente su cometido, deben cultivar un contacto asiduo y personal con Cristo».
PEREGRINACIÓN ANUAL CENTRO CULTURAL JUAN PABLO II DE ESTADOS UNIDOS El Santo Padre recibió, el viernes, a un grupo de miembros del Centro Cultural Juan Pablo II, provenientes de Estados Unidos en el marco de su acostumbrada peregrinación anual. En su saludo, el Papa destacó la promoción del diálogo entre fe y cultura, con el anhelo de que este centro ayude a propagar «la verdad del Evangelio y el conocimiento de las tradiciones de la Iglesia ante los grandes temas que se presentan en la sociedad contemporánea».
ÁNGELUS: "QUE CALLEN ARMAS Y SE RETOME EL DIÁLOGO" EN COSTA DE MARFIL El Papa pidió el domingo que cesen los enfrentamientos y se respeten los acuerdos de paz en Costa de Marfil, tras la escalada de violencia desatada por la muerte de nueve soldados franceses en un bombardeo de las tropas gubernamentales. Tras el rezo dominical del Ángelus, Juan Pablo II saludando a los africanos presentes en la Plaza de San Pedro, expresó su preocupación por las noticias que llegan de Costa de Marfil: "Que callen las armas y se retome la vía del diálogo", dijo el Papa, que ha encomendado a la población de ese país del noroeste de África "a María, reina de la paz". Entretanto la tensión se mantenía el domingo en Abiyán, capital económica de Costa de Marfil, tras una noche de violencia que estalló tras la muerte de nueve soldados franceses y la réplica del Ejército galo, que inutilizó la aviación militar marfileña. Según las emisoras internacionales captadas en Dakar, miles de seguidores del presidente Laurent Gbagbo salieron a la calle anoche cumpliendo un llamamiento del líder del grupo radical "Jóvenes Patriotas", Chales Ble Goude, que instó sus seguidores "a liberar el país, morir en la dignidad y no en la vergüenza". El llamamiento de Goude, lanzado por la televisión nacional, provocó la reacción inmediata de miles de jóvenes que intentaron tomar por asalto el aeropuerto internacional, en manos de las fuerzas francesas. Los manifestantes saquearon e incendiaron cuatro colegios franceses en Abiyán, y atacaron numerosos domicilios ocupados por galos en dos barrios residenciales. Costa de Marfil está dividida en dos desde hace más de dos años: el norte está controlado por las Fuerzas Nuevas, que se alzó en armas en 2002, y la mitad sur está en poder del Gobierno. Los dos bandos acordaron un alto el fuego en 2003, que era vigilado por 4.000 soldados franceses y unos 6.000 "cascos azules" de la ONU. Pero el jueves pasado, las tropas del presidente Gbagbo rompieron el alto el fuego y atacaron posiciones se las Fuerzas Nuevas, desatando un conflicto que tuvo sus momentos más graves ayer, sábado. Para hacer frente a la ofensiva gubernamental, según han referido a la Agencia FIDES algunos misioneros, los rebeldes han comenzado a saquear domicilios y misiones, apoderándose también de alimentos y medicinas. El Santo Padre dirigió al mediodía del primer domingo de noviembre, el rezo del Ángelus, desde la ventana de su despacho privado del Palacio Apostólico del Vaticano. En su reflexión, previa a la oración mariana, recordó cómo“la piedad popular dedica este mes al recuerdo de los fieles difuntos”. Piedad que se manifiesta en la oración confiada por su eterno descanso, sabiendo que, como afirma Jesús en el evangelio de hoy: “Dios no es un Dios de muertos, sino de vivos” (Lc 20,38). Esta confianza, continuó afirmando Juan Pablo II, se fundamenta en la certeza de que Dios siempre permanece fiel a la alianza sellada con el hombre, en la Pascua de Cristo, alianza que ni siquiera la muerte puede destruir. Alianza que se hace constantemente actual en el sacramento de la Eucaristía: “Aquí, por lo tanto, encuentra su culmen, también la oración por los difuntos. Ofreciendo por ellos la Santa Misa, los creyentes les sostenemos en su última purificación. Acercándonos con fe a la santa comunión, reforzamos con ellos los vínculos de amor espiritual”. El Papa pidió a María Santísima que interceda desde el Paraíso por todos nuestros seres queridos difuntos, y que refuerce en nosotros, peregrinos en la tierra, la fe en la resurrección final, de la que el sacramento de la Eucaristía es prenda. Juan Pablo II concluyó sus palabras recordando que el domingo se celebraba en Polonia el Día de los centros para enfermos terminales, con el lema También el centro para enfermos terminales es la vida, afirmando que es una gran obra de la misericordia la atención con la que el personal y los voluntarios acogen a las personas con enfermedades incurables o en trámite de muerte. El Papa pidió a Dios que recompense con su gracia el amor y la dedicación que les dispensan, y ha confiado a María a los que acompañan en sus propias familias a los que sufren. Y tras la oración mariana del Ángelus y de la intercesión por los fieles difuntos, el Pontífice saludó en diversas lenguas a los peregrinos congregados en la plaza de San Pedro. Este fue su saludo para los peregrinos de lengua española: Saludo a los peregrinos de lengua española, especialmente a los fieles de las parroquias del Corazón de María y San Agustín de Canarias, y El Salvador de La Palma y al grupo de la Marina Militar del Ecuador.
ORACIÓN ESPECIAL A DIOS POR LAS VÍCTIMAS DEL TERRORISMO Juan Pablo II antes del Ángelus del uno de noviembre, elevó una especial oración a Dios, por todas las víctimas del terrorismo y recordó que en ese día la Iglesia que peregrina en la tierra levanta su mirada al Cielo y se une exultante al coro de cuantos Dios ha asociado a su gloria. ¡Es la comunión de los santos! El Santo Padre Juan Pablo II, en la Solemnidad de Todos los Santos, volvió a reunirse con los files congregados en la Plaza de san Pedro para rezar a la Madre de Dios. “Alegrémonos todos en el Señor en esta solemnidad de todos los Santos”. Esta fue la invitación a la dicha que manifestó el Papa antes de la plegaria mariana del Ángelus. “La Iglesia que peregrina en la tierra levanta su mirada al Cielo y se une exultante al coro de cuantos Dios ha asociado a su gloria. ¡Es la comunión de los santos!”: “Precisamente a la luz de este estupendo misterio, celebraremos mañana la anual Conmemoración de todos los fieles difuntos. La Liturgia nos invita a dilatar el corazón y a rezar por todos, especialmente por las almas más necesitadas de la divina misericordia”. Seguidamente el Papa elevó a Dios una oración por las víctimas del terrorismo: “Una especial oración elevo a Dios, por todas las víctimas del terrorismo. Me siento espiritualmente cercano a sus familias y, mientras pido al Señor de aliviar su dolor, le invoco por la paz en el mundo”. “Que María, Reina de Todos los Santos, finalizó el Santo Padre, nos ayude a seguir fielmente a Cristo, para alcanzar la gloria del Cielo”.
FALLECE EL CARDENAL BELGA GUSTAAF JOOS Profundo pesar del Papa al conocer la noticia del fallecimiento del cardenal belga Gustaaf Joos. En un telegrama enviado al purpurado arzobispo de Malinas – Bruselas, Godfried Daneels, Juan Pablo II expresa su cercanía espiritual, en la oración, a la diócesis de Gante, a la Iglesia en Bélgica y a la familia del cardenal fallecido, evocando luego los años en que se conocieron en Roma, siendo compañeros de estudios entre 1946 y 1948. El Santo Padre pone de relieve el apostolado de este pastor fallecido, que él mismo creó cardenal en el último consistorio, el 21 de octubre de 2003. El cardenal Gustaaf Joos, había nacido el 5 de julio de 1923, en la diócesis de Gante, donde recibió la ordenación sacerdotal en 1946. Con la muerte de este purpurado belga, el Colegio Cardenalicio está integrado por 186 miembros, de los que 122 son electores.
ARCHIDIÓCESIS DE LANCIANO-ORTONA CELEBRA I CENTENARIO DE LA DEDICACIÓN DE LA CATEDRAL DE VIRGEN DEL PUENTE La archidiócesis italiana de Lanciano-Ortona celebra en 2005 el primer centenario de la dedicación de la renovada basílica catedral de la Virgen del Puente. Un acontecimiento de gran importancia para la archidiócesis, por lo que el arzobispo de la misma ha convocado un año eucarístico mariano especial, respondiendo al llamamiento realizado por Juan Pablo II en la Encíclica Ecclesia de Eucharistia. Con este motivo el Papa dirige un mensaje al arzobispo de Lanciano-Ortona en el que subraya la coincidencia de esta iniciativa con el Año de la Eucaristía que ha comenzado en octubre. En este sentido el Santo Padre expresa su deseo de que durante este año cada comunidad diocesana renueve públicamente su acto de fe en Jesús presente en el Sacramento del Altar e inspire toda su vida y su acción pastoral a esa espiritualidad eucarística que emana de las memoras evangélicas. “Esto vale en particular para la ciudad de Lanciano – escribe el Pontífice en su mensaje”. Una ciudad protagonista de dos milagros eucarísticos, meta de numerosas peregrinaciones provenientes de Italia y del mundo entero. El mismo Juan Pablo II cuando era cardenal en Cracovia, como recuerda en su mensaje, visitó la Iglesia de San Francisco en Lanciano, donde se conservan las reliquias del célebre milagro, que data del siglo VIII. El milagro de Lanciano al que alude Juan Pablo II narra cómo un monje, después de haber realizado la doble consagración del pan y del vino, comenzó a dudar de la presencia real del Cuerpo y la Sangre del Salvador en la hostia y en el cáliz. Fue entonces cuando se realizó el milagro ante los ojos del sacerdote que vio cómo la hostia se transformaba en carne viva y el vino, en sangre que se coaguló a su vez formando 5 piedrecitas irregulares de forma y tamaño diferentes. Tanto la carne como la sangre se han conservado intactas a lo largo de todos estos siglos. El Papa recuerda también en su mensaje otro gran don concedido a esta comunidad, donde según la tradición, se conservan los restos mortales del apóstol Tomás en la concatedral de Ortona.
CONSERVAR EL PATRIMONIO QUE HA HECHO ILUSTRE LA HISTORIA DE SICILIA El Papa insta a las nuevas generaciones de Sicilia para que sepan conservar intacto el patrimonio de los valores que han hecho ilustre la historia de la Isla, entre los que destaca la devoción a la Virgen Santísima. Juan Pablo II ha recibido con satisfacción la ferviente y coral respuesta de la Iglesia siciliana a las celebraciones del 150° Aniversario de la proclamación del Dogma de la Inmaculada Concepción. Así se lee en un mensaje enviado por el Pontífice al Cardenal Salvatore De Giorgi, arzobispo de Palermo y presidente de la Conferencia Episcopal Siciliana. El Papa reconoce, de modo particular, el trabajo realizado por los obispos junto con los ministros provinciales de las familias franciscanas, para volver a proponer al pueblo de Dios las profundas raíces históricas que la devoción de la Inmaculada posee en tierras sicilianas, que se remontan al siglo VI, durante la dominación bizantina. El Santo Padre, repasando la historia devocional, hace mención de las múltiples cofradías de María Inmaculada, así cómo en el siglo XVII, y por influjo español, vino solicitada oficialmente la proclamación del dogma. Por último, recuerda que la Inmaculada fue proclamada la Patrona principal de Sicilia. Juan Pablo II concluye su mensaje instando a las nuevas generaciones de Sicilia para que sepan conservar intacto el patrimonio de los valores que han hecho ilustre la historia de la Isla, siendo uno de los más importantes la devoción a la Virgen Santísima, de la que los fieles sicilianos siempre se han destacada.
GIORGIO LA PIRA, FIGURA EJEMPLAR DE LAICO CRISTIANO El Papa envió un mensaje al arzobispo de Florencia con motivo del centenario del nacimiento de Giorgio La Pira, que fuera alcalde de esta ciudad italiana. Un mensaje en el que se destaca la figura ejemplar de este laico cristiano, en su actividad política, social y administrativa. Poniendo de relieve la profunda espiritualidad de Giorgio La Pira, Juan Pablo II evoca «su mente iluminada por la fe, capaz de intuiciones y premoniciones sobre el camino de la Iglesia y del mundo, en especial, en lo que se refiere a la necesidad de la paz entre los pueblos y la superación de las ideologías ateas y materialistas». Asimismo, el Santo Padre hace hincapié en la actualidad de este alcalde de Florencia que «fiel al Magisterio de la Iglesia, tuvo el sentido de la laicidad auténtica y de la justa autonomía de los fieles en el ámbito de las realidades seculares. Percibió la función pública como servicio al bien común, desinteresándose por completo de los condicionamientos del poder, de la búsqueda de prestigio y de intereses personales». Juan Pablo II invita a rezar para que el ejemplo de Giorgio La Pira «impulse y aliente a todos los que desean testimoniar con su existencia el Evangelio en la sociedad actual, poniéndose al servicio del prójimo, en especial de los más pobres, que – en él - tuvieron siempre a un amigo solícito y fiel».
CLAUSURA I CONGRESO MUNDIAL DE ORGANISMOS ECLESIALES DE JUSTICIA Y PAZ Se clausuró el sábado 30 de octubre, en el Hotel Ergife de Roma, el primer Congreso mundial de los Organismos eclesiales que trabajan en el campo de la Justicia y de la Paz. Bajo el tema “Anunciar el Evangelio de la Justicia y de la paz” el congreso ha sido organizado por el homónimo dicasterio, que está presidido por el cardenal Renato Raffaele Martino, el cual nos hizo una reflexión sobre las consideraciones conclusivas del mismo tras una semana de trabajos en Roma. El compromiso pastoral por la paz; la doctrina social de la Iglesia como instrumento de evangelización; la identidad eclesial y los objetivos de los Organismos que trabajan por la justicia y la paz; la relación que existe entre el Pontificio Consejo y los organismos eclesiales, en este campo; la defensa y la promoción de los derechos del hombre; la actividad de la Iglesia en el ámbito social de los 5 continentes...fueron algunos de los temas abordados por los congresistas. Carlos Lara es un oficial del Pontificio Consejo Iustitia et Pax que nos hizo una reflexión sobre los trabajos del congreso.
COMUNIÓN Y MISIÓN EN EL AÑO DE LA EUCARISTÍA El cardenal Franzis Arinze presidió el martes en el Altar de la Cátedra de San Pedro de la Basílica Vaticana la Santa Misa conclusiva de la XI Conferencia Internacional de la Alianza Carismática. En su homilía, el purpurado recordó en este día de hoy la Conmemoración de los Fieles Difuntos. “La fe católica -dijo- nos enseña que aquellos que mueren en la gracia y en la amistad de Dios, pero son imperfectamente purificados, si bien está asegurada su salvación eterna, son sometidos, después de su muerte, a una purificación con el fin de obtener la santidad necesaria para entrar en la gloria del cielo”. Desde los primeros tiempos, la Iglesia ha honorado la memoria de los difuntos y ha ofrecido para su sufragio, en particular el sacrificio eucarístico para que, una vez purificados, puedan llegar a la visión beatifica de Dios. Luego, el cardenal Arinze recordó el tema de la Conferencia Internacional de los carismáticos: “Comunión y Misión en el Tercer milenio” y dijo que está en plena sintonía con el Año de la Eucaristía, inaugurado por el Santo Padre en esta patriarcal basílica hace tan sólo 16 días. La comunión surge de la Eucaristía y en ella se manifiesta. Esta comunión es en primer lugar con el mismo Jesús. Recibir la Eucaristía es entrar en comunión profunda con Jesús. La Eucaristía es manantial y manifestación de la comunión eclesial. La Iglesia es el Cuerpo de Cristo. En el misterio eucarístico, Jesús edifica la Iglesia como comunión. “Vosotros sois distintas comunidades del Movimiento Carismático de la Iglesia, y estáis convencidos -dijo el cardenal Arinze- de la necesidad de confesar, mantener, respetar y promover la comunión en la Iglesia, especialmente con el Santo Padre y con el obispo diocesano”. La Eucaristía finalmente promueve la comunión entre todos nosotros porque la recibimos del mismo Cuerpo y Sangre de Cristo. Los dos discípulos de Emaús, después de haber reconocido al Señor partieron inmediatamente. La Eucaristía nos manda a evangelizar el mundo, cada uno según su propia vocación y misión. La Eucaristía nos manda a promover la justicia, la paz y la armonía en al sociedad. Nos invita a tener solidaridad cristiana con los necesitados: los enfermos, los hambrientos, los pobres, los ancianos. Y pide a los países ricos que no olviden a los países en vías de desarrollo. XI CONFERENCIA INTERNACIONAL DE LOS CARISMÁTICOS
«LOS
NIÑOS, DON DE DIOS PARA EL FUTURO DE LA HUMANIDAD» También este año, al finalizar el Ramadán, el dicasterio del Papa para las relaciones con las personas de otras religiones ha enviado un mensaje a «los queridos amigos musulmanes». El documento está dedicado a «Los niños, don de Dios para el futuro de la humanidad». En un llamamiento a «aunar nuestros esfuerzos, recordando la dignidad todo ser humano - cuya existencia es querida por Dios mismo - denunciando sin desmayo todo lo que degrada a los niños y luchando con todas nuestras fuerzas, contra lo que Juan Pablo II califica como 'estructuras de pecado'», Mons. Michael Fitzgerald pone de relieve que, en varias oportunidades, en estos últimos años, los representantes de la Santa Sede y de los países de mayoría islámica han defendido juntos, en los organismos internacionales, los valores humanos fundamentales. Si bien sea verdad - señala el presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso - que al menos en algunas partes del mundo y en ciertos sectores, se ha concedido a los menores el beneficio de gozar del progreso en los derechos humanos, «tenemos que lamentar que demasiados niños siguen sufriendo todavía debido a distintos males». Males como aquellos trabajos tan gravosos, que comprometen el desarrollo físico y psicológico de los menores y que les impiden recibir la instrucción a la que tienen derecho. Cuando son obligados a enrolarse como niños soldados o quedan implicados en guerras y conflictos. Cuando son víctimas de abusos sexuales, de la prostitución, de ciertos cambios en la sociedad, del comercio y consumo de drogas, en especial en los países pobres. Víctimas del ignominioso tráfico de órganos y de la tragedia del sida. Mons. Michael Fitzgerald - insistiendo en que «con el futuro de los niños se juega también el de toda la humanidad» - reitera el anhelo de los cristianos de que pueda proseguir la colaboración con las comunidades musulmanas «al servicio de los niños». Aún más, que esta misma colaboración «se pueda desarrollar, brindando así una prueba ulterior del carácter benéfico de la religión en favor de toda la comunidad humana». Este mensaje, centrado en los niños, reitera la importancia de que sean acogidos, en las distintas etapas de su vida, por parte de sus padres, de sus familiares y de toda la sociedad. Todo niño «tiene el derecho inalienable a la vida», a recibir nutrición, protección y educación, reafirma el presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso, haciendo hincapié en que «los niños tienen derecho también a ser curados en caso de enfermedad o cuando son víctimas de algún accidente». «La vida de todo niño, así como la de todo ser humano, es sagrada», recuerda Mons. Fitzgerald, refiriéndose luego a que los musulmanes y los cristianos compartimos la visión religiosa de considerar a los hijos como una bendición de Dios. En este contexto, el prelado evoca las enseñanzas de Jesús, que nos presenta, precisamente a los menores, como modelos de sencillez, docilidad, alegría de vivir y sumisión confiada en Dios. El presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso, tras expresar sus mejores deseos a los musulmanes de todo el mundo, con motivo de esta fiesta, señala que «numerosos cristianos les han acompañado, también con la oración, en este tiempo de ayuno, que ocupa un lugar tan importante en la vida de las comunidades musulmanas». El mismo mensaje finaliza deseando a los musulmanes que sus hijos reciban fortalecimiento en este Ramadán, también en el cumplimiento de obras de bien. Aprendiendo a resistir ante las felicidades ilusorias o los placeres efímeros, conquistando libertad interior y entregándose confiados a Dios. Así como dando testimonio de la importancia de los valores religiosos.
DIÓCESIS
DE CABANATUAN (FILIPINAS) DIÓCESIS
DE BAMBARI (REPUBLICA CENTROAFRICANA) DIÓCESIS
DE ALEXANDRIA (ESTADOS UNIDOS) ADMINISTRADOR
APOSTÓLICO DE LITOMERICE (REPÚBLICA CHECA)
COMENTARIO A LA LITURGIA DEL DOMINGO DOMINGO
32 DEL TIEMPO ORDINARIO (C): 7 de noviembre de 2004 La primera lectura nos presenta el testimonio valiente de aquellos hermanos Macabeos, que morían a manos del tirano. Su fe firme en la resurrección les hacía fuertes ante el martirio. Resistían el tormento, por su confianza inquebrantable en que Dios, creador y fuente de la vida, se la devolvería para siempre. Y así, aquellos jóvenes eran capaces de responder al rey que los condenaba: «Tú, malvado, nos arrancas la vida presente; pero, cuando hayamos muerto por cumplir su ley, el rey del universo nos resucitará para la vida eterna». Lo mismo confesaba el que, ofreciendo sus manos al verdugo, le decía: «de Dios las recibí, y por sus leyes las desprecio; espero recobrarlas de nuevo del mismo Dios». O aquél otro de los hermanos que, a punto ya de morir, le advertía al que abusaba de su poder terreno: «Vale la pena morir a manos de los hombres, cuando se espera que Dios mismo nos resucitará. Tú, en cambio, no resucitarás para la vida». Esta convicción, en la que se mantuvieron aquellos hermanos hasta el final, encuentra su despliegue en la exclamación que hoy cantamos con el salmista: «Al despertar me saciaré de tu presencia». También Jesús quiere insistirnos en esta convicción, apoyándola no sólo en el poder creador de Dios, sino en la fidelidad a sus designios también... Aquel día se le acercaron a Jesús unos saduceos. Grupo este religioso que no creía en la resurrección de los cuerpos. Y así, le proponen a Jesús un caso ridículo para que lo resuelva. Según la ley del levirato, la viuda sin hijos debía ser tomada como esposa por otro hermano del difunto para darle descendencia. ¿Una que enviude varias veces con sucesivos hermanos, por no dejar hijos, de quién será mujer, si los muertos resucitan? La respuesta de Jesús es grave y contundente. Hay cosas con las que no se puede bromear. Cosas tan importantes como la vida, que de Dios es don; y la muerte, que no puede anular el poder de Dios. No se puede ridiculizar a Dios, aplicándole sin más los esquemas transitorios de la vida presente. Y, por eso, Jesús les contestó: «En esta vida, hombres y mujeres se casan; pero los que sean juzgados dignos de la vida futura y de la resurrección de entre los muertos no se casarán. Pues ya no pueden morir, son como ángeles; son hijos de Dios, porque participan en la resurrección». No, la vida de los resucitados no vendrá ya por generación carnal, sino que a ella seremos engendrados por el mismo Dios; no será una simple vuelta a otra vida como la que aquí tuvimos, sino esa participación en la vida misma de Dios por la que seremos en plenitud sus hijos. Admitir que la historia de un hombre termina con su muerte equivale a negar la existencia misma de Dios; ese Dios vivo que se ha manifestado en la historia de la humanidad, precisamente, como el Señor de la vida. Por eso Jesús termina advirtiendo a aquellos saduceos que creían en Moisés, pero no en la resurrección: «Y que resucitan los muertos, el mismo Moisés lo indica en el episodio de la zarza, cuando llama al Señor “Dios de Abrahán, Dios de Isaac, Dios de Jacob”. No es Dios de muertos, sino de vivos; porque para Él todos están vivos». Al igual que aquellos saduceos, muchos hombres y mujeres de hoy se muestran escépticos, cuando se habla de la resurrección de los muertos. No se imaginan una vida en plenitud, más allá de la presente. Y, cuando falta esta convicción, el hombre corre el peligro de gastar su vida en satisfacer todas sus apetencias y deseos; cae en la tentación de arremeter contra todo obstáculo que se oponga a sus ambiciones; se arriesga a la desesperación cuando llegue la enfermedad o las fuerzas se debilitan; pierde el significado definitivo que tiene su existencia en la vida y en la muerte; deserta de su vocación a la plenitud, malgastando sus días en lo que no tiene futuro. Jesús responde hoy a los saduceos con una confesión en el Dios viviente: un Dios que no dura para el hombre el espacio breve y fugaz de su vida terrena; sino que se muestra como Dios de todos los que viven ya para siempre en su presencia. Ese Dios que resucitó a Jesús, para que todo el que crea en Él no perezca, sino que tenga vida eterna (Jn 3,16).
LAS RELIQUIAS DE SAN AGUSTÍN EN ROMA Las reliquias de San Agustín serán expuestas, con motivo de las celebraciones conclusivas del 1.650 aniversario de su nacimiento, el 13 de noviembre del 354. Los restos mortales, del Santo Obispo de Hipona, que se custodian en Pavía, que llegaron el domingo a Roma, estarán expuestas a la veneración de los fieles, en la Basílica romana de San Agustín, en Campo Marzio, después en el Instituto Patrístico Augustinianum y en Ostia, donde recientemente ha sido declarado su Patrono. A lo largo de la semana el Santo Padre acogerá las reliquias en su capilla privada.
CONGRESO EUCARÍSTICO INTERNACIONAL EN GUADALAJARA El pasado mes de octubre se celebró en Guadalajara, México, el XLVIIIº Congreso Eucarístico Internacional, que concluyó solemnemente con una conexión vía satélite con la Basílica de San Pedro del Vaticano, en el marco de la cual Su Santidad Juan Pablo II abrió el Año de la Eucaristía. Para hacer un balance de este evento eclesial hemos entrevistado al P. Pedro Rodríguez que vivió el acontecimiento en primera persona.
OBISPOS SUIZOS CONTRA USO CÉLULAS ESTAMINALES EMBRIONARIAS Los obispos suizos han instado a los fieles a votar contra el proyecto de ley que permitirá el uso y consiguiente destrucción de embriones con fines científicos y que se votará el próximo 28 de noviembre. Ese día tendrá lugar un referéndum en Suiza para aprobar el uso, con fines científicos, de células estaminales provenientes de embriones supernumerarios. Habitualmente la Conferencia de obispos suizos no da indicaciones sobre el voto, pero en esta ocasión se presenta un tema bioético fundamental relacionado con la dignidad y la intangibilidad de la vida humana. Para los prelados suizos la ley sobre la investigación con las células estaminales embrionarias es una legislación inaceptable. Actualmente Suiza sólo permitía la producción de embriones con fines reproductivos. El 19 de diciembre de 2003 el Conejo Nacional y el Consejo de los Estados aprobaron la Ley federal relativa a la investigación sobre las células estaminales embrionales que prevé, entre otras cosas, el uso de embriones supernumerarios. Los obispos, que rechazan frontalmente el actual proyecto, recomiendan por el contrario la investigación con células estaminales adultas.
PARAGUAY: OBISPOS PIDEN REFORMA AGRARIA INTEGRAL PARA ACABAR CON CONFLICTOS SOCIALES La Iglesia Católica de Paraguay ha exigido a la clase política el diseño de "un proyecto serio de país" para hacer frente a los conflictos sociales registrados últimamente por el uso y la tenencia de la tierra. "Es urgente que los poderes públicos diseñen e implementen un proyecto serio de país para dar respuesta a los graves problemas y conflictos sociales relacionados con la tenencia y el uso de la tierra", destacan los obispos en un mensaje difundido al finalizar la 172 asamblea de la Conferencia Episcopal Paraguaya. Las invasiones masivas practicadas por grupos de campesinos como medida de presión derivaron el jueves en la muerte de un campesino en el departamento de San Pedro (centro), en momentos en que la Policía desalojaba a la fuerza de decenas de labriegos. Los "sin tierra" organizados responsabilizaron de lo ocurrido a las autoridades y al gremio de ganaderos, que consiguió del jefe de Estado, Nicanor Duarte, la promesa de aplicar "todo el peso de la ley" contra los invasores de tierra. "Los conflictos por la tierra, cada vez más acentuados y graves, exigen del Gobierno la urgente aplicación de una política viable de reforma agraria integral que no se reduzca a la simple repartición de tierras", señala la Comisión Episcopal. Los obispos paraguayos también expresaron su preocupación sobre otros problemas que afligen al país, entre ellos la corrupción y la impunidad, así como la sensación de inseguridad que se ha apoderado de la ciudadanía por los sonados casos de secuestros extorsivos.
XI CONFERENCIA INTERNACIONAL DE LOS CARISMÁTICOS “Comunión y Misión en el Tercer milenio”, fue el tema de la XI Conferencia Internacional de los carismáticos, llegados en peregrinación a Roma, pero que habían celebrado su reunión en Fiuggi, donde participaron más de 1.000 representantes de las Comunidades católicas de los cinco continentes. Sobre el objetivo y el carisma común de todas estas fraternidades, entrevistamos a Ignacio Cid García, un representante de México. ¿Cómo han enfocado este año de la Eucaristía, querido por Juan Pablo II? ¿Cuáles son los desafíos hoy para Iglesia? Entrevistamos también a una representante de Argentina, Julia Torres, a la que preguntamos cómo afrontan la difícil realidad del país las hermandades carismáticas? ¿Qué servicio brinda su comunidad a la archidiócesis? En Fiuggi, han participado carismáticos de todo el mundo ¿Cuál ha sido su impresión? COMUNIÓN Y MISIÓN EN EL AÑO DE LA EUCARISTÍA
XIII CAPÍTULO GENERAL DE LAS CARMELITAS MISIONERAS TERESIANAS La Congregación de la Carmelitas Misioneras Teresianas está celebrando en Roma su XIII Capítulo General bajo el lema: Pasión por la Iglesia: Dios y los prójimos. Y con el tema: “Las Carmelitas Misioneras Teresianas, mujeres de experiencia de Dios, interpeladas a reavivar con fidelidad y audacia nuestra acción misionera: ser profetas de la Iglesia Comunión en el mundo de hoy ”. Participan en el Capítulo 31 Hermanas representantes de los diversos países en los que la Congregación realiza su misión evangelizadora. Fueron fundadas por el español Francisco Palau Quer, en 1860 3n Ciudadela (Menorca). Su carisma viene determinado a raíz de la experiencia fundante de su Beato Fundador, que hizo de la Iglesia, Dios y los prójimos, razón de su vocación y misión. A finales del pasado mes quedó elegido el nuevo Gobierno General de la Congregación para el próximo sexenio. La Superiora General es la religiosa Luisa Ortega Sánchez y las cuatro Consejeras son: María del Pilar Biurrum Forsat, Victorina Bagalwa Amani-Sifa, Milagros Monera Lucas y Estrella Paredes Fernández. El Capítulo General prosigue sus sesiones según el programa previsto con el objetivo de revisar y re actualizar el espíritu y servicio misionero de la Congregación de manera que en su progresivo caminar, vida y apostolado, vaya haciendo más visible la belleza de la Iglesia en las comunidades y también en la misión compartida con los laicos que participan de la espiritualidad del fundador Francisco Palau. Por carisma eclesial, la Congregación se define misionera como Iglesia y en la Iglesia, misterio de comunión y comunidad de prójimos, que configura su ser y hacer en el anuncio y el servicio, que el Beato Fundador definió (la Obra de Dios” y que reclama de cada Carmelita Misionera Teresiana la consagración total a Dios y a los hermanos: “Si vivo, vivo por ti y para ti, Iglesia”.
"EL FUTURO DEL MUNDO, COMPROMISO DE TODOS” En los últimos diez meses no ha habido prácticamente ni un solo día de paz. Esta afirmación, esta realidad refleja la guerra en Irak, los atentados del 11 de marzo en Madrid, el conflicto palestino- israelí, el conato de guerra civil en Haití, los últimos actos terroristas en Rusia, .... , un sin fin de acciones de violencia y terror que a diario conmueven al hombre. Pero no sólo existen estos conflictos en el mundo, hay que hablar también de otra realidad. Enfrentamientos prácticamente desconocidos para la mayoría; son las guerras olvidadas de los países más pobres, como la República Democrática del Congo, Sudán, el norte de Uganda y un largo etcétera que agrupa a países donde los crueles conflictos internos provocados o acrecentados por el hambre, la constante vulneración de los derechos humanos, la miseria, la represión y la codicia llevan a la muerte a centenares de personas. Para luchar contra todas estas injusticias sociales, existen asociaciones humanitarias que trabajan mano a mano con las personas que sufren este tipo de realidad. Una de ellas es Manos Unidas, que en los últimos años ha denunciado la relación entre injusticia y pobreza como los principales factores que mueven al hombre a enfrentarse a sus semejantes de ahí que afirmen que "un mundo sin guerras es posible y necesario para que los hombres y mujeres vivan en paz, en armonía, en condiciones de justicia y de igualdad, para que la humanidad se apropie de su destino y construya un mundo en el cual quepan todos los mundos". Durante los próximos tres años Manos Unidas se ha puesto como objetivo concienciar a todos de que el futuro depende de cada uno de nosotros, de ahí que promueva la campaña: "El futuro del mundo, compromiso de todos". Este argumento se explica desde la perspectiva de la globalización, como fenómeno por todos nombrado pero que en muchas ocasiones no se sabe bien para que se debe utilizar. Pero veamos cual es el origen de esta terminología. Desde los años sesenta, se viene tomando conciencia del extraordinario aumento del intercambio de productos, ideas y poblaciones, con la consiguiente multiplicación de las relaciones entre los individuos, las familias, las organizaciones y las naciones. Lo mismo que Juan Pablo II explicó en su Sollicitudo rei socialis: "Hoy, más que antes, los hombres se dan cuenta de tener un destino que construir juntos sí se quiere evitar la catástrofe par todos" (Sollicitudo rei socialis, 26). La globalización, que podría significar, como señalaba el Santo Padre, la unión de todos los pueblos para conseguir un futuro mejor, demuestra que, como afirma Manos Unidas en su campaña, "hoy la realidad más globalizada es la pobreza de las personas enfermas por falta de agua potable; de los niños malnutridos, abandonados o explotados; de los refugiados; de los enfermos de SIDA y un largo etcétera". Pero todo esto no nos puede llevar a un rechazo de la globalización, porque ésta no "es en sí ni buena ni mala - explicaba en otro de sus mensajes el Obispo de Roma, porque - bueno es participar en ella, lo malo es no poder hacerlo". Por todo esto, Manos Unidas defiende otro tipo de globalización: la de la solidaridad, que asegure a los más pobres oportunidades de vida digna. En este sentido Juan Pablo II subraya que esta globalización de solidaridad "nos la exige el respeto a la dignidad humana y la fe en la igual dignidad de todos los miembros de la familia humana. Un mundo global es sustancialmente un mundo solidario". La afirmación "el futuro del mundo, compromiso de todos" puede sonar a tópico ingenuo, incluso demagógico, pero si pensamos, como afirma Manos Unidas, que se refiere a una responsabilidad comparada, la del ciudadano de a pie y la del presidente del país más poderoso de la tierra o quien sea, "el compromiso con el mundo es gradual, escalable, cada cual el suyo, pero una cosa es cierta, nadie tiene el derecho de sentirse ajeno al drama que el planeta está viviendo. Los compromisos de los ciudadanos y los procesos organizativos de la sociedad civil deben repercutir en el futuro del mundo y contribuir a humanizar el rumbo de la globalización. Tenemos que imaginar cómo recuperar entre todos la conciencia de la realidad para que pueda emerger el protagonismo de la sociedad civil y de los ciudadanos en el planeta, de este modo la globalización de solidaridad será posible y no viviremos con más días, meses, años de guerras.
AUMENTA EL NÚMERO DE DESPLAZADOS INTERNOS EN SUDAN Ante el deterioro de la trágica situación en Darfur, con un apremiante llamamiento al Ejército de liberación de Sudán y a las milicias árabes para que cese la violencia, el secretario general de la ONU presentó un informe al Consejo de Seguridad en el que expresó su profunda preocupación por la situación en esta región occidental sudanesa. Kofi Annan afirmó que ya asciende a dos millones la cifra de sudaneses que necesitan con urgencia de ayuda humanitaria en la región de Darfur y que la de desplazados internos se eleva a más de un millón y medio. El secretario general de Naciones Unidas hizo hincapié en que, desde el pasado mes de abril, ha habido un aumento del 100 por ciento del número de personas inocentes que huyen de la violencia. Denunciando las continuas violaciones al alto el fuego por parte de las fuerzas del ejército y la policía del Sudán y las milicias pro gubernamentales árabes Yanyauid, así como de los rebeldes del Ejército/Movimiento de Liberación del Sudán (MLS), Anan declaró que «tanto las fuerzas gubernamentales como los grupos rebeldes han expandido el territorio bajo su control, lo que contraviene el alto al fuego firmado el 8 de abril en Yamena, capital de Chad». Tras lamentar que, hasta el momento, no hayan dado fruto las conversaciones de paz para solucionar la crisis de Darfur, que se iniciaron el 23 de agosto en Abuja, Nigeria, bajo los auspicios de la Unión Africana (UA), la denuncia de la ONU abarca la operación llevada a cabo por el gobierno de Sudán, el pasado día dos de noviembre, con la que se obligó a numerosos prófugos de Al Geer a desplazarse al sur de Darfur. En lo que ha sido una «nueva violación del derecho humanitario internacional y de los derechos humanos». Asimismo Kofri Anan recordó que según las resoluciones adoptadas por la ONU, como un paso para la resolución de la crisis, el Gobierno de Sudán está obligado a proteger a la población civil y desarmar a las milicias Yanyauid, así como a llevar a los responsables de atrocidades ante la justicia. Los acuerdos alcanzados establecen un periodo de transición de seis años durante el cual la ley islámica no se aplicará a las comunidades sureñas y a cuyo término se celebrará un referéndum en el que la población del sur decidirá si se independiza del norte musulmán. El secretario general de la ONU manifestó su anhelo de que la reunión que el Consejo de Seguridad celebrará el 18 y 19 de noviembre en Nairobi (Kenia) sea una oportunidad para promover la paz en Sudán.
DÍA MUNDIAL PARA PREVENCIÓN DE LA EXPLOTACIÓN DEL MEDIO AMBIENTE EN TIEMPO DE GUERRA En recuerdo de "la difícil experiencia por la que pasó hace algunos años Kuwait, cuando esta región fue testigo de conflictos militares y de guerras cuyas funestas consecuencias tuvieron repercusiones adversas para su medio ambiente", la Organización de Naciones Unidas incluyó en el calendario el Día Internacional para la Prevención de la Explotación del Medio Ambiente en la guerra y en los conflictos armados, que se celebra cada 6 de noviembre en todo el mundo. En la guerra del Golfo, en 1991, las tropas iraquíes destruyeron miles de pozos de petróleo en Kuwait, el combustible ardió en el desierto o llegó al mar, acabando con la pesca y destruyendo el ecosistema. Entre todos los desastres que ocasionan las guerras es muy importante el daño medioambiental que provocan. Un daño a los seres humanos y a la naturaleza que puede perdurar hasta mucho después de que se haya restablecido la paz. La preocupación por estos daños en el medio ambiente comenzó durante la guerra de Vietnam, que enfrentó a Vietnam del Norte con Vietnam del Sur entre 1959 y 1975. La intervención de EE.UU. en este conflicto, que utilizó potentes herbicidas para destruir la selva en la que se escondía el enemigo, provocó la destrucción del 20% de la selva de Vietnam del Sur. Desde entonces miles de niños y niñas han nacido en las zonas atacadas con terribles deformaciones a causa del producto químico empleado, llamado "agente naranja". Asimismo, las minas y los campos minados son una amenaza permanente para las personas y la vida salvaje. Además de las muertes y mutilaciones que provocan (muchas veces después de que haya acabado el conflicto) impiden el acceso y el cultivo en grandes áreas de tierras fértiles, necesarias para el sustento de la población. Otra causa de daños al medioambiente son los movimientos de refugiados. En la guerra de Ruanda, los miles de refugiados que se desplazaron hacia la República Democrática del Congo destruyeron en poco tiempo 300 km2 de bosques buscando leña y algo para comer. En esa región algunos movimientos guerrilleros llevan tiempo consiguiendo dinero para armamento destruyendo los bosques y vendiendo las maderas valiosas, o acabando con los elefantes para conseguir marfil. Sin embargo, aunque no se hayan valorado los daños ambientales de los conflictos armados hasta hace relativamente poco (porque también en la actualidad la capacidad destructora del ser humano es mayor que en el pasado), el uso del medio ambiente con fines militares no es nuevo. Hace ya 5.000 años, en las disputas entre ciudades en Mesopotamia, se demolían los diques y las presas para inundar los campos enemigos como estrategia de guerra. Todas las guerras provocan daños ambientales. Algunos son deliberados, por razones militares. La defoliación del Vietnam corresponde a esta categoría. Otras destrucciones, también deliberadas, persiguen un objetivo militar menos claro, como el sabotaje ordenado por Sadam Hussein de los pozos petrolíferos de Kuwait en 1991, en el momento culminante de la guerra del Golfo. Los estudios realizados cinco años después demostraron que el ecosistema costero saudí se había restablecido en gran parte, pero la población de tortugas que anidaba en las islas del Golfo no recuperó su nivel anterior. Esa guerra causó otros perjuicios al desierto. Miles de búnkeres, de escondrijos de armas y de trincheras rompieron el lecho de grava que permitía contener las dunas. Los daños al medio ambiente provocados por las guerras son en buena medida involuntarios y “colaterales”. Además se estima que en total hay 65 millones de minas antipersonal siguen amenazando a la población y a la vida salvaje en 56 países, de Angola a Nicaragua, de Eritrea a Laos. Hoy por hoy, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente señaló, en el sur de Guinea, una “transformación de las zonas salvajes y forestales”, con “graves consecuencias para la biodiversidad y la red hidrográfica”, a raíz de la llegada de unos 600.000 refugiados que escapaban de los recientes conflictos en los vecinos países de Sierra Leona y Liberia. Asimismo, durante la guerra del Kósovo, los efectos de los bombardeos de fábricas en el medio ambiente a menudo se destacaron más en las noticias que los perjuicios económicos que se intentaba provocar. También es evidente que las acciones militares rusas en Chechenia o en Afganistán fueron igualmente nefastas para el entorno que las de Estados Unidos y de sus aliados en el Sudeste Asiático, en el Golfo o en otros lugares. Pero la información disponible es mucho más escasa y las investigaciones independientes brillan por su ausencia. En Chechenia, los combates militares son tan violentos que por ahora los perjuicios sufridos por el medio ambiente y la contaminación del agua apenas han despertado interés, pese a su importancia probable cuando llegue el momento de la reconstrucción. Y en Afganistán el carácter permanente de los conflictos hace difícil cualquier evaluación seria de las consecuencias de veinte años de guerra. Por todas estas brechas abiertas en el mundo que perjudican no sólo a quienes las viven en primera persona, sino también a todo el medio ambiente que se ve dañado por la indiscriminación que la guerra provoca porque pocos son los que piensan en todo lo que nos rodea y debemos ser conscientes de que cuidando el medio ambiente nos cuidamos a nosotros mismos, por este motivo, el llamamiento de la ONU para celebrar este Día Internacional para la Prevención de la Explotación del Medio Ambiente en la guerra y en los conflictos armados cobra una importancia renovada estos días.
5.000 NIÑOS MUEREN AL DÍA POR FALTA VACUNAS. LLAMAMIENTO DE UNICEF 5000 niños mueren al día por falta de vacunas. UNICEF hace un llamamiento a los gobiernos del mundo para frenar la mortalidad infantil, contribuyendo a la vacunación de los niños en su primer año de vida. El mundo acordó reducir en dos tercios la mortalidad infantil para el 2015 y no lo está cumpliendo. Esta es la conclusión a la que ha llegado UNICEF en su informe "Progreso para la infancia", a través del cual pretenden hacer un llamamiento a los gobiernos para que mantengan sus compromisos políticos en lo que al cuidado de los niños se refiere. Ya que cada año se producen aproximadamente 11 millones de muertes infantiles, sobre todo debido a enfermedades prenatales, como diarreas, paludismo y sarampión, a los conflictos armados y al SIDA. Por todas estas muertes de niños en el mundo, el Fondo Mundial para la Vacuna, reclama más ayuda económica para poder atender a los niños que siguen sin ser vacunados en todo el mundo en su primer año de vida, de los cuales tres millones mueren de una enfermedad que podría ser evitada. Los datos hablan por sí solos: unos cinco mil niños mueren cada día en el mundo por falta de vacunas. Para poder hacer llegar estas vacunas a todos estos recién nacidos que carecen de los medios adecuados, se necesitaría una inversión global mayor, como ha denunciado el Fondo Mundial para la vacuna, porque "no sólo es un problema de justicia y equidad", sino también "de contribución al desarrollo", como explica Jacques- Francois Martin, presidente de la asociación. Y es que no sólo se trata de solventar los problemas superficialmente, sino que un mal estado de salud general, acarrea el comienzo de un círculo vicioso que afecta a otros ámbitos como el económico y el educacional; si se mejora uno, repercute positivamente e el resto. Desde hace cuatro años, la Alianza mundial y el Fondo Mundial para la vacuna, han contribuido a la vacunación de casi 45 millones de niños de menos de cuatro años entre los más pobres del mundo, lo que ha permitido salvar más de medio millón de vidas. Una de las zonas más castigadas por esta falta de vacunación ha sido Haití, donde UNICEF ha lanzado un programa de emergencia. El programa incluye el envío de equipos médicos y suministros que ayudan a reducir las tasas de enfermedades entre los niños y la mortalidad materna. Como denuncia el propio UNICEF “incluso antes de la crisis actual, los niños y niñas de Haití estaban entre los más vulnerables del mundo“. A pesar de lo terrible de los actuales acontecimientos, se nos presenta una ocasión para centrar la atención del mundo en la situación de los niños y niñas en este país. Esta es la tercera emergencia humanitaria en Haití en lo que va de año, pero a pesar de las desafiantes condiciones la meta principal es salvar la vida de los niños y niñas.” Pero no es la única zona en alerta, Sudán, Darfur y el Caribe viven una crisis que afecta sobre todo a los más pequeños. Granada, República Dominicana, Jamaica, y otras naciones de la región han sido gravemente afectadas por la temporada de huracanes. “Hay que moverse rápido”, este es el llamamiento de UNICEF para todos los gobiernos porque “hay al menos 8.000 personas viviendo en refugios temporales. No tienen nada. Han perdido todo en las inundaciones, y los niños carecen de vacunas para poder protegerse contra enfermedades tan simples como la gripe” declara UNICEF. La población en riesgo incluye 30.000 niños y niñas menores de cinco años y 8.000 mujeres embarazadas o en periodo de lactancia. Por todo esto, es necesario que se conciencie a la población y a los gobiernos de la necesidad de hacer llegar vacunas y medios a estos países que carecen de ayuda, porque hoy por hoy, en el siglo XXI no podemos permitir que niños y niñas mueran en el mundo por no tener acceso a una simple vacuna. |